Evangelina Anderson reveló cómo era su vida antes de saltar a la fama y conocer a Martín Demichelis. ¿A qué se dedicaba?

Detrás de la mujer que decidió dejar todo en Múnich para acompañar a su pareja en el sueño de ser entrenador de River existe una Evangelina Anderson desconocida. Es que previo a saltar a la fama tuvo varios trabajos en los cuales debió pelear desde abajo. 

Hoy en día Evangelina Anderson se encuentra feliz de haber abandonado todo en Alemania para acompañar a Martín Demichelis, su pareja, en el sueño de ser el entrenador de River. La modelo no temió a la hora de reinventarse debido a que esto fue moneda corriente a lo largo de su vida.

Cuando la modelo y actriz salió del colegio, decidió comenzar a estudiar para convertirse en maestra jardinera. Como todo lo que se propone en la vida, Eva logró con su cometido, aunque ejerció la profesión por poco tiempo y ya no volverá a hacerlo. 

“Yo soy maestra de nivel inicial y aunque no esté ejerciendo hoy en día sé del amor, dedicación y paciencia que forman parte de la enseñanza. La educación empieza siempre desde casa, de eso no hay duda. Pero los maestros son muy importantes en la vida de nuestros hijos. Yo recuerdo con muchísimo amor a cada uno de los que pasaron por mi vida”, reveló desde sus redes sociales. 

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En este sentido, Evangelina Anderson duró poco en su profesión debido a que comenzó a bailar en Pasión de Sábados aproximadamente en el 2002. Allí formó parte del grupo de bailarinas hasta que la esposa de Jorge Corona la contactó para que se sume a sus shows, por lo que así inició su camino en la fama en 2004.

En el 2007, conoció a su gran amor y padre de sus hijos: Martín Demichelis. Es que el futbolista la fue a ver a una obra teatral y allí ocurrió el flechazo. Gracias a una broma de sus amigos logró entablar una conversación con ella, con quien hubo química desde el principio.

Ya en pareja con Micho, Evangelina Anderson se enfocó en la crianza de sus hijos. Sin embargo, siempre se ocupó de seguir haciendo lo que más le gusta. Es por eso que decidió empezar a estudiar para convertirse en profesora de yoga, demostrando una vez más su pasión por la enseñanza.

“La práctica del yoga me da diferentes herramientas que apoyan no solo a mi salud física sino también a la felicidad. En una armoniosa y balanceada relación que trasciende el nivel personal para abrazar a la humanidad, alcanzando una relación fuerte con la naturaleza y con todo lo que es vida. Estoy tan feliz de seguir enriqueciéndome en este hermoso camino. Enseñando con amor y compasión”, comentó hace tiempo en sus redes sobre las pasiones que mantiene activas hasta el día de hoy.

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