El mapa del desarrollo en Brasil

Brasil, el mayor y más poblado de los países de América Latina, es todavía un país en desarrollo, aunque su mapa muestra un gran contraste entre el norte y el sur del país. Es decir, entre las regiones fronterizas con Argentina y Uruguay, países con un Índice de Desarrollo Humano muy alto, y las regiones del norte de Brasil, mucho más atrasadas.

El Índice de Desarrollo Humano, o IDH, es un indicador adoptado por el PNUD como índice de referencia para medir el progreso y la mejoría de un país en términos socioeconómicos. Se calcula a partir de la esperanza de vida, el PIB per cápita y el nivel educativo. Todo ello ofrece una medición relativamente simple del bienestar material, el bienestar intelectual y la salud, aunque obvia aspectos como los desequilibrios internos y la desigualdad.

Por lo general, se acepta que aquellos países y territorios con un IDH muy alto (de más de 0,8) se consideran desarrollados. En el mapa de Brasil solo el Distrito Federal, donde se encuentra Brasilia, la capital, alcanza valores tan altos. El resto del país estaría, en base a estos valores, en vías de desarrollo.

El IDH medio del país es de 0,765 (2019), y si se traza una línea que divida las regiones por encima y por debajo de este valor es fácil comprobar la importante fractura que existe entre el norte y el sur del país. Solo la muy poco poblada Roraima, en el extremo norte del país, en la selva amazónica, tiene valores por encima de la media en el norte, mientras que el resto de estados con un IDH superior a la media están concentrados al sur del país.

El mapa del desarrollo en el mundo

En el lado opuesto del mapa de Brasil se encuentran Maranhao y Piauí, los estados con menor índice de Desarrollo Humano del país. Este desequilibrio geográfico en torno al IDH esconce, a su vez, diferencias concretas en factores como el acceso a la educación, las oportunidades económicas, la densidad de población o la presencia de grupos étnicos. Los estados del sur son los estados con mayor alfabetización, mientras que los del noreste tienen niveles considerablemente más bajos. Este diferente acceso a la educación es histórico, y aunque en la actualidad la educación básica es generalizada, la brecha se remonta varias generaciones atrás.

La desigualad en el acceso a la educación también ha sido causa y consecuencia de una peor situación económica, con una tasa de desempleo mucho mayor en el norte que en el sur. Una diferencia que, en último término, también es racial: los estados del sur son de mayoría blanca, con grandes comunidades de descendientes de la migración europea tras la independencia de Brasil.

El mapa del analfabetismo en Brasil

Por su parte, el norte del mapa de Brasil es de mayoría «parda», mestiza, con importantes comunidades negras en lugares como Bahía y una sociedad y economía de base colonial, con grandes plantaciones y un muy desigual reparto de la tierra y la riqueza.

En el interior del país, la extensa sabana del cerrado y la selva amazónica, poco pobladas, presentan retos de desarrollo diferentes. La baja densidad ha dificultado la prestación de servicios públicos, y las comunidades remotas, especialmente algunas indígenas, se han visto privadas del acceso a servicios públicos y recursos económicos. La colonización agrícola reciente de parte de ese espacio, sobre todo desde el sureste, está cambiando rápidamente el panorama mientras se generan grandes contrastes internos y nuevos desequilibrios en el mapa del desarrollo de Brasil.

El mapa de la densidad de población en Brasil