A la venta por 225 millones la casa más cara de Estados Unidos que perteneció a los Hilton

Ahora mismo no hay vivienda a la venta más cara en Estados Unidos que la conocida como la Casa Encantada. Salió al mercado la semana pasada por 225 millones de dólares (algo más de doscientos millones de euros), haciendo trizas todos los récords anteriores y desafiando el enfriamiento que vive el mercado inmobiliario estadounidense. La encuentran en Los Ángeles, California.

La que fue propiedad del magnate Conrad Hilton, el fundador de la cadena hotelera y bisabuelo de Paris Hilton, cuenta con el consabido despliegue de recursos: 60 habitaciones con vistas en 4.000 metros cuadrados, una sala de cine profesional, pista de tenis, casa de invitados, varios invernaderos, cancha de baloncesto independiente, una piscina de impresión, fuentes por doquier y un nivel de detalle arquitectónico, tanto interior como exterior, imposible de replicar, según Jeff Hyland, el agente inmobiliario encargado de la venta de la mansión.

"¿Podríamos replicar esta casa hoy en día? En absoluto", plantea Hyland. "No podríamos encontrar a los artistas. Están todos muertos". Y es que la casa se terminó de construir en 1937, en los años posteriores a la Gran Depresión, encargada por la viuda de un millonario. El arquitecto James Dolena la diseñó y en 1950 Hilton entró en la jugada. El hotelero se hizo con la casa por 225.000 dólares.

Resultó ser otra operación descomunal para el empresario. Vendió la mansión de Bel Air 30 años después a David Murdock por 12 millones de dólares, quien a su vez hizo lo propio con Gary Winnick, el fundador de Global Crossing, una empresa de telecomunicaciones.

Su precio de salida, esos 225 millones de dólares, no garantiza ni mucho menos que se vaya a adjudicar por una cifra cercana. Hace unos meses, el magnate Bruce Makowsky puso a la venta su megamansión por 250 millones de dólares, también en Los Ángeles, un récord entonces que ha quedado reducido a los 150 millones de dólares actuales. Incluso a esos niveles, el mercado parece estarse tomando un respiro tras años de bonanza.

Hyland asegura al Los Angeles Times que "una casa de esta magnitud no se ve afectada por giros en el mercado o asuntos de economía mundial", que su historia y su pedigrí están por encima de factores fundamentales en la venta de casi cualquier otra propiedad en EEUU.

Es una historia similar a la de la mansión Playboy, vendida en 2016 por 100 millones de dólares, en gran parte por los eternos relatos de orgías, fiestas y desventuras de Hugh Hefner, el fundador del imperio erótico más famoso del mundo. O la del productor Aaron Spelling, The Manor, por la que se pagó 119 millones de dólares en verano, una mansión ubicada en Holmby Hills. La Casa Encantada aspira a destronarla.

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