Cultura

LETRAS REBUSCADAS. Superman y Robín bisexuales: el cómic americano se abre pero no convence como el manga

El cómic ha estado experimentando la inclusión; han aparecido, como nunca, personajes femeninos y de otras nacionalidades y procedencias raciales distintas; hasta han cambiado de sexo y de etnia

En esta última década, el cómic ha estado experimentando una verdadera revolución: la revolución de la inclusión; han aparecido, como nunca, personajes femeninos y de otras nacionalidades y procedencias raciales distintas a la caucásica y estadounidense; y algunos personajes ya existentes han cambiado de sexo y de etnia.

El caso más típico es el de Miles Morales el nuevo Spider-Man de madre puertorriqueña y de padre afro-descendiente y qué decir del gigante esmeralda: Hulk, cuyo alter ego mudo de Bruce Barnner al asiático Amadeus Cho.

Debemos preguntarnos si los cómics, dígase de la casa Marvel, DC o de otros sellos más alternativos como Imagen, Dark Horse, Top Cow…  intentan reflejar y alegorizar en sus páginas una sociedad cada vez más global, diversa e inclusiva o, si por el contrario, sus creativos desean influir sustantivamente en su realidad defendiendo una pluralidad, siempre existente, visibilizado y dándole representación en las páginas de sus historietas a los grupos culturales y étnicos antes excluidos o marginados.

El arte es el espejo de la realidad en sus formas esenciales; o por el contrario la realidad es anticipada y orientada por el arte. Este es el eterno dilema del huevo y la gallina.Quizás ambas sean verdad sin mutuamente excluirse.

En este tenor y dándose aires de un progresismo no siempre bien aceptado por su público lector, la Casa de las Ideas, Marvel, ya nos presentó una nueva versión del Capitán America,menudita o pobre en masa muscular, con un atuendo desenfadadamente casual (viste de overol y playera) y tiene, además, la particularidad de identificarse como gay, sólo le falta ser vegano (y tal vez lo sea).

Para no quedarse a la saga: DC Comic también sorprendió no creando un nuevo súper-tipo, sino redefiniendo las identidades y preferencias sexuales de dos de sus más icónicos personajes: Superman y Robín: habría que preguntarse ¿cuál de todo los supermanes y de los robíns son los que cambiaron a una identidad no binaria; dado que son tantos y se multiplican por el hoy tan de moda multiverso?

En el caso de Robín se trata de Tim Drake y en lo referente a Superman este es Jonathan Kent, el hijo precisamente de Clark Kent y de Lois Lane.

Como ocurrió con la muerte del Hombre de Acero, del hijo de Krypton, la prensa y las redes sociales dieron la noticia sobre la nueva orientación sexual de su hijo;quien ahora, como se verá en el cómic por llegar en noviembre de este 2021, sostendrá un romance con JayNakamura, un colega de oficio, es decir también es periodista. Todo comenzó, según narra la historieta publicada en agosto, como una tierna y cerca amistad, pero en la siguiente entrega de este arco terminarán dándose un beso. Habrá que esperar para atestiguar este momento idílicamente LGTBI.

Según informó DC Comics, la casa editorial dueña de tan icónicos personajes del mundo de los super-tipos como Batman, Wonderwoman y claro Superman; la escena amorosa tendrá lugar con un Jon Ken cansado física y emocionalmente por tantas batallas libradas, es en ese momento de debilidad que aparecerá en su rescate para darle fuerza y aliento su amigo Jay.

El autor de esta nueva serie intitulada “Son of Kal-EI”, Tom Taylor señaló que el viraje que le dio al personaje al pintarlo de arcoíris permite que más gente se identifique con el más poderoso superhéroe de los cómics.

La anterior situación se replica con Tim Drake, el Robín en turno; nuevamente este personaje el cual, más allá del mito de si todo Robín era la pajera platónica de Batman, no había dado indicios de sentir alguna atracción por los hombres; por el contario, entre las mujeres con las que llegó a salir (no pocas por cierto) está la propia Stephanie Brown, con la que sostuvo un amor prohibido al ser la hija de un villano de Ciudad Gótica, Cluemaster.

Como con el hijo de Superman, sorprende que sin trabajar el cambio de orientación sexual, nuestro Robín repentinamente esté por iniciar un idilio con un joven de su edad. La historia de este juvenil romance LGTBI inicia en el cómic “Batman: UrbanLegends”,de DC Comics en su sexta entrega, escrita por Meghan Fitzmartin y dibujada por Belén Ortega, en sus páginas se cuenta cómo Drake acepta tener una cita romántica con BernadDowd; a quien, usando su identidad de superhéroes, había salvado previamente de una secta que lo secuestró. ¿En qué terminará esta cita? Eso se relevará en la séptima entrega de “Batman: UrbanLegends”.

 

Cómic Vs. manga

Los casos de Tim Drake y de Jonathan se han prestados en las redes sociales para el análisis y la discusión: obvio que las mentes más inclusivas o progresistas junto con algunos integrantes de la comunidad LGTBI han celebrado el ser ahora representados por dos icónicos personajes del cómic.Por otra parte, los círculos duros de los fans de los cómics han cuestionado estas transformaciones de identidad de género señalando que además de forzadas van en contra del perfil y la orientación que estos personajes venían mostrando desde siempre; muchos de estos críticos en sus blog y canales de YouTube se preguntan si el reetiquetar como bisexuales a estos superhéroes no se deberá a una mala estrategia mercadotécnica y publicitaria ideada para suscitar escándalo y morbo, y de esa manera levantar las ventas de sus respectivas historietas.

Otras voces del Internet y de los medios creen que en el afány noble tarea de los creativos, escritores y dibujantes de adoctrinar al fandom de los superhéroes sobre los principios de una nueva moral y conciencia progresista que defiende la inclusión, la diversidad y la tolerancia, se están olvidando que el lector de cómics lo que reclama de las historietas son arcos y tramas ingeniosas, inteligentes y bien planteadas; personajes interesantes que sin importar su orientación sexual o identidad de género justifiquen su existencia al cautivar a los lectores por su complejidad psicológica, lo novedoso de sus destrezas o poderes y las impactantes historias que a través de ellos se cuenten; y en cambio lo que han estado recibiendo estos últimos años son verdaderos catecismos de una religión progresista (feminista, animalista, ambientalista, inclusiva…) con la que muy probablemente no estén peleados y seguramente respetan; pero, cada cosa en su sitio, para orientar y formar están los libros, los documentales y los panfletos políticos… los cómics son, básicamente, para entretener y si no lo hacen otros lo harán en su lugar, como bien lo advierte uno de los escritores de Batman, Chuck Dixon: en su opinión el cómic está perdiendo de frente al manga el cual ofrece mejor arte y narrativas más diversas e interesantes que su competidor.

Esta es la realidad: en Estados Unidos las tiendas de historietas están cerrando, los cómics no se venden como antes y en cambio elmanga sigue ganando popularidad y nuevos lectores sobre todo entre los nativo digitales.

El meollo de este problema no se resuelve en el gastado y maniqueo planteamiento de una confrontación entre una visión libertaria y moderna contrapuesta a otra represiva y reaccionaria; verlo todo desde este reduccionismo de progresismo versus conservadurismo es no sólo barato y panfletero además no retrata la realidad en sus matices finos.

El fan del cómic que se pasa al mangano lo hace por un arranque moralista animado por una visión retrograda y medievalista de la realidad; entiéndase, el comprador y consumidor de historitas de superhéroes dista mucho de ser un fanático religioso (quizás sea lo opuesto) su decisión y deslealtad obedece a un tema de calidad y no de moralina: el manga, como lo dicen muchos expertos como Dixon, está resultando superior en sus historias, narrativas y dibujo e incluso es diverso e inclusivo; pero, guardando un sentido de segmentación de mercado; entiéndase, al cliente lo que pida y si quieres historias LGTBI pues en la infinidad de subgéneros del manga las encontrarás.

Los creativos de la historieta japonesa desde los años 70 del siglo pasado tuvieron el acierto de crear todo un subgénero que aborda historias románticas entre personas del mismo sexo como ocurre con el yaoi también conocido como Boy’sLove, que trata sobre las relaciones amorosas y sexuales entre dos o más personajes masculinos; por otro lado está el yurio Girl’sLove,que en japonés significa lirio, que es como el yaoi pero con mujeres.

El concepto del superhéroe pese a lo que muchos opinan dista mucho de estar desgastado y pasado moda y los hechos lo demuestran. Franquicias como DC Comics y Marvel siguen siendo exitosas y muy rentables, pero ya no en papel: es una realidad evidente que hay una gran expectación mundial por los próximos estrenos de películas del género como la de “The Batman”, de Robert Pattinson o la tercera del Spider-Man de Tom Holland:“No way Home”.

En contrapunto, hace unos meses corrió la noticia del poco interés que tiene AT&T por DC Comics. Esta telefónica dueña de Warner Bros y de todas sus franquicias estaría considerando el desaparecer DC Comics en su desinterés de salvarla de un cierre o bien estaría dispuesta a traspasarla por ser poco rentable al no vender ya la misma cantidad de cómics que vendían antes.

La industria estadounidense del cómic ha insistido, siguiendo los dictados de una ideología progresista, en congraciarse con sectores sociales que no compran cómicsy que simplemente no les interesan los superhéroes, descuidando al fandom que desde siempre ha seguido las historias en papel de los súper-tipos. Esta apuesta y directriz la está hundiendo; mientras elmanga no sólo se mantiene a flote, sino que además está en ascenso dándole gusto, con su vasta gama de géneros, a todos los consumidores.

Véase que ante las repetitivas y adoctrinantes historias del cómic, el manga ofrece su propio arcoíris de opciones: hay relatos del Japón feudal como “Lobo solitario y su cachorro”; de mechaso robot tripulados como “Deus Ex machina”; de mundos post-apocalípticoscomo “Alita”; de steampunk (máquinas de vapor y ambientación victoriana) como “Tania TheEvil”; de Cyberpunk como “Akira”; de vampiros como “Bloody Mary”; hasta de cocina como “FoodWars”, y de deportes como los “Súper-campeones”… y como ya lo mencioné, la industria tiene también para gustos más inclinados a la diversidad sexual, allí están el yuriy el yaoi; hay, como decimos en México, de chile, mole y picadillopara todos los gustos y perfiles sociales, culturales, psicológicos…

Nadie está excluido en el universo de géneros delmanga, ni los seguidores de la pornografía; por ejemplo en el hentay uno la encuentra y de todos los tipos imaginables: heterosexual, homosexual, lésbico, pan-sexual, sado-masoquista, fetichista...

Esta diversidad, la del manga, es la que vende; y al parecer la del cómic actual americano, no.