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      Dulce Navidad benedictina

      Las monjas de la Abadía de Santa Escolástica preparan exquisiteces siguiendo tradicionales recetas de su Orden. La novedad: el turrón de pistacho, almendras y arándanos.

      Dulce Navidad benedictinaCLAIMA20121116_0211 La receta de este pan dulce es misterio que se perdió en el tiempo.
      Redacción Clarín

      En la mesa de Nochebuena, hay sabores que son casi una excusa para continuar año tras año con los legados y costumbres de familia y mantener siempre intacta la magia de las navidades de la infancia.

      Para brindar después de la llegada de Papá Noel, los dulces no pueden faltar. Y, si se quieren seguir a rajatabla los ritos típicos, el pan dulce (mucho mejor cuando es de preparación artesanal) siempre tiene una presencia estelar.

      Uno de los recomendados es el que elaboran desde hace varios años las monjas benedictinas de la Abadía de Santa Escolástica. Reconocido por su textura húmeda y esponjosa, su receta es un gran misterio y dicen que se pierde en el tiempo.

      Hay varias presentaciones para elegir: con frutas glaseadas y secas (incluye cognac, pasas rubias, ananá, higos, ciruelas, damascos, naranja, cerezas al marraschino, nueces, almendras, avellanas y castañas de cajú), sólo con frutos secos (nueces, almendras, avellanas y castañas de cajú) y con frutas glaseadas y secas relleno de helado, una versión atractiva y más veraniega, ideal para nuestro clima.

      Otra especialidad es el tradicional Stollen, típico pan dulce alemán, de masa especiada rellena con crema pastelera, ciruelas remojadas en rhum y chips de chocolate.

      ¿Más delicias para completar la mesa? Los turrones de pistacho, frutilla y arándano o la nueva opción con almendras -vienen con una tablita de madera para cortarlos prolijamente- y las galletitas de miel con formas de arbolitos –las preferidas de los chicos- completan las especialidades de la Orden.

      Además, ofrecen panforte di Siena, mazapanes, bombones elaborados con chocolate belga, variedad de alfajores y de galletitas finas, trufas, marrón glacé, ciruelas rellenas con dulce de leche bañadas en chocolate belga, tortas inglesas y galesas, stollens, figuras de chocolate en diseños exclusivos y cupcakes con decoración navideña.

      El dato extra: los productos vienen presentados en vistosas canastas, listas para regalar. Porque ya es tiempo de comenzar a pensar en los preparativos para las fiestas y no dejar las compras para último momento.  

      Los locales de la Abadía de Santa Escolástica se encuentran en Martín Rodríguez 547, Punta Chica, y Libertad 1240, P.B. local 19 (Pasaje Libertad).