La Generalitat restaura el cuadro "San Rafael Arcángel y Tobías" de la Concatedral de San Nicolás de Alicante

El Institut Valencià de Conservació finaliza los trabajos en el lienzo, obra del pintor canario del siglo XVIII Juan de Miranda, que se expondrá en Madrid y Canarias dentro de una muestra que organiza el Gobierno insular con motivo del 300 aniversario del artista grancanario

El lienzo de la Concatedral de San Nicolás que se ha restaurado

El lienzo de la Concatedral de San Nicolás que se ha restaurado

La Conselleria de Cultura ha finalizado la restauración del lienzo "San Rafael Arcángel y Tobías" y su marco original, propiedad de la Concatedral de San Nicolás de Bari de Alicante. Los trabajos los ha realizado el Institut Valencià de Conservació, Restauració i Investigació (IVCR+i), dependiente de la Vicepresidencia y Conselleria de Cultura y Deporte, con motivo de una exposición en Madrid de este óleo sobre lienzo de 175 x 107 cm, obra del afamado pintor canario del siglo XVIII Juan Ventura de Miranda Sejas y Guerra.

Este lienzo participará en la muestra "Juan de Miranda lo Pintó. La Travesía de un artista canario entre el Barroco y la Ilustración", que se inaugura próximamente en el Museo madrileño Lázaro Galdiano, organizada por la Viceconsejería de Cultura y Patrimonio Cultural del Gobierno de Canarias, en colaboración con Acción Cultural Española AC/E, según ha informado este domingo la Conselleria de Cultura.

Esta iniciativa se encuadra dentro del programa de actos que conmemoran los trescientos años del nacimiento del artista Juan Ventura de Miranda (Las Palmas de Gran Canaria, 1723-Santa Cruz de Tenerife, 1805), que se cumplieron el 13 de julio, y que se están desarrollando a lo largo de 2023 y 2024.

Además, la muestra contará con un ciclo de conferencias en las que participará la jefa de sección de pintura de caballete y escultura policromada del IVCR+i, Fanny Sarrió, en las que explicará los procesos de restauración que se han realizado tanto al lienzo como al marco.

Tras su paso por Madrid, la muestra se expondrá también en el IES Canarias Cabrera Pinto de La Laguna y en la Casa de Colón y Centro de Artes Plásticas (CAP) de Las Palmas.

Proceso de restauración

Previamente a la intervención del cuadro, el equipo multidisciplinar del IVCR+i, formado por físicos, químicos, restauradores e historiadores del arte, realizaron diversos estudios con lo que detectaron que el lienzo presentaba un soporte muy debilitado que obligó a su entelado. Por otra parte, ofrecía un cromatismo muy alterado por el efecto de la oxidación de los barnices y repintes que se le habían hecho a la obra con anterioridad.

La restauración ha consistido en la eliminación del barniz no original y los repintes que existían por debajo de éste. Con ello se recuperó el cromatismo primitivo, y las pequeñas lagunas o faltantes se reintegraron cromáticamente.

Por su parte, el marco está formado por una moldura de plata corlada que presentaba una alteración de difícil reversibilidad, por lo que se optó por eliminar dicha corla y dejar la plata con su embolado original. La reintegración de las lagunas se ha realizado con plata en polvo a las que se ha aplicado una veladura de acuarela y un barniz sintético coloreado imitando la corla original.

Asimismo, se ha reconstruido cromáticamente la zona de los ángulos, que conservaba la policromía original y se han tallado en madera y reintegrado volumétricamente la molduras que faltaban.

Juan de Miranda, artista barroco

Juan de Miranda Sejas y Guerra (Las Palmas de Gran Canaria, 1723–Santa Cruz de Tenerife, 1805) fue un afamado pintor tardo barroco español que estuvo activo en Canarias, donde ejerció mayoritariamente su arte, si bien también podemos ver obra suya en otras localidades españolas.

Hijo de un zapatero, su inclinación por las artes lo llevó a trasladarse a La Laguna en 1748, donde se encuentran sus primeras obras. En 1752 el juzgado de La Laguna lo condenó a seis años de prisión por “trato ilícito” con Juana Martín Ledesma, con quien vivía amancebado y había tenido una hija, además de llevar un arma blanca desenfundada en el momento de la detención.

Tras varios suplicatorios del pintor a la Audiencia para no ser encarcelado, en los que aludía que mantenía a su pobre madre y hermanas, que era maestro de otros pintores y que dejaba la isla huérfana de pintor que atendiera las necesidades artísticas del clero y la burguesía pues no había otro pintor tan dotado para las artes plásticas como él, o que le dejaran finalizar las obras que tenía empezadas, finalmente en 1755 fue ratificada la sentencia e ingresó en el presidio de Orán en 1757 para cumplir la condena.

Desde la cárcel de Orán Juan de Miranda siguió ejerciendo el arte de la pintura, y buena prueba de ello es el lienzo titulado El rey Fernando III el Santo recibe en Sierra Morena a los embajadores de Mahomad rey de Baeza, que envió en 1760 al concurso de primera clase de pintura de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando.

Posteriormente a esta fecha no se tienen noticias suyas hasta que en 1767 aparece en Alicante, donde realiza unas pinturas para la capilla del consistorio municipal, fecha en la que también podemos pensar que realizó la obra fruto de este estudio y restauración.

Tras recorrer algunas ciudades españolas y conocer a Mengs en Madrid, en 1773 regresó a Canarias, estableciéndose en Santa Cruz, donde pintó la mayor parte de su producción artística con destino a la iglesia. También realizó algunas obras para la catedral de Las Palmas de Gran Canaria, y para Tenerife, ciudad donde falleció en 1805 tras otorgar testamento el 10 de septiembre de dicho año.