Cuando Rey Mysterio empezó a entrenar en Tijuana bajo la tutela de su tío Rey Misterio Sr., su sueño era simple. Sólo quería ser un luchador enmascarado y luchar en los más grandes escenarios de México.
“Tenía un sueño y mi sueño era ser luchador, ser igual que mi tío, ser un luchador enmascarado, donde la gente no me conociera, donde pudiera tener yo una vida privada. Cuando me quitara la máscara, quería que la gente no supiera quién era yo”, dice Rey Mysterio a The Sporting News. “Y mi sueño era luchar en la Arena México, de luchar en el Toreo de Cuatro Caminos, en la Arena Puebla. Todo eso, ese era mi sueño. Obviamente, cuando inicias y las oportunidades se te presentan, van creciendo más y más. Cada puerta que se va abriendo es más grande”.
En el transcurso de ya 34 años de carrera, en efecto, sí se fueron abriendo puertas más grandes para él. Este 31 de marzo entrará a la más grande de todas. Rey Mysterio será exaltado al Salón de la Fama de WWE, la mayor empresa de lucha libre del mundo, durante las festividades de WrestleMania 39.
“Es algo muy bonito, una bendición muy grande. Yo creo que aquí es donde se reflejan todos los sacrificios que has hecho… Es algo inesperado, algo que yo siempre pensaba que después de que te retirabas era la presentación”, analiza Mysterio. “Sin embargo, ha sucedido en plena carrera. Pero todavía no estoy listo para retirarme. Y lo primero que pensé fue, ‘Me quieren retirar y yo no estoy listo’. Pero es algo que realmente es muy bonito, muy emocionante. Es un logro que después de esto ya no hay más que seguir. O sea, ya llegaste a la cima de la cima y lo único que tienes que hacer ahora es disfrutar de tu momento y es lo que siempre he hecho. Siempre he disfrutado lo más que he podido de cada momento. Pero es un logro que no venía venir”.
El amo del 619 será exaltado en plena carrera debido a que WrestleMania 39 se llevará a cabo en el Sofi Stadium de Los Ángeles, a dos horas del área de San Diego y Tijuana donde Rey creció y vive. Y tomando en cuenta que el área angelina tiene una inmensa comunidad hispana, WWE consideró que el escenario y momento eran perfectos para inmortalizarlo de una vez.
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“Yo no iba a decir que no. Dije, ‘Si digo que no, al rato a lo mejor no me lo dan’”, expresa Mysterio con una risa. “Entonces, aproveché y acepté”.
En casi 30 años de existencia, Rey es solo el segundo luchador que es exaltado al Salón de la Fama de WWE en activo. El primero fue Ric Flair en 2008. Dos noches tras ser inmortalizado, The Nature Boy perdió una lucha retiro contra Shawn Michaels en WrestleMania 24.
Además, Mysterio también será el cuarto gladiador que es producto de la lucha libre mexicana que entra al Salón. El primero fue Eddie Guerrero en 2006. Luego siguieron Mil Máscaras (2012) y El Santo (2018). Este último lo hizo bajo la categoría de Legado, la cual reconoce a los pioneros de esta disciplina.
Mucho agradecimiento
Cuando se llega a la cúspide de una carrera, normalmente no se llega solo, hay una base de personas que también ayudaron a forjar el camino hacia la cima. Para Mysterio dos de estas personas son su mentor y colega, el exluchador Konnan, quien lo estará presentando en la ceremonia del Salón de la Fama, y su esposa Angie, quien ha estado con él desde el comienzo de su trayectoria.
“Tengo una lista grande de gente que ha sido parte de mi carrera. Y claro, primeramente, Dios, que sin Dios yo no fuera lo que soy hoy en día. Después le agradezco a Konnan. Él fue el que me abrió las puertas y el que creyó en mí para poder llegar a lo que soy hoy en día. Tienes que tomar en cuenta que tú puedes ser el mejor de los mejores, pero si nadie -y especialmente en ese tiempo, a principios de los 90- te ayudaba a entrar a cierto lugar, tú te quedabas siendo uno de los mejores en tu ciudad nada más… Y Konnan fue esa persona para mí”, afirma. “Y después de eso, mi esposa. Hicimos una pareja increíble, porque sin el apoyo de ella no lo hubiera logrado. Ella fue a mi primera lucha. Ella estuvo desde el primer día conmigo y hasta hoy en día ha estado a mi lado”.
Mysterio tampoco se olvida de sus compañeros de oficio con los que sostuvo las grandes luchas que lo catapultaron.
“Hay tantos compañeros que sin ellos no existiría Rey Misterio. Psicosis es uno de ellos. Dean Malenko es otro de ellos. Eddie Guerrero es otro”, los enumera. “Y así te puedo mencionar una lista de luchadores con los que estoy completamente agradecido por la ayuda y la oportunidad que me brindaron”.
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Un legado grandioso en la tierra de gigantes
El gran talento de Rey lo llevó rápidamente a convertirse en una superestrella de la lucha mexicana y cumplir sus sueños iniciales. Fue uno de los pilares en el surgimiento de una de las empresas luchisticas más importantes de México, AAA.
Sin embargo, la espectacularidad y audacia de Mysterio lo llevarían a probar suerte en un ámbito impensado para un luchador de su biotipo, la lucha libre de Estados Unidos.
Hasta la década de los 90, el Pro Wrestling americano era la tierra de gigantes. Se practicaba un estilo con castigos de poder que era dominado por gladiadores con más de seis pies de altura y que parecían montañas de músculos. Con una estatura de cinco pies y seis pulgadas, menos de 200 libras de peso y un estilo aéreo y de llaveo, Mysterio claramente no cabía dentro de este modelo.
“Desde AAA ya venía algo muy especial con respecto al prototipo del luchador que es conocido en México. Algo ancho, a lo mejor bajito, pero de tamaño plano, como Super Astro, por decir. Super Astro fue uno de los más grandes y a pesar de su baja estatura, tenía un físico como Super Ratón”, explicó. “Mi físico no era nada parecido a eso. Mi físico era flaco, delgadísimo, bajo de estatura. Entonces, ahí simplemente rompí el molde de lo que debería de parecer un luchador. Y pues, ¿qué te digo? En Estados Unidos completamente se rompió el molde”.
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Este molde se empezó a romper en la lucha libre estadounidense cuando la habilidad y la técnica dentro del ring comenzaron a cautivar más a los aficionados que el simple tamaño. Luchadores no tan corpulentos y altos como Bret Hart y Shawn Michaels ya encabezaban las grandes funciones de WWE (entonces WWF).
El cambio de filosofía le ayudó a Rey a abrirse camino en EE.UU, primero con la compañía ECW y luego con WCW, que entre 1996 y 1998 llegó a ser más popular que WWE.
En WCW, Mysterio formó parte de la ya mítica división de peso crucero, en la cual él y otros grandes luchadores mexicanos presentaron el estilo aéreo a la lucha estadounidense y produjeron luchas inolvidables con su extraordinaria rapidez y acrobacia. El espectáculo trepidante e innovador de Rey y compañía no solo ayudó a generar grandes ratings para WCW en su intensa guerra televisiva con WWF, que no tenía algo parecido, sino que también revolucionó el estilo de la lucha libre americano. Hoy en día es normal ver a gladiadores ágiles desafiar la gravedad noche tras noche.
“Es un logro muy satisfactorio, un logro que la verdad en su momento no pensamos que pudiéramos conseguir. No estás actuando pensando: ‘Yo voy a cambiar, yo voy a cambiar el estilo y yo voy a cambiar el tipo de cómo la gente percibe al luchador físicamente’”, indica Rey hablando sobre lo que significa para él ser uno de los pioneros de la lucha área en EE.UU.
“Lo haces simplemente por tu pasión y por el cariño que tienes al deporte. Y poco a poquito el público es el que va cambiando su perspectiva. Ellos son los que van diciendo: ‘Te aceptamos o no te aceptamos, nos gusta o no nos gusta’. Y fue un trabajo en equipo, un trabajo entre Psicosis, Juventud Guerrera, Rey Misterio, Konnan, La Parka, Los Villanos, Silver King, Héctor Garza, Eddie Guerrero, El Dandy... Fue la gente que fue parte de WCW en los 90 que introdujo por primera vez lo que era la lucha libre mexicana a una empresa tan grande como lo era WCW”.
WWE, la cumbre
Aunque en WCW Mysterio voló alto, fue en WWE donde realmente tocó el cielo. Llegó a esta empresa en 2002 y de inmediato se coinvirtió en una figura de alto perfil al trascender la división de peso crucero y pelear de tú a tú con los pesos pesados.
“Mi primera presentación en WWE fue en 2002, cuando luché contra Chavo Guerrero. Ahí empieza la historia de Rey Mysterio en WWE”, recuerda. “Dejó un buen sabor en el público. Se quedaron encantados con lo que vieron de Rey Mysterio. Para la gente que no me conocía --porque había muchos que nunca habían visto a Rey Misterio, nada más habían escuchado de él-- me pudieron ver por primera vez ahí”.
Dentro de más de 20 años como parte de WWE en varias etapas, Rey lo ha hecho todo. Ha ganado todos los títulos posibles y un Royal Rumble. Y ha estelarizado grandes veladas ante rivales de la talla de Eddie Guerrero, Kurt Angle, Edge y John Cena.
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En cuanto a su lucha más importante en WWE, no cabe duda que es la que protagonizó en WrestleMania 22. En uno de los combates estelares del magno evento se midió a Angle y Orton, y ganó el primer campeonato de peso pesado de su carrera. Más allá de alcanzar la cima por primera vez, el logro tuvo otro significado bastante personal para Mysterio. Lo consiguió en memoria de su gran amigo Eddie Guerrero, quien meses antes había fallecido.
“Tener la oportunidad de pelear por el campeonato en WrestleMania fue un momento grande”, excalmó. “Ya con la pérdida de Eddie Guerrero la gente de alguna manera lo miraban a través de mí. Entonces, cada logro que yo conseguía era mío y de Eddie. Entonces, eso fue algo muy bonito, muy bonito”, concluye. El recuerdo es eterno, como lo serán sus legados y el de Rey Mysterio, el nuevo miembro del Hall of Fame de la WWE.