EL PRECIO
DE LA
PROFECÍA
Conflictos Pasados y Presentes
en Relación al Historicismo
Edgardo D. Iuorno
DESCUBRA EDICIONES
Libertador San Martin, Entre Ríos
2015
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
PREFACIO
La profecía es fundamental en relación con la identidad
de la Iglesia Adventista del Séptimo Día. Aunque suene
arrogante decirlo, este movimiento surgió como parte de una
profecía, para proclamar al mundo un mensaje profético, y de
esa manera preparar un pueblo que reciba a Cristo en su
Segunda Venida.
Todo esto implica que la hermenéutica profética afecta la
identidad, la eclesiología y la misión adventista. Si el
historicismo es el método correcto, debe ser afirmado y
fortalecido. De lo contrario se desploma todo lo que fue
construido en base a ésta estructura de interpretación.
El propósito de este libro es señalar los conflictos
pasados y presentes en relación al historicismo, evocando los
abusos que se han dado por parte de los mismos historicistas, las
controversias que afrontaron quienes señalaron estos errores,
como así también la inviabilidad de las nuevas tendencias que se
han propuesto desde hace cuarenta años hasta la fecha.
Si el pueblo adventista ha sido suscitado por la profecía,
y mediante ella cumple su misión, debe estar dispuesto a pagar
el precio de la misma. Al leer las páginas siguientes te quedará
claro cuál es ese costo, y si estás dispuesto a afrontarlo.
2
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
ÍNDICE
CAPÍTULO I. PROBLEMAS HERMENÉUTICOS DE URIAH
SMITH
9
Surge El Libro “Daniel Y Apocalipsis” De U. Smith.
Razones Para La Gran Difusión Del Libro Daniel Y Apocalipsis
Una Hermenéutica Arbitraria
Uriah Smith Abre La Puerta A Filtraciones Hermenéuticas No
Adventistas
Visión Política O Religiosa De La Profecía
Daniel 11 Según U. Smith
Jaime White Enfrenta A Uriah Smith Por Sus Nuevas Ideas
Escatológicas
Errores Hermenéuticos Impiden La Correcta Interpretación
Profética
El Futurismo Desactiva El Mensaje Del Tercer Ángel
El Enemigo, Interesado En Desvirtuar La Hermenéutica
Adecuada
El Concilio Bíblico De 1919 Posterga La Solución
Luces y Sombras de las Ideas de Smith según A. Treiyer
Los Aciertos De U. Smith
3
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
CAPÍTULO II. LOUIS WERE RESCATA Y PROFUNDIZA LA
HERMENÉUTICA DE LOS PIONEROS
50
Breve Reseña Biográfica De Louis Were
Sucesores de las Ideas de Smith
Resistencia A Were En Australia, Su País Natal
Controversia entre Were y A.W. Anderson
Crece La Controversia Entre Were Y Otros Dirigentes
Australianos
Were hace públicas sus ideas
Comité de estudio rechaza las ideas de Were
Se suman adherentes a las posiciones de Were
Costo Político De Las Hermenéutica De Were
Were Aceptado En Eeuu Aunque Resistido En Australia
La encrucijada de N. Wilson
La Visita De Louis Were A Los Estados Unidos Y El
Crecimiento Del Énfasis Cristocéntrico En La Interpretación
Profética.
Cambios Inevitables En La Hermenéutica
Una Hermenéutica Consistente
Ninguna Verdad Se Basa En Un Solo Texto
La Triple Aplicación De La Profecía: Literal-Espiritual-Literal
4
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
Las Guerras Literales Del At Y El Conflicto Espiritual
Un Conflicto Espiritual Enfocado En Las Profecías
La Magnitud Del Conflicto Final
Razones Contra Un Armagedón Militar
La Continuidad Del AT En El NT, Importante Clave
Hermenéutica
La Transición AT-NT: Clave Hermenéutica Promovida
Por Were
Comparar Lo Espiritual Con Lo Espiritual
Principios Hermenéuticos De Were Más Influyentes
Textos Claves En La Hermenéutica De Were
El Rey del Norte Según Were
La Historia Vindica La Hermenéutica Correcta
Efecto “Boomerang” Por El Énfasis Evangélico En Las Profecías
Falencias En La Obra De Were
El Puente Hermenéutico de Were
CAPÍTULO III. CONTINUIDAD Y REFINAMIENTO DE LA
HERMENÉUTICA DE WERE
99
Cautela Hermenéutica Ante La Segunda Guerra Mundial
Vaivenes En La Interpretación Del Armagedón
La Conferencia Bíblica De 1952 Consolida El Cambio
5
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
El Comentario Bíblico Adventista Y La Merma En La Influencia
Del Libro “Daniel Y Apocalipsis”
El Peregrinaje Teológico De Hans LaRondelle Y La Influencia De Louis Were
En Su Pensamiento.
Hans LaRondelle Inserta El Énfasis Cristológico En La
Identidad Profética Adventista
El Historicismo según Hans LaRondelle
Aporte de Were y LaRondelle Según A. Treiyer
Continuidad Teológica De Los Principios Rescatados Por Were
Influencia De Were En Otros Teólogos Posteriores
La Sistemática Adventista Contemporánea Avala Un
Armagedón Espiritual
Teólogos Sudamericanos Reafirman La Hermenéutica
Adventista
Daniel 11 En La Interpretación Profética Actual: Continuidad
Y Variantes
CAPÍTULO IV. REVISIONISMO PROFÉTICO EN LA IASD
126
Razones Para El Descrédito Del Historicismo en algunos
ámbitos
Surge El Revisionismo Profético Adventista
Cambio De Las Tendencias Hermenéuticas Desde 1970
6
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
Cambio De Enfoques En El Transcurso Del Tiempo
Condiciones Sociológicas Para El Enfriamiento Apocalíptico
Escatología Vs. Responsabilidad Social
Situación de la escatología actual según A. Treiyer
La Interpretación Profética Idealista (No Ideal)
Símbolo Vs. Alegoría
¿Debe Actualizarse El Adventismo?
CAPÍTULO V. EL HISTORICISMO: ¿VIGENTE O CADUCO?
148
Continuidad del historicismo millerista en la IASD
Daniel Y Apocalipsis En La Genética Adventista
Factores Que Explican El Éxito Del Movimiento
Adventista
El Historicismo Según H. Douglass
La Contribución Determina El Enfoque
Validez De Los Nuevos Enfoques Hermenéuticos En El Estudio
Del Apocalipsis
Equilibrio En La Exposición Escatológica
7
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
Historicismo, Misión E Iglesia
La Evangelización Y La Correcta Interpretación De La Profecía
Valor De Las Profecías En La Evangelización
Un Apocalipsis Diferente Del Anunciado Por El
Secularismo
CAPÍTULO VI. CONCLUSIÓN: EL PRECIO DE LA
PROFECÍA
166
BIBLIOGRAFÍA
169
8
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
CAPÍTULO I.
PROBLEMAS HERMENÉUTICOS DE URIAH SMITH
Uriah Smith (1832-1903), editor, autor y profesor, era un
muchacho de doce años en el momento de la Decepción de 1844, y se
convirtió en adventista del séptimo día en 1852 ocho años después.
Desechando una atractivo cargo docente prefirió sumarse al staff de la
pequeña editorial que se iniciaba, convirtiéndose en editor de la Review
and Herald en 1855 casi ininterrumpidamente por medio siglo.
Uriah era un individuo extremadamente versátil y
creativo. Algunas de sus contribuciones menos conocidas
incluyen su trabajo como poeta, escritor de himnos, inventor, y
grabador. Patentó una pierna artificial con un tobillo móvil y un
escritorio de escuela con un asiento plegable mejorado, entre
otros inventos y mejoras. Al formarse la Asociación General de
los Adventistas del Séptimo Día en 1863, Smith fue elegido
como su primer secretario, desempeñando esta misma posición
en cinco diferentes oportunidades. También fue un período
elegido tesorero1.
En setiembre de 1852 asistió a una conferencia de los
adventistas sabatarios en Washington, New Hampshire. Las
cosas que oyó allí comenzaron a convencerlo de que el cuarto
mandamiento todavía demandaba la observancia del séptimo día
como el día de reposo. Después de doce semanas de estudio,
1
«Uriah Smith», Wikipedia, the Free Encyclopedia, 7 de marzo de 2015,
http://en.wikipedia.org/w/index.php?title=Uriah_Smith&oldid=650290635
.
9
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
decidió convertirse en un adventista observador del sábado. En
mayo del año siguiente, poco después de cumplir 21 años, Uriah
se unió a su hermana Annie en la oficina de la Review en
Rochester. En ese tiempo, su poema de 35 mil palabras titulado
“The Warning Voice of Time and Prophecy” (La voz anunciadora del
tiempo y la profecía) fue publicado, por partes, en la revista. Al
contar con Smith Jaime White pudo viajar y predicar más. Uriah
pasó muchas horas cortando a portaplumas los bordes de los
folletos, hasta ampollarse las manos1.
Una vez que se convirtió en "Editor Residente", Smith
llevó la responsabilidad principal de la publicación, contando
con la ayuda de "editores corresponsales" como J.N. Andrews,
James White, J.H. Waggoner, R.F. Cottrell, y Stephen Pierce. En
verdad todos los primeros líderes adventistas, excepto Joseph
Bates, eran jóvenes, por lo que no se consideró inusual que
Smith se convirtiese en el editor del periódico de la iglesia con
tan solo 23 años. Además, él ya había dado pruebas de tener un
juicio maduro y los talentos necesarios para la función2. Fue
ordenado al ministerio en 1874.
Cuando las iglesias de Michigan fueron organizadas en una
conferencia en 1861 Smith fue nombrado su primer secretario. Y
cuando la Asociación General se organizó en 1863, con John Byngton
como primer presidente, Smith fue igualmente elegido como el primer
secretario. Por un corto tiempo también se desempeñó como tesorero
1
Richard W. Schwarz, Floyd Greenleaf, y General Conference of
Seventh-Day Adventists Department of Education, Portadores de luz: historia de
la Iglesia Adventista del Séptimo Día (ACES, Asociación Casa Editora
Sudamericana, 2002).,78.
2
Eugene F. Durand, Yours in the Blessed Hope, Uriah Smith (Review
and Herald Pub. Association, 1980).,38.
10
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
de la Asociación General (1876-1877). Fue igualmente el primer maestro
de la Biblia al Colegio de Battle Creek. Como se ve, tuvo varias
"primeras veces", y en funciones importantes.
Smith era un hombre de fuertes convicciones, y se diferenció a
veces de James White, entre otros. Durante un tiempo sus relaciones
con Elena de White fueron igualmente tensas, distinguiendo entre sus
"testimonios" y sus "visiones", y durante un tiempo se negó a aceptar
algunos de sus consejos a él. Quizá por esta actitud de cierta
independencia del testimonio profético haya sido la causa de sus errores
hermenéuticos más crasos. Lo cierto es que en 1881 predicó el sermón
funeral de James White, con quien tuvo una relación extensa y plena de
altibajos1. Y en 1891 Smith, cuando confesó su actitud equivocada hacia
el espíritu de profecía, la armonía se restableció2.
La escatología adventista se fue desarrollando lenta
pero sólidamente desde el chasco millerista en adelante. Las
conferencias sabáticas fueron estableciendo pilares en torno a
los cuales se fueron agrupando los creyentes adventistas que
sobrevivieron a tamaña decepción. Sin embargo, aunque las
creencias eran aceptadas y promulgadas aún no se contaba con
un libro que las agrupara o tratara sistemáticamente. Esa fue la
tarea que emprendió Uriah Smith, a las instancias de Jaime
White.
Surge El Libro “Daniel Y Apocalipsis” De U. Smith.
1
Kevin Burton, «The Adventist Leadership Controversy of the
1870s: A Brief Historical Overview», accedido 24 de febrero de 2015,
https://www.academia.edu/7425812/The_Adventist_Leadership_Controver
sy_of_the_1870s_A_Brief_Historical_Overview.,1.
2
Le Roy Edwin Froom, Movement of Destiny (Review and Herald Pub.
Association, 1971).157,158.
11
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
En los primeros años de la década de 1860, Urías
Smith era maestro de escuela sabática en la IASD de Battle
Creek, y Jaime White uno de los miembros de la clase. El
sábado 17 de mayo de 1862, comenzó la reunión con un
estudio versículo por versículo del libro del Apocalipsis.
Debido a la casi total unanimidad de opinión, Jaime White
comenzó a publicar un comentario versículo por versículo
basado en las lecciones de Smith. Sin embargo las cargas del
liderazgo de la iglesia durante la guerra civil norteamericana, el
viajar entre iglesias, y la dirección de la Review le ocupaban
mucho de su tiempo haciéndole difícil continuar. En
consecuencia White le pidió a Smith que continuara con sus
comentarios en la revista la iglesia. Smith consintió en concluir
el libro, comenzando con el capítulo 101.
En abril de 1867, Smith informó que el manuscrito de
sus comentarios sobre Apocalipsis estaba en la imprenta. Pero
después de haber escrito un comentario sobre Apocalipsis, era
casi inevitable asumir la tarea de escribir sobre Daniel. Ese libro
salió en enero de 1869 bajo el título de "Reflexiones sobre el
libro de Daniel".
1
Debido a que los ministros adventistas estaban constantemente en
una gira de reuniones, y dado que la denominación estaba experimentando
cambios y expansión constante, casi todos los pioneros fueron la gente de
acción, no muy dada a la contemplación, la investigación y la escritura. Sólo a
editores como Uriah Smith y Joseph Waggoner se les pagaba para
escribir.Gary Land, Adventism in America (Andrews University Press,
1998).,74.
12
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
George King, el primer colportor adventista, instó a los
líderes de la iglesia a preparar una edición con ambos libros
combinados. Este volumen de 840 páginas con 11 páginas de
ilustraciones fue el primer esfuerzo adventista en preparar un
libro para el público en general. El libro fue un éxito de ventas
desde su comienzo, propiciando que se le unieran más hombres
y mujeres al pionero King, llegando a vender 1500 copias en
pocos meses. Poco después los estudiantes de los colegios se
costeaban sus becas en la misma tarea. Esta obra fue la cuña de
entrada del adventismo en muchos países de ultramar, un medio
para la ganancia de almas y un método eficaz para la
movilización de la hermandad1. Por tantos beneficios que trajo a
la iglesia el libro llegó a ser muy estimado2, al punto que fue el
único libro, descontando los de Elena de White, que siguió
publicándose por un siglo. Tanto afecto por el libro puede haber
impedido un examen más crítico de alguno de sus contenidos3.
1
Durand, Yours in the Blessed Hope, Uriah Smith.,216-219.
Michael B. Campbell, «The 1919 Bible Conference and Its
Significance for Seventh Day Adventist History and Theology» (Andrews
University, 2007).,143.
3
En la década de 1880 hubo una considerable discusión entre los
líderes de la iglesia al preparar la traducción del libro a otros idiomas, dado
que algunos colegas de Smith, entre ellos W. C. White, no concordaban con
algunas de sus conclusiones. White no tenía ninguna duda de que un nuevo
libro sobre las profecías podría mejorar la obra de Smith, pero el pastor J.H.
Waggoner, por ese entonces misionero en Europa, no estaba ansioso por
escribir un comentario que lo reemplazara. En consecuencia W. White
entendía que lo mejor para la iglesia y la tarea de los colportores era que
Smith recibiera amablemente las críticas de sus colaboradores, y actualizara el
libro de manera que pudiera ser traducido a los idiomas europeos y
distribuidos en el viejo continente sin temor a objeciones. Uriah Smith no
estaba dispuesto a encarar tamaña tarea de revisión exhaustiva como para
satisfacer todas las críticas hechas al libro. Y en algún punto hasta el mismo
2
13
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
Incluso, de alguna manera, hasta impidió innovaciones en el
tema1.
Aunque se hicieron periódicas revisiones, las posiciones
erróneas de Smith fueron consolidándose con el tiempo y
“sobrevivieron” a las actualizaciones periódicas. De hecho los
problemas estructurales de la hermenéutica de Smith solo serían
advertidos por Louis Were2 varias décadas después, y desde ese
W. White terminó reconociendo que si la escritura del libro había
demandado tanto tiempo, no se tendría el tiempo necesario como para una
buena revisión. Además, algunos simpatizantes de Smith sentían que
modificar algo de un texto largamente aprobado por los pioneros y hasta
constituido en libro de texto de los ministros jóvenes sería interpretado como
una admisión de error que terminaría debilitando la influencia de los
predicadores y las publicaciones ante el público, además de socavar la
confianza de los colportores en un libro que vendían con tanto suceso. Se
argumentó que “no debemos reclamar infalibilidad en nuestras publicaciones
con el fin de asegurar el respeto de la gente". Finalmente Smith defendió
hábilmente sus posiciones originales, aunque consintió en hacer unas treinta
correcciones. Ibid., 221.
1
“Daniel y Apocalipsis continuó siendo la base para una literatura
profética más denominacional. La alta estima por los libros de Smith lo
convirtió en el estándar bajo el cual los líderes adventistas monitorearon
todas las nuevas publicaciones, y eso dejó poco espacio para innovaciones”.
Ver Reinder Bruinsma, Seventh-Day Adventist Attitudes toward Roman
Catholicism, 1844-1965 (Andrews University Press, 1994).,213.
2
Louis Were no fue el primero en expresar dudas acerca de las ideas
de Smith. Daniel 11 también proporciona un campo de batalla para los
expositores adventistas. “En el período posterior a la Primera Guerra
Mundial la identificación de Turquía como una fase del "rey del norte" fue
cada vez más criticada. M.C .Wilcox, durante más de un cuarto de siglo el
editor de Signs of the Times, fue una de los primeros críticos de la explicación
tradicional de Turquía como el rey del norte, y estaba convencido de la
corrección de la visión de James White que Daniel 11 es paralelo a las
profecías de los capítulos 2, 7 y 8, y por lo tanto así mismo culmina en una
14
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
entonces las revisiones posteriores fueron suavizando más las
declaraciones controvertidas de Smith1.
Los mayores defectos del libro no fueron evidentes de
entrada. Sería interesante saber cómo hubiera reaccionado
Jaime White cuando Smith llegó a interpretar Apocalipsis
16:12-16 si hubiera estado menos preocupado con otros
asuntos. Como redactor de la Review ¿le hubiera permitido
presentar en la revista de la iglesia una interpretación
sustancialmente diferente de la posición que adoptaba la
mayoría de los adventistas hasta ese momento? Lo que se sabe
es que cuando Smith llegó a ese texto declaró que el Éufrates
era Turquía, nación por la cual fluía el río, y que el Armagedón
se lucharía en Jerusalén2. Smith propuso que el rey del norte era
presentación simbólica del papado”. Ibid.,222.Sí se ha reconocido que Were
fue el primero en advertir los errores hermenéuticos del pionero, y proveer
una alternativa sólida para resolverlos.
1
Ibid., 224.
2
“El sexto ángel derrama su copa sobre el gran río Eufrates. Este es
un símbolo del imperio otomano, y el agotamiento de sus aguas denota el
consumo total y el derrocamiento de ese poder. Y parece ahora todo
preparado para esa consumación. Bajo esta plaga, tres espíritus inmundos
salen del dragón, la bestia y el falso profeta, es decir, el paganismo, el Papado,
y el protestantismo apóstata. En esto contemplamos la obra de espiritismo
que ya ha hecho tales progresos en el mundo. Algunos incluso han llegado a
la conclusión de que ya estamos bajo esta sexta plaga debido a la disminución
del poder turco, y el trabajo de espiritismo. Pero antes de que el Eufrates
pueda ser consumido por completo, tiene que haber un proceso de
agotamiento de sus aguas, y antes de que los espíritus pueden salir de la boca
del dragón, la bestia y el falso profeta, deben abrirse camino en los corazones
de estos poderes. Ahora vemos los movimientos preparatorios de cara al
futuro: la fuerza, los recursos, la influencia del poder turco están creciendo
cada vez menos, y los espíritus de demonios están haciendo su camino”.
15
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
Turquía cuya desaparición se mencionaba en Daniel 11:45. La
profecía era una predicción de la expulsión de ese país de
Europa y del establecimiento de su capital en Jerusalén. El
punto crítico de la exposición de Smith descansaba sobre la
aseveración de que la retirada de Turquía de Europa sería una
señal de que estaba por ocurrir el retomo de Cristo a la tierra1.
En la Review del 5 de noviembre de 1867, mientras
trabajaba en sus comentarios semanales sobre Daniel, Smith
sugirió que era posible otra interpretación de Daniel 11:45 2.
Su razón para el cambio parecía influida por las noticias de
los diarios. Escribiendo en esa edición, dijo: “Garibaldi [el
patriota y soldado italiano] está decidido a obtener la
posesión de Roma”. Si esto sucedía, concluyó Smith con
cierta cautela, “el poder temporal [del papado]…
probablemente nunca será revivido” 3.
James White y Uriah Smith, The Biblical Institute (TEACH Services, Inc.,
2012).,231.
1
Schwarz, Greenleaf, y Education, Portadores de luz.,608.
Los primeros expositores adventistas de Daniel 11 básicamente
concordaron sobre la interpretación de los versículos 5-35, siguiendo la
interpretación dada por William Miller. Así los versículos 5-13 se entenderán
como referidos a los Ptolomeos (sur) y seléucidas (norte) tras la muerte de
Alejandro y de la ruptura de su imperio. Los versículos 14-28 se aplicaron a la
Roma imperial, los versículos 29, 30 a la división de Roma, y los versículos
32-35 para el período de la supremacía papal. Sin embargo, los adventistas,
sin embargo, desde Smith no acordaban sobre la identidad del rey del norte
en los versículos 36-45. “King of the north”. Denis Fortin y Jerry Moon, The
Ellen G. White Encyclopedia (Review and Herald Pub Assoc, 2014).
3
Ibid. Es interesante notar que las ideas de Smith que alimentaron
las discusiones entre los líderes adventistas, profesores y editores durante
varias décadas, no afectaron de manera significativa la comprensión
adventista del papel de la religión católica en la historia y de los
2
16
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
Hasta marzo de 1871, los comentarios de Smith sobre
Daniel habían estado apareciendo cada semana en la Review
con sistemática regularidad. Por entonces estaba escribiendo
sobre los últimos versículos de Daniel 11. En sus explicaciones
de estos versículos continuó permitiendo dos interpretaciones
posibles: el último poder de Daniel 11 podía ser el papado o
podía ser Turquía. Esta ambivalencia podía deberse,
probablemente, a la interpretación que Smith tenía acerca de
las consecuencias del Concilio Vaticano I. Lo cierto es que al
hacer sus comentarios finales de este capítulo dijo que el
tiempo determinaría el asunto1. Una vez que Francia perdió la
guerra franco-prusiana consideró que ya nadie defendería al
papado y en consecuencia este poder no debía ser el rey del
norte, sino Turquía2.
acontecimientos futuros tales como se esbozan en Apocalipsis 12-14, 17 y 18.
Pese a que Smith anticipara el ocaso del papado estas ideas no se arraigaron
demasiado. Bruinsma, Seventh-Day Adventist Attitudes toward Roman
Catholicism, 1844-1965.,223
1
Ibid., 29.
2
Ibid., 31. Smith vio una correlación entre Daniel 11:45 y Apocalipsis
16: 12-21, teniendo ambos textos como referencias a la última guerra,
Armagedón. Además, leyó una interpretación literal del río Éufrates
en Daniel 11:45 identificando Turquía, el origen geográfico del
Éufrates , con el rey del norte (RH, 18 de junio 1857; RH, diciembre
2, 1862). En esto siguió a una mayoría de los contemporáneos y
predecesores de William Miller que también había identificado el
Éufrates y el último poder de Daniel 11 con el imperio "turcomusulmán". Para muchas personas la importancia de Turquía en la
profecía ya había sido establecido por la predicción que hizo en 1838
Josías Litch acerca de la derrota del Imperio Otomano en agosto de
1840 (en base a su aplicación del principio de día por año a la sexta
17
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
Smith terminó su comentario sobre Apocalipsis en la
Review de febrero de 1863. Su tratamiento del libro fue tan
popular entre los lectores de la Review que se le instó a que
publicara sus artículos en forma de un libro. Y así salió de la
prensa por el mes de mayo de 18671.
trompeta de Apocalipsis 9). Pero Smith no siguió su interpretación
con confianza hasta después de 1871, con la derrota de los franceses
en la guerra franco-prusiana. Los franceses habían sido los partidarios
del Papado desde el principio, y su derrota en esta guerra fortaleció su
expectativa de que el Papado se convertiría en irrelevante. “King of the
north”, Fortin y Moon, The Ellen G. White Encyclopedia. Al estudiar el
asunto en 1954 una comisión designada para el análisis de Daniel 11
propuso las siguientes razones para el cambio de opinión de Smith: a.
La pérdida total del poder temporal del papado en 1870, dando lugar a Pío X
proclamándose "prisionero en el Vaticano." b. La convicción expresada en la
prensa secular y religiosa que el papado había caído para no levantarse más. c.
Los ejércitos rusos parecían a punto de cerrarse en Constantinopla, y la
prensa mundial estaba llena de declaraciones anunciando que el "hombre
enfermo de Oriente" pronto sería expulsado de Europa. d. Los comentaristas
protestantes, como Newton, Adam Clarke y otros, habían sostenido
generalmente que el Imperio Otomano era uno de los poderes designados en
Daniel 11: 40-45. Committee of Biblical Study and Research, «ResearchReport on the Eleventh Chapter of Daniel», Ministry Magazine, accedido 1 de
abril de 2015,
https://www.ministrymagazine.org/https://www.ministrymagazine.org/archi
ve/1954/03/research.
1
Donald Mansell, Los Adventistas y el Armagedón (Buenos Aires:
Asociación Casa Editora Sudamericana, 2006). 28. Mansell escribió este libro
debido a que “la reciente guerra en el Medio Oriente (1967) ha renovado el
interés en nuestro pueblo en relación con nuestras enseñanzas sobre el
Armagedón y el rey del norte”. Donald Mansell, «What Adventists Have
18
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
Smith tenía unos cien comentarios sobre Daniel y Apocalipsis
en su propia biblioteca, y de manera hábil se valió de lo mejor
producido por sus antecesores para darle una forma armoniosa,
aunque aceptó alguna de esas posiciones sin demasiado rigor crítico1.
De esta manera sintetizó lo principal de la interpretación profética
adventista, elaborada a lo largo de los años, y esto fue comprobado por
su vigencia de 70 años2, pese a sus falencias hermenéuticas.
Razones Para la Gran Difusión del libro Daniel y Apocalipsis
Según G. Quispe el gran éxito de la difusión del libro
“Daniel y Apocalipsis, de U. Smith, se debió a seis principales
factores:
Taught on ARMAGEDDON and the KING of the NORTH (Part II)»,
Ministry Magazine, accedido 31 de marzo de 2015,
https://www.ministrymagazine.org/https://www.ministrymagazine.org/archi
ve/1967/12/what-adventists-have-taught-on-armageddon-and-the-king-of-thenorth.
1
William Miller creyó que el Armagedón se lucharía en América y
que el "rey del norte" era el papado. En 1840 se propuso que la batalla se
llevaría a cabo en el Medio Oriente como una guerra general entre las
naciones justo antes del advenimiento, y que este sería el lugar donde Cristo
reuniría a sus santos. La interpretación protestante generalizada vio el
Éufrates como símbolo del poder turco o del imperio otomano. En 1857
Urías Smith hizo la misma identificación, indicando que si bien muchos
adventistas diferían en esto, la mayoría de los protestantes concordaba. Con
el tiempo llevó a la iglesia a esta posición. Durand, Yours in the Blessed Hope,
Uriah Smith,209. Schwarz, Greenleaf, y Education, Portadores de luz.,168.
2
Ibid.,206.
19
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
1. La estima de Elena de White por el libro, recomendando
su lectura y permanente publicación.
2. Smith era el escritor adventista más apropiado para
hacer un comentario como el que se editó.
3. Su libro fue el primero en ser impreso para el
colportaje1.
4. Su libro fue apoyado por los dirigentes de la iglesia.
5. Se estudió en grupos hogareños.
6. La presunta declaración de Elena de White,
posteriormente desmentida por Arthur White2, en la
que declaró ver un ángel guiando la escritura del libro3.
Como se ve, las circunstancias favorecieron la larga
vigencia del libro de Smith, y pese a sus falencias perduró en el
1
Gary Land explica que en realidad fue el primer libro doctrinal
vendido por los colportores: “Un elemento importante en la expansión de las
publicaciones adventistas fue el desarrollo de la venta de libros puerta a
puerta por parte de colportores. Probablemente el primer libro que se
vendiera de forma sistemática de esta manera era John Harvey Kellogg Inicio
mano Libro de Higiene Doméstica y Medicina Racional (1880). A través de
los esfuerzos de George A. King, que vendió con éxito el volumen de Kellogg,
se produjo una edición en un solo volumen de Pensamientos sobre Daniel y el
Apocalipsis, de Uriah Smith, en el año 1882, que se convirtió en el primer
libro adventista doctrinal vendido de esta manera”. Gary Land, Historical
Dictionary of Seventh-Day Adventists (Scarecrow Press, 2005), 240. Durante su
vida sus libros vendieron más de un millón y medio de copias, impresos en
varios idiomas. Una cifra quizá no muy impresionante para los estándares de
hoy en día, pero altísima cuando hace un siglo la población, la tasa de
alfabetización, el dinero, y el tiempo para la lectura no eran los actuales.
Durand, Yours in the Blessed Hope, Uriah Smith.,195.
2
Quispe, Zubieta, And Cárdenas, The Apocalypse In Seventh-Day
Adventist Interpretation.9,10.
3
Froom, Movement of Destiny.,423.
20
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
tiempo1. Smith sistematizó el pensamiento de los principales
expositores adventistas y no adventistas de sus días2, y agregó a
ello sus perspectivas particulares.
Aunque se hicieron algunas propuestas hermenéuticas
diferentes, tales como las de Daniel T. Bordeau y la Conferencia
Bíblica de 1919, no se modificó demasiado la línea
interpretativa de Smith3. De hecho cuando se revisó el libro por
primera vez, en 1944, se corrigieron algunas ideas semi-arrianas
del libro pero ninguna de las principales opiniones
interpretativas del autor4, aunque algunas de ellas ya se estaban
comenzando a cuestionar5.
Una Hermenéutica Arbitraria
1
Recién en 1945 se realizaron los cambios más sustanciosos en el
libro. William H. Hessel, «Resources in Adventism and development of an
Adventist collection», American Theological Library Association Summary of
Proceedings 35 (1 de enero de 1981): ,23.
2
Ibid., 63.
3
Ibid., 70.
4
Froom, Movement of Destiny.,424.
5
Ibid., 427. Durante la Segunda Guerra Mundial se revisó el libro
de Daniel y el Apocalipsis, en gran medida porque allí se conectaba el fin del
mundo con la desaparición del Imperio Otomano. Este poder habiendo
cesado en 1923 echaba por tierra esta interpretación. En la defensa del
autor, sin embargo, el comité de revisión afirmó que "en algunos puntos de
importancia secundaria, como Armagedón ... [y] algunas partes o Daniel
11…Uriah Smith no era tan dogmático como algunos pensaban”. Esta
revisión, sin embargo, mantuvo en gran medida la opinión del autor en
cuanto a Turquía, por ser mayoritaria en ese momento. Durand, Yours in the
Blessed Hope, Uriah Smith.,211.
21
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
Hay leyes definidas de interpretación y cualquiera que las
entienda puede avizorar las profecías de cumplimiento futuro1.
Pero U. Smith arbitrariamente decidió que Turquía era el rey
del norte, y al eludir las leyes bíblicas de interpretación fue
repitiendo errores en todo el curso de las líneas interpretativas.
De esta manera la interpretación profética llegó a ser humana y
superficial antes que divina y espiritual2. Si este escritor hubiera
permitido a la Biblia ser su propio intérprete, en lugar de dejar
que la interpretación fuese determinada por novedades
periodísticas y autores no adventistas, el resultado hubiera sido
otro. Además, al considerar pasajes como Eze. 26:7 y Jer. 25:9
hubiera identificado al rey del norte con el rey de Babilonia.
Como desarrollaremos luego, pasado el tiempo Louis
Were advertía sobre el peligro, patente todavía en sus días, de
leer la Biblia de manera imaginaria, permitiendo que la
imaginación cabalgue desbocada sobre ella, viendo cosas que el
Espíritu Santo jamás pretendió revelar, como así también el
riesgo de acudir a ella con ojos ciegos y escépticos que no vean lo
que Dios ha manifestado claramente3. Sin embargo Cristo como
el intérprete divino de las profecías relaciona consigo mismo las
profecías de manera que nadie deba quedar esperando un
cumplimiento nebuloso de la misma.
Desde que Smith introdujo su errada interpretación en
el medio adventista, la misma resultó ser una fructífera fuente de
falsos pronósticos, y terminó por casi remover los pilares de fe ya
1
Raymond F. Cottrell, «Pioneers Views on Daniel Eleven» (Biblical
Research Fellowship, 1951).,3
2
Ibid., 4
3
Louis F. Were, The Mystic Number Of Palmoni, O The Trinity And
The Number Three In Scripture In Their Relation To The Message Of Revelation 14
(Australia, 1935).
22
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
establecidos por sus antecesores en la denominación. De esto se
entiende que nunca una verdad se encuentra establecida del
todo, a menos que la generación que la recibe la comprenda
bien y la profundice.
Por estar fascinados con el desarrollo de la guerra entre
Rusia y Turquía, Smith y otros líderes, sin proponérselo, estaban
removiendo los pilares con los que en su momento
concordaban. Smith ofrecía el mismo conflicto bélico como
evidencia primaria de su novedosa interpretación, y esperaba
que este suceso confirmara la fe en el pronto fuerte pregón y la
terminación del mensaje1. Es evidente que el defecto estribaba
en esperar que la interpretación fuera probada por algo ajeno a
la misma Inspiración. De hecho la historia no determina la
interpretación, sino que en todo caso la confirma. Es la misma
inspiración la que debe autorizar una interpretación antes de
que la misma historia la confirme.
Por esta razón también, una vez que se percató del
problema, se levantaron grandes reparos por parte de J. White,
que tenían que ver con la validez del nuevo método de
considerar la historia contemporánea como la base para
interpretar la profecía, antes que sustanciar posiciones
anteriormente determinadas sobre la base de la evidencia
bíblica. Temía que en lugar de dar gran confirmación al mensaje
se terminara en decepción y gran pérdida de almas. De hecho
éste fue el costo que terminó pagando la iglesia décadas después.
1
Were, Pastor James White And Unfulfilled Prophecy., 6
23
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
Uriah Smith Abre La Puerta A Filtraciones Hermenéuticas No
Adventistas
Fueron, de hecho, las ideas Urías Smith las que allanaron el
camino para que los evangelistas y escritores adventistas se
plegasen a un espectro más amplio de comentaristas religiosos y
seculares que veían la primera guerra mundial como el
Armagedón o su inicio. Incluso el presidente de la Asociación
General, Arthur G. Daniells, escribió en 1916, en una edición
extra de la Review titulada "La Cuestión de Oriente" que la
inminente caída de Turquía como "Reino del Norte" prepararía
el camino para la batalla de Armagedón,1. Daniells dijo
claramente que "el enfrentamiento que provocaría el final de
Turquía sería el Armagedón, la batalla del gran Dios
Todopoderoso anunciada por Juan en Apocalipsis 16: 13-17.
Seguidamente vendría el tiempo de angustia de Jacob predicho
por el profeta Daniel. En 1917 Daniells fue un poco más allá al
comentar que "los puntos de similitud entre la profecía sobre el
Armagedón y esta lucha gigantesca son tan impresionantes que
es fácil concluir que esta guerra no es otra cosa que el
Armagedón o su preludio”.
Sin embargo, en 1917, cuando las fuerzas británicas en
lugar de Turquía entraron en la antigua ciudad de Jerusalén, la
interpretación de Uriah Smith sobre Daniel 11 ya no parecía de
tan pronto cumplimiento como sus seguidores pensaban. En
ocasión de la famosa Conferencia Bíblica de 1919, M.C.
Wilcox, A. O. Tait y algunos otros ya estaban convencidos de
que el papado debía entenderse como el rey del norte. Wilcox,
1
Desde joven Daniells admiraba y promovía fervorosamente la venta
de los libros de Smith. Albert Dittes, Three Adventist Titans: The Significance of
Heeding Or Rejecting the Counsel of Ellen White (TEACH Services, Inc., 2013).
,44.
24
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
director de la Review, expresó su extrañeza en voz alta respecto a
las interpretaciones de Smith. Considerando el contexto de los
versículos bajo estudio, Tait pensó que la pregunta era mayor
que lo que permitía la explicación de Smith. Wilcox vio la lucha
que el profeta Daniel describió en la que finalmente se destruía
al rey del norte, como eventos terrenales en una fase del
conflicto espiritual entre fuerzas del bien y del mal. Wilcox
publicó su punto de vista antes de la Primera Guerra Mundial,
pero cuando algunos evangelistas adventistas observaron el papel
que Turquía jugaba en ese conflicto se convencieron de que
después de todo Uriah Smith tenía razón.
Del otro lado del debate Spicer y Daniells incluso publicaron
libros al respecto. C. M. Sorenson, decano de teología en el
Washington Missionary College, y C. S. Longacre, director de libertad religiosa de la Asociación General, estuvieron de acuerdo
con Daniells y Spicer. Pero los eventos finales de la Primera
Guerra Mundial no coincidieron con sus anticipaciones.
Turquía se retiró de algunos lugares, pero no de Europa como
Smith lo había predicho. Nuevamente, la exposición de Wilcox
ganó la atención. Tait y Daniells, en lados opuestos de la
discusión, finalmente concordaron en que nadie quedaría fuera
del cielo por su fracaso en entender todos estos asuntos.
Algunos adventistas continuaron predicando sobre la cuestión
del Oriente hasta mediados del siglo XX, pero su lugar en el
evangelismo adventista llegó a ser progresivamente menos
importante1.
1
Schwarz, Greenleaf, y Education, Portadores de luz.,610,611. ““El
significado profético de la nación de Turquía o la "cuestión de Oriente",
como se le llamaba, había sido un tema favorito de los expositores proféticos
adventistas, pero los cambios en Europa les exigió reexaminar sus
25
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
Lo cierto es que en el período que siguió a la Primera
Guerra Mundial, el Armagedón1 continuó siendo interpretado
como un importante conflicto militar entre el Oriente y el
Occidente a ser disputado en la llanura de Esdraleón, Israel, con
Turquía como el elemento clave, debido a la ubicación
estratégica de esta nación entre ambos hemisferios en pugna2.
interpretaciones”.Campbell, «The 1919 Bible Conference and Its
Significance for Seventh Day Adventist History and Theology». ,x.
1
“Probablemente los eventos mundiales contribuyeron a este punto
de vista más que la exégesis bíblica. Entre los escritores seculares de ayer y de
hoy el Armagedón se convirtió en un símbolo del conflicto que destruiría la
civilización. Daniells enseñó que el Armagedón emergería de la rivalidad
política para controlar el territorio entre Estambul y el Golfo Pérsico. El
ascenso de Asia como se observó en el fortalecimiento de Japón, en el
sentimiento antioccidental de China, en la creciente tensión entre Oriente y
Occidente, todo ello inspiró a los evangelistas adventistas a concordar con
Daniells en que el Armagedón sería un gigantesco choque militar en
Palestina entre el Oriente y el Occidente”. Ibid., 611.
2
Alberto Timm, “Escatologia Adventista Do Setimo Dia 1844-2004,”
In O Futuro: A Visao Adventista Dos Últimos Acontecimentos. Arti- Gos Teológicos
Apresentados No V Simpòsio Bíblico-Teológico Sul- Americano Em Homenagem A
Hans K. Larondclle (Engenheiro Coelho, SP: Unaspress, 2004).,278. Es de
notar la ambivalencia en relación con el significado real de Armagedón. El
director de la Review, F.M. Wilcox, escribió: "No podemos predecir con
confianza el resultado de la lucha actual. No sabemos si esta guerra va a
terminará en el Armagedón, o si será por un tiempo un cese de las
hostilidades”. Esta cautela fue de nuevo manifestada cuando los Estados
Unidos entraron en la guerra en 1917. "No pongamos en peligro nuestra
reputación ... por hacer declaraciones arriesgadas ", aconsejó Wilcox. Las
profecías bíblicas "tratan con el transcurso de las naciones en líneas
generales… No revelan cómo los acontecimientos irán aconteciendo hasta
llegar a su conclusión final”. Pero casi tan pronto como la guerra había
terminado, Wilcox publicó un pequeño libro titulado Frente A La Crisis:
Condiciones Actuales Del Mundo A La Luz De Las Escrituras. Aquí, en el
26
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
Llama la atención que Uriah Smith aún hoy es citado
como un referente del futurismo en relación con Armagedón.
Nótese esta llamativa cita:
“Implementos de guerra moderna, como bombas
estruendosas, llamas escupiendo destrucción, tanques en
tierra, aviones sobrevolando las cabezas, y hombres
matando otros hombres son parte de esta fantástica
posición (Uriah Smith, Las Profecías de Daniel y el
Apocalipsis, pág. 696 -698). Albertus Pieters resume esta
posición declarando que los escritores de esta escuela
consideran uniformemente la Bestia es el anticristo
personal de los últimos días, y que su ejército será una
fuerza militar literal traída a la tierra de Palestina para la
contexto de un mundo relativamente pacífico, Wilcox se mostró,
paradójicamente, mucho más pesimista acerca de los tiempos.
Anteriormente, no podía decir si la Gran Guerra anunció Armagedón, pero
ahora creía en que "la creciente agitación en todos los países en preparación
para la guerra podría terminar en el último gran conflicto, cuando las
naciones sean reunidas en Armagedón”. La ironía también fue evidente en
las páginas de Signs of the Times. En abril de 1914, un artículo de primera
página dijo que los preparativos de la guerra terminarían en Armagedón.
Cuando la guerra debidamente llegó seis meses después, de inmediato se
sostuvo que el conflicto actual no podría ser la batalla final escatológico.
Malcolm Bull y Keith Lockhart, Seeking a Sanctuary: Seventh-Day Adventism and
the American Dream (Indiana University Press, 2007).,63. Estos vaivenes
argumentativos se debían, evidentemente, a la carencia de una hermenéutica
clara acerca de las profecías no cumplidas.
27
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
guerra contra los Judíos, que por aquel entonces habrán
recuperado la posesión de la tierra”1.
Como se ve no se diferencia a el futurismo parcial de
Smith del futurismo pleno de ayer y hoy. Para los autores
evangélicos, el futurismo parcial equivale al futurismo pleno,
porque la hermenéutica se emplea completa o no se emplea.
Esto da que pensar acerca del pretendido uso selectivo
de hermenéuticas aleatorias a la clásica hermenéutica históricoprofética. ¿Son tan útiles como aparentan, o el riesgo es mayor a
los pretendidos beneficios de la misma? ¿La visión que el mundo
cristiano en general acerca de las posiciones adventistas resulta
clara o confusa?
Que Uriah Smith aún hoy sea contado entre los
futuristas más representativos, aunque solo tocó parte de ese
terreno, debiera ser una advertencia para aquellos que
pretenden iluminar la escatología adventista con enfoques
variopintos.
Visión Política o Religiosa de la Profecía
Carmelo Martines hace notar que “con anterioridad a la
década de 1950, Louis F. Were hizo notar que a partir de las
interpretaciones de Uriah Smith los autores adventistas se
habían alejado de la posición de los pioneros en materia
escatológica. Este entendía que los acontecimientos finales
predichos en la Biblia son de naturaleza religiosa, pero de alguna
1
Morris Glen Bowers, St/sup State: ...the Unspoken Foreign Policy of the
United States of America (iUniverse, 2005). ,430.
28
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
manera los autores modernos se concentraron en la
interpretación política de dichos acontecimientos”1.
Esta misma idea, presente en la escatología evangélica
contemporánea, desconoce la realidad del gran conflicto como
el marco de referencia de toda la historia del pueblo de Dios y
de las profecías bíblicas. En consecuencia enfoca la
interpretación en una dirección diferente de la que corresponde
hacerlo.
Las ideas hermenéuticas de Smith y quienes le
respondieron deben ser ejemplificadas. A continuación veremos
que idea tenía Smith de los últimos versículos de Daniel 11.
Daniel 11 según U. Smith
En la opinión de Smith, la profecía del "tiempo
del fin" (Dan 11:40) comenzó en 1798. Interpreta el
enfrentamiento entre el rey del norte y el rey del sur
como el cumplimiento de un conflicto que surgió entre
Egipto y Francia, y entre Francia y Turquía en 1798. En
ese tiempo, una vez que Turquía ocupa lo que fue el
norte del antiguo imperio de Alejandro Magno, llega a
convertirse en el rey del norte2.
Smith afirma que "el rey" de Dan 11:36 no se
1
Carmelo Martines, El Remanente Fiel, Un Debate Contemporáneo
(Libertador San Martín, Entre Ríos: Universidad Adventista del Plata, 2013).
102.
2
Hotma Saor Parasian Silitonga, Continuity And Change In World
Rulers: A Comparative Study And Evaluation Of Seventh Day Adventist
Interpretations Of Daniel 11” (Adventist Institute International Studies,
2001).,57,58.
29
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
podría aplicar a la Roma papal, porque la Francia atea
cumple esta profecía. Sostiene que los reyes del norte y
del sur entran de nuevo en conflicto en 11: 40-45. Esta
aplicación de la profecía prevé un conflicto entre Egipto
y Francia, y entre Turquía y Francia, desde 1798, lo cual
marca el comienzo del tiempo del fin. Se aplica el rey del
norte geográfico a "Turquía". Aunque su comentario
sobre 11:45 indica que el rey del norte "llegará a su fin, y
no tendrá quien le ayude" no informa cómo, cuándo ni
dónde llegará su fin, sino que esto será manifestado en
su momento por la Providencia1.
En virtud de estas ideas extrañamente novedosas
era de esperarse una reacción como la que encabezó
Jaime White, el primero en percibir las falencias de la
posición de Smith.
Jaime White enfrenta a Uriah Smith por sus nuevas ideas
escatológicas
Al desarrollarse las interpretaciones proféticas de Jaime
White, se llegó a creer que la batalla del Armagedón era el
choque decisivo entre las fuerzas del bien y del mal, que
culminaba en la segunda venida, en la cual el sábado sería el
gran punto en disputa. Otros pioneros siguieron rápidamente
esta posición, entre ellos líderes como José Bates, John Nevins
Andrews, Hiram Edson, Roswell F. Cottrell, David Arnold,
George W. Holt y otros2.
1
Mansell, Los Adventistas y el Armagedón.58.
Ibid.,18.
2
30
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
Uriah Smith se unió al cuerpo de redactores en 1853, y
por cuatro años mantuvo puntos de vista escatológicos
idénticos a los que sostenía Jaime White y los otros líderes
de la iglesia. Sin embargo por el año 1857 su posición sobre la
escatologia había comenzado a cambiar de su interpretación
original, bajo la influencia aparente de las visiones populares
futuristas de sus días sobre el Armagedón 1.
Con la cautela propia de quien había sufrido el
chasco de 1844, en la Review del 15 de noviembre de 1877
Jaime White ofreció unas palabras de advertencia casi
exclusivamente dirigidas a Smith:
“Están los que piensan más de la verdad futura
que de la verdad presente. No ven sino poca luz en
la senda en la que caminan, pero piensan que ven
gran luz adelante de ellos. Las posiciones tomadas
1
Ibid., 22. Es interesante la manera en que Uriah Smith sigue
siendo elogiado aún hoy por escritores futuristas: ““Urías Smith armó un
libro que hasta el día de hoy es una de las obras de referencia primarias más
respetados y sobre Daniel y el Apocalipsis. Fue un erudito cuidadoso e
investigador. Se sumergió en la historia para ver cómo se relacionaba con este
capítulo 11. Hay quienes han llegado a otras conclusiones sobre estos versos,
pero el análisis de Urías Smith acerca de ellos ha resistido la prueba del
tiempo y sigue siendo, en opinión de este autor, la explicación más lógica y
razonable de este pasaje clave en la Biblia. Armoniza con el mejor registro de
la historia y lo que vemos desarrollarse en nuestro mundo de hoy, sobre todo
el aumento y creciente papel del Islam”. John C. Witcombe, Jerusalem
Caliphate and the Third Jihad (Prophecy Waymarks Publications, 2013).,cap.3
31
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
sobre la cuestión de oriente1 se basan sobre
profecías que aún no [tuvieron] su cumplimiento.
Aquí debemos ir con tiento, y tomar las posiciones
con todo cuidado, no sea que nos encontremos
removiendo los hitos completamente establecidos
en el movimiento adventista. Puede decirse que
hay un acuerdo general sobre este tema, y que
todos los ojos están vueltos hacia la guerra que
ahora está en desarrollo entre Turquía y Rusia,
como el cumplimiento de esa porción de la
profecía que dará gran confirmación de fe en el
fuerte clamor que está cercano y la terminación de
nuestro mensaje. Pero cuál será el resultado de este
dogmatismo en la profecía no cumplida, si las
cosas no salen como tan confiadamente se las
espera, es una cuestión angustiosa”.
Como Smith mantuvo su posición se inició una
controversia entre ambos en el congreso de 1878. Aunque
1
Desde aquí se diferencian dos escuelas de pensamiento, divididas
sobre la naturaleza de Armagedón. Este debate fue conocido entre los
adventistas como la "cuestión de Oriente". Smith creía que Armagedón sería
una guerra literal entre las naciones y ejércitos terrenales. Esperaba que los
turcos trasladaran su capital de Constantinopla a Jerusalén, después de lo
cual el poder turco habría llegado a su fin (Daniel 11:45). El Armagedón se
lucharía en Jerusalén, contra las potencias del "oriente" (Apocalipsis 16:12),
potencias islámicas. Otro intérprete adventista, A.T. Jones, propuso un punto
de vista ligeramente diferente, proponiendo que estos poderes orientales
serían los ejércitos occidentales estacionadas en el Lejano Oriente. The Great
Nations of To-Day (Paradise View, 1901).,88.
James White, por su parte, cree que el Armagedón sería una guerra
religiosa-espiritual entre los poderes del cielo y de la tierra. “King of the
north”. Fortin y Moon, The Ellen G. White Encyclopedia. “King of the north”.
Ibid.
32
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
en otros asuntos unieron fuerzas1, en esta ocasión se
hallaban en veredas opuestas. La refutación de J. White
duró setenta minutos y en lo esencial consistió en lo
siguiente:
Si los pies y los diez dedos de la estatua
metálica [de Daniel 2] son romanos, si la bestia
con los diez cuernos que es entregada a las llamas
del gran día es la bestia romana, si el cuerno
pequeño que se levantó contra el Príncipe de los
príncipes es Roma, y si el mismo espacio y
distancia están cubiertos por estas cuatro cadenas
proféticas, entonces el último poder del capítulo
11 [de Daniel] que va “a llegar a su fin y no
tendrá quien le ayude”, es Roma. Pero si es Turquía, como algunos enseñan, entonces los dedos
de la imagen del capítulo 2 son Turquía, la bestia
con los diez cuernos del capítulo séptimo
representa a Turquía, y fue Turquía la que se
levantó contra el Príncipe de los príncipes en el
capítulo octavo de Daniel2.
Otro de los fuertes argumentos de Jaime White se
encuentran en la Review del 21 de enero de 1862, donde
declaró sin dejar lugar a dudas que “la gran batalla no es entre
nación y nación sino entre la tierra y el cielo”, durante la cual
las naciones serán destruidas por la “terrible gloria ardiente” del
1
Beverly Beem y Ginger Hanks Harwood, «“Your daughters shall
prophecy”: James White, Uriah Smith, and the “triumphant vindication of
the right of the sisters” to preach», Andrews University Seminary Studies 43, n.o 1
(1 de marzo de 2005): 41-58.
2
Kraid Ashbaug, Studies on Daniel and Revelation (TEACH Services,
Inc., 2004).,68.
33
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
segundo advenimiento. “En cuanto al lugar de reunión”,
escribió, “en este momento solo deseamos decir que pensamos
que hay buenas razones para situarla donde Cristo haga su
descenso en su segunda venida”1.
En la opinión de Jaime White, el Armagedón no era
evidentemente un conflicto armado entre las naciones en
algún lugar de Palestina que sería interrumpido por la segunda
venida de Cristo, sino la destrucción de las fuerzas del mal por
parte de Cristo y su ejército celestial en su segunda venida2.
El pastor White advierte que U. Smith se hallaba
equivocado cuando identificaba al rey del norte de Daniel 11
con Turquía. White procuraba que Smith y sus seguidores no
experimentaran un chasco similar al que él mismo había vivido
junto a tantos adventistas en 18443. Las advertencias del pastor
White no se proponían desanimar la verdadera interpretación
de las profecías por cumplirse, lo cual él hacía profusamente,
sino cuidar a la iglesia de errores que la avergonzaran y
estorbaran su misión. Como líder y organizador de la iglesia
sopesaba el impacto de que las innovaciones tuvieran en el
rumbo general de la causa.
La experiencia de un hombre curtido en los “dolores de
parto” del movimiento, sin embargo, no fue considerada por el
joven Smith. La lección de prudencia que había aprendido
Jaime aún no la había comprendido Uriah. Hasta su muerte, no
obstante, J. White enseñó que el poder de la bestia referido en
Apoc. 13 era el rey del norte en Daniel 114. Su hermenéutica
1
Louis F. Were, What Is Armageddon (Adelaide, Australia, 1942). 23.
Ibid., 26.
3
James White, Review and Herald, 29 de noviembre de 1877.
4
Were, Pastor James White and Unfulfilled Prophecy.,2
2
34
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
siguió siendo la misma hermenéutica millerita. De hecho está
comprobado que los adventistas, al seguir utilizando la misma
hermenéutica1, descubrieron enseñanzas que Miller no llegó a
encontrar.
Jaime White sostenía que el papado como rey del norte
era uno de los pilares sólidamente establecidos por el
movimiento adventista2. Remover un detalle de la estructura
teológica adventista era peligroso, y de hecho lo fue. Elena no
obstante aconsejó a su esposo evitar la confrontación directa con
Smith, para no desalentar a los hermanos y mostrar un frente
unido. Si había que elegir entre dos males, era preferible optar
por el mal menor pero resguardar la unidad de la iglesia.
En realidad Jaime estaba preocupado por algo
más que la hermenéutica de Smith. Lo preocupaban las
consecuencias que su interpretación podía tener. El
alarmismo de Smith podía perjudicar las finanzas de una
iglesia en rápida expansión3.
Otro ejemplo claro que distingue claramente el enfoque
profético de White respecto del de Smith se nota en el debate
generado en tiempos de la Guerra Civil Norteamericana. ¿Era
esta guerra señal de algún cumplimiento profético especial?
Muchos adventistas consideraban que el conflicto era una
distracción innecesaria para su principal objetivo de prepararse
1
Jeff Crocombe, “„A Feast Of Reason‟: The Roots Of William
Miller‟s Biblical Interpretation And Its Influence On The Seventh-Day
Adventist Church.” (Tesis Doctoral, University Of Queensland, 2011).,206.
2
Cottrell, «Pioneers Views on Daniel Eleven».,4.
3
Arthur L White, Alan Forquer, And Woolsey. Raymond H, Ellen
G. White (Washington, D.C.; Hagerstown, Md.: Review And Herald Pub.
Association, 1981).,96.
35
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
para la Segunda Venida. Pero Uriah Smith vio las hostilidades
como conducentes al Armagedón. J. White señaló que
Apocalipsis 6:15 era prueba de que la esclavitud continuaría
hasta que Cristo volviese1.
Además de agitar la delicada cuestión de cuál debía ser la
posición adventista hacia la guerra, las posiciones de J. White
alejaron a la mayoría de los miembros de la opinión de Uríah
Smith, quien veía en la Guerra Civil el anticipo del
Armagedón2. "Las actuales turbulencias", predijo Urías Smith en
1861, culminarán "en la gran batalla de Armagedón."3.
Aquí se nota una vez más la tendencia alarmista algo
apresurada de Smith4 frente a la posición criteriosa y cautelosa
de White, más preocupado por el rumbo general de la causa y el
cumplimiento de la misión profética de la iglesia que por
amplificar cada detalle como si fuera una clara señal de algún
1
Gerald Wheeler, James White: Innovator and Overcomer (Review and
Herald Pub Assoc, 2003).,143.
2
Ibid., 144.
3
Douglas Morgan, Adventism and the American Republic: The Public
Involvement of a Major Apocalyptic Movement (Univ. of Tennessee Press,
2001).,31.
4
Smith reprendía a algunos de sus hermanos en la fe por sus
"nociones especulativas" ya que las profecías futuras deben tratarse con
cuidado, según advertía. Por desgracia, no siempre siguió su propio consejo.
A veces fue demasiado rápido para ver en los acontecimientos
contemporáneos el cumplimiento profecías específicas, y para averiguar en
detalle cómo se cumplirá una determinada profecía. Durand, Yours in the
Blessed Hope, Uriah Smith.,207.
36
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
desarrollo notable. Por cierto Smith desarrolló su misiología
lenta y penosamente1.
Volviendo al asunto del rey del norte, se sabe que
Jaime no fue autorizado a tensar demasiado la
controversia con Smith. Advertido por Elena acerca de
que la unidad era más importante que la disputa por una
interpretación controversial Jaime no siguió con el
tema2. Pero Smith nunca respondió los argumentos
presentados por Jaime White.
Errores Hermenéuticos Impiden La Correcta Interpretación
Profética
1
Stefan Höschele, From the End of the World to the Ends of the Earth:
The Development of Seventh-Day Adventist Missiology (Nürnberg: VTR,
2004).,18,19.
2
Mansell, Los Adventistas y el Armagedón.,36. Elena de White
comentó Daniel 11 en sólo tres lugares en todos sus escritos (véase The
Review and Herald 24 de noviembre de 1904; Testimonios o la Iglesia, 9:14;
Carta 103, 1904, en Manuscript Releases,13: 394). Era su convicción de que
casi todo el capítulo se había cumplido por completo. Ella coloca claramente
a la iglesia de sus días cerca del final de Daniel 11 y por lo tanto cerca del
final de la historia. Pero ella nunca se aventuró en más detalles, y fue
aparentemente silenciosa en cuanto a la identidad del rey del norte. No entró
en la polémica contemporánea en torno a este tema. Al parecer, la única vez
que llegó incluso cerca de la controversia fue cuando se le mostró en visión
que su esposo cometió un error de confrontar Uriah Smith públicamente
con respecto a su interpretación del rey del norte. Wheeler, James White., p.
183 nota 10.Puede ser significativo que tres de sus comentarios sobre Daniel
11 aparecieran impresos sólo después de que su marido había muerto. El
fechado de estos comentarios puede mostrar su determinación para evitar la
apariencia de parcialidad. “King of the north”. Fortin y Moon, The Ellen G.
White Encyclopedia.
37
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
Al estudiar el motivo apocalíptico de “los reyes del
oriente” Louis Were explica que escribió del tema para “ ventilar
algunas de las razones por las cuales tantos profesores
adventistas del séptimo día y eruditos de la Santa Escritura no
creen y no podrán creer que los reyes del Oriente puestos en
posición prominente en el delineamiento profético en la hora
culminante de la tierra, no hagan referencia a las naciones
orientales de la tierra, sino más bien a la venida de los ejércitos
celestiales para librar al pueblo de Dios y destruir sus opresores
babilónicos1”. De esta manera ya vamos percibiendo que el
disparador de los escritos de Were fue el deseo de remover el
obstáculo hermenéutico que impedía que los autores posteriores
a Smith entendieran la profecía correctamente, sin desviarse de
la senda trazada por los pioneros del mensaje.
El Futurismo Desactiva el Mensaje del Tercer Ángel
Pero Were también percibía una razón subyacente en el
meneo del futurismo por parte del mundo cristiano en general.
El futurismo ha sido alentado por el papado debido a que señala
a un anticristo militar, una persona real que surgirá en Palestina
en el futuro. Esto desvía la atención del papado como la
organización espiritual apuntada en la Biblia2.
1
Louis F. Were, Los Reyes Que Vienen Del Oriente, Editorial CAP
(Libertador San Martín, Entre Ríos, N.D.).,Prefacio.
2
Louis F. Were, Armageddon, The Time Of Spiritual Israel´S
Deliverance (Melbourne, Australia, N.D.).,10. “Con el fin de contrarrestar la
Reforma protestante en su identificación del papado como la ramera de
Apocalipsis y el cuerno pequeño en el libro de Daniel, la Iglesia Católica tuvo
que ofrecer un método alternativo para enfocar las profecías de Daniel y
Apocalipsis fuera de sí misma. En 1590 un sacerdote jesuita, Francisco
38
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
El cristiano desprevenido, que no estudia el significado
profundo de las profecías que resumen el ataque del papado
contra la ley de Dios, no es alcanzado por las solemnes
advertencias de Apocalipsis. Ellas advierten que el conflicto final
será en torno a la ley de Dios, pero el futurismo desvió el
sentido del mensaje hacia un sistema palestino-céntrico, lo cual
contrarresta el mensaje del tercer ángel. Sin medias tintas Were
declaraba que millones han sido enceguecidos al mensaje del
tercer ángel por medio de este sistema satánico de
interpretación1.
Correctamente entendidas, sin embargo, las mismas
profecías tan mal aplicadas a lo militar benefician nuestra vida
cristiana al hacernos mirar, como en una visión panorámica, la
grandeza e intensidad del conflicto que se libra a cada momento.
Los adventistas somos lo que somos gracias a nuestra
interpretación de ciertas profecías. Por eso debemos examinar
cada una de nuestras posiciones, no sea que sin desearlo
Rivera, puso en marcha la interpretación futurista: todas las profecías han de
ser cumplidas en el final de tiempo. De esta manera el poder papal de Roma
no podía ser identificado como el Anticristo. Este contraataque jesuita
interpreta todo en la Escritura en su contexto "literal local". En otras palabras
Babilonia, entonces, ya no es la Babilonia mundial y espiritual sino la
Babilonia literal, hasta la segunda venida, y así todo lo espiritual es
literalizado. Algunos elementos del futurismo afectaron las ideas de William
Miller, Josíah Litch y Uriah Smith, haciendo que el razonamiento humano
sustituyera la revelación divina”. Heidi Heiks, Satan’s Counterfeit Prophecy
(TEACH Services, Inc., 2013).120
1
Were, The Spirit Of Prophecy And Armageddon.7.
39
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
terminemos junto al enemigo quitándole poder a las profecías
por desviarnos en alguna interpretación1.
Aunque el espíritu de profecía relaciona la batalla del
Armagedón a elementos religiosos del tiempo de la venida de
Jesús2, cuando algunos autores adventistas enseñaron que
Armagedón es una batalla militar entre naciones de Palestina,
confundiendo así las enseñanzas del mensaje del tercer ángel
con las del futurismo. En la medida que la enseñanza correcta
sea aceptada y proclamada, el digno estilo de vida asociado a la
difusión de estas verdades será mantenido, y las profecías serán
mensajes vibrantes del Salvador que purificarán el alma y la
alistarán para resistir en la batalla del día del Señor (Eze. 13:5).
El problema evidente es que la interpretación incorrecta
determina una preparación incorrecta.
Cualesquiera sean los conflictos militares entre las
naciones, estos no tienen relación en lo que concierne a
Armagedón, porque esta es una batalla entre el cielo y el mundo
entero que se libra en la venida de Jesús, y no antes3.
Este enfoque permeaba hasta la misma música de los
pioneros, como lo rezan las estrofas del himno “Armagedón”,
del año 1852, identificándolo como una batalla de Dios contra
los impíos en el momento de la segunda venida4.
Cualquier magnificación de un supuesto Armagedón
entre las naciones disminuye la grandeza de la doctrina de la
1
2
Ibid., 10.
Louis F. Were, Armageddon And The Advent (Melbourne, Australia,
N.D.).
3
4
Ibid., 4.
Ibid., 5
40
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
segunda venida de Cristo1. Pero al verla como corresponde, este
conflicto cobra su verdadera relevancia.
El Enemigo, Interesado En Desvirtuar La Hermenéutica
Adecuada
Como se ha visto Louis Were consideraba que el
enemigo intentaba ocultar el verdadero mensaje de advertencia y
aliento contenido en Daniel 11 a través de una contrainterpretación que desviara las mentes de muchos a lo mundano
y sin valor espiritual. De esta manera las personas enfrentarían el
desafío final sin la preparación necesaria para “las cosas que
deben suceder pronto”.
Sabiendo el diablo por miles de años de experiencia que
el fiel estudio de la Palabra de Dios lleva a la purificación del
alma, el enemigo roba de la Palabra de Dios su poder vivificador
a través de una errónea interpretación2.
Dios desea que la revelación de su íntimo conocimiento
hecha a sus hijos acerca de todo lo que va a acontecer en el
mundo les dé la fortaleza y confianza suficiente como para
soportar las pruebas venideras con la seguridad de que Dios
conoce todo y los sostendrá3. Las profecías no se proponen
1
Ibid., 6. Un eco reciente de esta idea se encuentra en Michael
Oluikpe Ikechukwu, «Christus victor: Armageddon and atonement in the
Apocalypse», Ministry Magazine, accedido 1 de abril de 2015,
https://www.ministrymagazine.org/https://www.ministrymagazine.org/archi
ve/2014/10/christus-victor.
2
Louis F. Were, The Spirit Of Prophecy And Armageddon (Victoria,
Australia, N.D.).9.
3
Were, God Speaks And Israel Triumphs. ,85
41
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
satisfacer a los curiosos sino preparar a los hijos de Dios para la
crisis venidera.
El Concilio Bíblico de 1919 Posterga la Solución
Los problemas implicados en las ideas de Smith se
fueron haciendo evidentes con el correr del tiempo. Se fue
gestando entonces la idea de una reunión de estudio especial de
la Biblia.
La Conferencia Bíblica de 1919 se produjo durante el
apogeo de una serie de conferencias proféticas celebradas en los
Estados Unidos por los evangélicos conservadores hacia el final y
poco después de la Primera Guerra Mundial. Estas conferencias
proféticas llamaron la atención sobre la el regreso inminente de
Jesús1, pero la mayoría de los adventistas que asistieron a estas
reuniones no podían aceptar sus opiniones dispensacionalistas.
A pesar de las diferencias escatológicas que tuvieron, los líderes
adventistas reconocieron que las conferencias proféticas fueron
una inspiración para su propia reunión.
En total hubo 65 personas que asistieron acompañadas
de entre 7 y 9 taquígrafos. La Conferencia fue el primer
encuentro académico de su tipo, en el cual un número
1
James H. Moorhead, World Without End: Mainstream American
Protestant Visions of the Last Things, 1880-1925 (Indiana University Press,
1999).,173.
42
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
significativo de los participantes tenían una formación avanzada
en teología, historia y lenguas bíblicas1.
La iniciativa específica provino de la Pacific Press, donde
A. O. Tait se desempeñaba como un editor. Ya en 1913, M. C.
Wilcox, siendo editor de la Signs of the Times abogaba por tal
reunión, similar a los institutos bíblicos de antaño. Wilcox
recordó que en el pasado ninguno temía que alguien enseñara
herejía por tener una opinión ligeramente diferente2.
El Concilio de Profesores de Biblia e Historia de
1919 fue convocado mayormente fue pensada como la
reunión que uniría los maestros, teólogos y
administradores adventistas de la Biblia en un todo
coherente a fin de terminar la obra para que Cristo
viniese. Pero tales metas elevadas no se realizaron,
porque pequeños detalles de interpretación profética
condujeron a la polarización teológica, siendo la primera
vez en la historia adventista donde los términos "liberal"
y "conservador" se pronunciaban3. El debate giró hacia
1
«1919 Bible Conference (Adventist)», Wikipedia, the Free
Encyclopedia, 14 de abril de 2014,
http://en.wikipedia.org/w/index.php?title=1919_Bible_Conference_(Advent
ist)&oldid=604171016.
2
Bert Haloviak, «In The Shadow Of The “Daily”: Background And
Aftermath Of The 1919 Bible And History Teachers‟ Conference», A Paper
Presented at the Meeting of Seventh-day Adventist Biblical Scholars (New
York, 14 de noviembre de 1974).,4.
3
Campbell, Michael B., «The 1919 Bible Conference and
Theological Polarization», AdventistHistory.org, accedido 29 de marzo de 2015,
http://www.adventisthistory.org/2014/10/17/the-1919-bible-conferenceand-theological-polarization/.
43
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
explicar el fracaso de la “interpretación turca” de Daniel
111. Sin embargo la falta de consenso2 sobre el tema no
permitió un cambio de rumbo en esa fecha. En un
momento los problemas eran tan divisivos que el
presidente de la Asociación General A. G. Daniells
prohibió la discusión a menos que estuviera presente en
la sala para dirigir los debates. Hasta llegó a comentar su
deseo de “colocar tomar todos estos temas en un globo, y
dejar que ellos se alejan flotando”3. La iglesia no estaba
preparada para asumir el error4, probablemente porque
1
Were, God Speaks And Israel Triumphs. ,60.
Campbell, Michael B. «Adventist Review : Sifting Through the
Past», accedido 24 de marzo de 2015,
http://archives.adventistreview.org/article/3094/archives/issue-20101503/sifting-through-the-past.
3
Campbell, Michael B «The 1919 Bible Conference and Theological
Polarization».
4
F. M. Wilcox enunció una verdad relevante en 1915. Declaró que
“algunos en la iglesia de Dios, hoy como en todas las épocas, se inclinan a ser
demasiado rápidos. Otros se inclinan a ser demasiado lento. Dios en su
providencia vinculó al impulsivo Pedro con los que gente más seria y
conservadora. En su providencia Dios permite estas que diversos
temperamentos se asocian con el fin de que cada uno puede aprender del
otro, y para que la deficiencia de uno pueda ser fortalecida por la abundancia
de otro”. W.W. Prescott, a quien muchos en su momento colocaron en la
categoría de "demasiado rápido", observó que “la verdad y el error caminan
muy cerca, de manera que temamos a la verdad y no nos acerquemos a ella.
Pero si tenemos la sabiduría suficiente como para tener el beneficio completo
de la verdad y no deslizarnos hacia el error, nuestra posición será mejorada”.
Haloviak, «In The Shadow Of The “Daily”: Background And Aftermath Of
The 1919 Bible And History Teachers‟ Conference»,59. .Pese a estos anhelos
de entendimiento, no obstante, en 1919 se produjeron más dudas que
certezas en relación a los problemas de interpretación profética.
2
44
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
nadie aún había explicado hermenéuticamente la falla de
Smith, dando una alternativa contundente a esto. Como
veremos más adelante, esa precisamente sería la
contribución de Louis Were.
Luces y Sombras de las Ideas de Smith según A. Treiyer
En busca de una opinión historicista respetada y
contemporánea acerca del tema, el autor interrogó al Dr.
Alberto R. Treiyer acerca de los claroscuros interpretativos de
Smith. Las respuestas de Treiyer son de particular interés por su
concisión y claridad.
En relación a las contribuciones de Smith A. Treiyer ve
su fidelidad a la herencia historicista protestante y millerita, una
fidelidad al texto bíblico mayor a la de varias interpretaciones
actuales. En cuanto a las debilidades de su posición, Treiyer ve
en Smith más interés en la historia que en las declaraciones
bíblicas (no se preocupó, no pudo o no supo fortalecer
bíblicamente lo que contó en la historia). Esa no debe ser una
crítica porque la ciencia sigue en aumento, y no se le puede
reclamar a Smith información no disponible en sus días.
Otra debilidad de Smith tiene que ver con que su
enfoque del tamid no cuadra con la proyección del santuario de
Daniel. Tampoco su interpretación de Dan 11 es aceptable,
porque considerar que el rey del norte es Turquía, cuando ese
ese imperio terminó en 1840 resultaba anacrónico.
Los comentarios de A. Treiyer, uno de los principales
eruditos historicistas en el adventismo actual, dejan ver que
quizá la principal limitación de Smith tuvo que ver con la
imposibilidad de fortalecer bíblicamente su historicismo. Esto es
45
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
un asunto crucial ayer y hoy. El historicismo debe fortalecerse
con la Biblia, no con la historia. Las pruebas del historicismo
están en la hermenéutica bíblica adecuada. La historia, en todo
caso, confirma lo que la Inspiración autorizó a sostener. Cuando
Jesús en Juan 14:29 dice “Os lo he dicho antes que suceda para
que cuando suceda, creáis” parece indicar que la fe se
fundamenta primero en la revelación. Al ver cómo la revelación
se cumple en la historia la fe ya establecida se profundiza. Pero
los meros acontecimientos de la historia no generan fe, porque
la misma es un don de Dios y viene de su Palabra.
El mejor favor que los intérpretes adventistas actuales
pueden hacerle al historicismo es el de seguir indagando en la
Escritura para profundizar las bases de lo que luego,
oportunamente, será confirmado por la historia1.
1
Un buen ejemplo de esto se ve en Alberto Timm, «Miniature
Symbolization And The Year-Day Principle Of Prophetic Interpretation»,
Andrews University Seminary Studies, 1 De Marzo De 2004.
Otro de estos Buenos ejemplos de nuevas evidencias que fortalecen
el historicismo lo prove A. R. Treiyer: “ahondemos acá, brevemente, algún
punto notable. Tiene que ver con una manera diferente de computar el día
en el calendario hebreo, el calendario juliano, y el calendario gregoriano
actual.
1. Los judíos comenzaban el día en la puesta del sol (en Babilonia a
la salida del sol).
- El calendario juliano comenzaba el día al mediodía (cuando la
sombra pasaba de un meridiano al otro). Así se computó el día hasta
comienzos del S. XX.
- El calendario gregoriano comienza hoy el día de medianoche a
medianoche. (Busqué para saber desde cuándo, pero no encontré
datos definidos aún. Algunos dicen que esa costumbre proviene de
los antiguos romanos, pero no dan una información documentada
46
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
definida. El calendario de la revolución francesa lo hizo partir de la
medianoche. Algo claro para nosotros hoy es que en el calendario
gregoriano que usamos hoy, el día comienza en la medianoche, al
menos, desde ya comenzado el S. XX).
2. Según el calendario hebreo, la fecha correspondiente al Día de la
Expiación en 1844 fue del 22 de octubre a la puesta del sol en Jerusalén, al
23 de octubre a la puesta del sol en el mismo lugar.
- Según el calendario juliano, la fecha correspondiente al Día de la
Expiación en 1844 fue del 22 de octubre al mediodía, al 23 de
octubre al mediodía.
- Según el calendario gregoriano actual la fecha correspondiente al
Día de la Expiación en 1844 fue de la medianoche a la medianoche
el 22 de octubre.
3. En los tres casos, el Día de la Expiación comienza el 22 de octubre.
- Si en lugar de partir del cómputo del día hebreo comenzamos con
el día juliano, le ganamos varias horas a la fecha, logrando que más
tiempo se cumpla en el 22 de octubre.
- Y si luego, a ese cómputo del día juliano lo traducimos al día
gregoriano actual que parte a la medianoche, nos quedamos con el
22 de octubre entero según nuestro cálculo moderno.
- Creo, sin embargo, que la mejor interpretación la dio el hermano
brasileño Juarez Rodrigues de Oliveira, al comparar la hora en
Jerusalén y la hora en Boston. Mientras que el Día de la Expiación
comenzó a la puesta del sol (aproximadamente a las 16:58) el 22 de
octubre en Jerusalén, en Boston esa puesta del sol del 22 de octubre
correspondió a las 9:58 de la mañana. Al concluir ese Día de la
Expiación el 23 de octubre a las 09.27, nos lleva aproximadamente
al momento en que Hiram Edson, pasando por un campo de maíz
después de llorar toda la noche, tal vez un poco antes a la hora del
sacrificio vespertino en Jerusalén, tuvo una visión del santuario
celestial en donde vio a Jesús pasar del lugar santo al lugar
santísimo.
A Hiram Edson le pareció que una mano tocó su espalda, y levantó
su vista como en visión, para ver los cielos abiertos, y a Cristo en el santuario
celestial entrando en el lugar santísimo, para comenzar allí un ministerio a
47
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
Los Aciertos de U. Smith
No todo fue negativo en las enseñanzas de Smith. El
tema de esta investigación enfoca mayormente en sus problemas
hermenéuticos, pero no debe quedar en el lector la sensación de
rechazo total a lo que Uriah Smith escribiera. La iglesia confiaba
plenamente en sus capacidades, al punto que le confiara la tarea
de redactar la primera declaración de las creencias adventistas1.
La entrega de Smith a su ministerio de escritor es
encomiable. En su segunda casa había un estudio al lado del
comedor, donde escribía libros conferencias y cartas después de
la jornada de trabajo en la revisión, trabajando desde las 21
hasta la medianoche o incluso las dos de la mañana. Un vecino
declaró que “cuando todas las casas del barrio están oscuros, la
luz de Smith aún arde”. La hora de la cena era el único
momento que pasaba en familia. Esto, más que revelar alguna
naturaleza antisocial, simplemente era un signo de la devoción
que tenía por su trabajo2.
El hecho de señalar los errores hermenéuticos de Smith ,
por lo tanto, no debiera empequeñecer sus aciertos. No todo lo
que escribió es incorrecto, ni fuera de la hermenéutica
adecuada. El mero hecho de que asumiera la responsabilidad de
favor de su pueblo, en lugar de venir del lugar santísimo para purificar el
mundo con fuego, como habían estado enseñando” Alberto R. Treiyer,
«Cómo llegar astronómicamente al 22 de octubre de 1844», correo
electrónico, 15 de marzo de 2015.
1
Joe Kidder, «Creeds and statements of belief in early Adventist
thought», Andrews University Seminary Studies 47, n.o 1 (1 de marzo de 2009):
101-16.,112.
2
Durand, Yours in the Blessed Hope, Uriah Smith.,197
48
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
escribir el primer comentario bíblico adventista habla a las claras
de su capacidad e iniciativa1. Y que perdurara como la obra
insignia de la interpretación profética por setenta años habla a
las claras de que no fue fácil encontrar a un autor que superara
lo que Smith había logrado. Su posición en la historia adventista
es ilustre, y con todo derecho debe ser llamado “el decano de la
interpretación profética adventista”.
El legado perdurable de Smith, según su compañero
J.N. Loughborough, debe ser medido a largo plazo. Aseguró que
cientos de personas que se regocijan en la luz de la "verdad
presente" fueron despertadas al estudiar atentamente
Pensamientos sobre Daniel y el Apocalipsis, o algunos otros de sus
libros. De manera que, más allá de los defectos de su tarea, la
misma fue un valioso instrumento en la causa que amó2.
1
Allen Roesch, The New World Order: Part of Adventism? (TEACH
Services, Inc., 2004).,33-37.
2
Durand, Yours in the Blessed Hope, Uriah Smith.,209.
49
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
CAPÍTULO II.
LOUIS WERE RESCATA Y PROFUNDIZA LA
HERMENÉUTICA DE LOS PIONEROS
Como ya hemos anticipado, Louis Were fue el
hombre que desactivó la hermenéutica errada de Smith
explicando en que consistieron sus errores, y proveyendo
las bases para una hermenéutica sólida y fiel a lo
delineado por los pioneros. Antes de adentrarnos en las
ideas teológicas de Were y sus controversias
correspondientes conviene trazar una breve reseña de su
vida y ministerio.
Breve reseña biográfica de Louis Were
Louis Fitzroy Were nació en Prospect, Australia
del Sur, el 29 de abril de 18961. Fue el cuarto hijo y el
tercer varón de Albert y Maud Were. El oficio de Albert,
el de constructor, hizo que Louis en su infancia y escuela
primaria se trasladara junto a su familia donde el trabajo
los llevara. Ya en su adolescencia se encontraban
ubicados en el norte de Adelaida, donde Louis se unió al
Club de Natación Amateur. En 1913, a la edad de
diecisiete años, Louis ganó una carrera de larga distancia
en el tiempo de cuarenta y cinco minutos y treinta
segundos. En 1915 ganó el evento por segunda vez,
1
Para una completa historia de la familia de Were ver Eric Were,
The House That Were Built: The History of the Were Family In Australia, 18801980 : With A Study Of Origins In England And «Cousins» Abroad (E. Were,
1980).
50
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
nadando la distancia en treinta minutos y diez segundos.
El adventismo estaba bien arraigado en la familia
antes del inicio de la Primera Guerra Mundial. Más
temprano, el abuelo de Louis, Walter Were, se había
establecido en el sur de Australia alrededor de 1880
después de emigrar con su esposa y niños desde Bristol,
Inglaterra. Antes de comienzos de siglo Walter ya se
había convertido en adventista del séptimo día. Sin
embargo, el padre de Louis, Albert, no compartía las
mismas convicciones.
Albert se ofreció voluntariamente para el servicio
militar, pero lo decepcionó amargamente que dos de sus
hijos, Albert Jr., y Louis, se negaran a acompañarlo por
ser objetores de conciencia. Los jóvenes se quedaron en
Adelaida y continuaron con el negocio familiar de
albañilería. Sin embargo, Louis no fue insensible ni
indiferente a los tiempos que vivía. De hecho, la Primera
Guerra Mundial, dejó marcadas impresiones en su
mente. Él, como muchos otros, fueron estimulados a
pensar en el significado de los acontecimientos a la luz
de la Escritura1.
Aparentemente fue Albert Jr. quien, habiéndose
convertido en adventista, persuadió Louis a aceptar las
mismas enseñanzas. Poco después, Louis se casó con la
Jessie Blanche Henderson, una joven de Adelaida,
apenas unos meses mayor que él. El pastor C.P. Michaels
llevó a cabo la ceremonia en su casa el 11 de noviembre
de 1915. Jesse había sido bautizada previamente por el
1
Milton Hook, «Louis Were» (Australia, 1986).,4.
51
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
pastor W.J. Westerman ese mismo año.
La pareja recién casada se mudó a Cooranbong,
para que Louis asistiera al colegio de Avondale y se
preparara como misionero. Las perspectivas eran
halagueñas por la obra bíblica en Australasia o el servicio
en el extranjero a pesar de la encarnizada guerra en el
otro lado del mundo1.
El profesor de Biblia durante su estadía en
Avondale fue el pastor Robert Hare. A veces los pastores
A. Smart y F. L. Sharp, el preceptor, asistían a Hare en
sus clases. Algunos de los compañeros de la pequeña
camada de Were prestaron servicio en el extranjero,
como por ejemplo el pastor J. B. Conley que sirvió en la
India, volviendo más tarde para continuar la
evangelización en Australia. Were permaneció en
Australia y se desarrolló como un prominente
evangelista2. Hizo campañas en Nueva Zelanda, Victoria,
Nueva Gales del Sur, Australia del Sur, y brevemente en
Brisbane3.
Su estadía en Nueva Zelanda fue memorable por
una serie de razones. Allí nació su única hija, Nancy en
11
Ibid., 5.
Acerca de la estrategia evangelizadora de Were ver Louis F. Were,
«The Better Workman», Ministry Magazine, accedido 31 de marzo de 2015,
https://www.ministrymagazine.org/https://www.ministrymagazine.org/archi
ve/1933/11/the-better-workman. Louis F. Were, «Reaching the People»,
Ministry Magazine, accedido 31 de marzo de 2015,
https://www.ministrymagazine.org/https://www.ministrymagazine.org/archi
ve/1932/11/reaching-the-people.
3
Ibid., 6.
2
52
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
mayo de 1922. Además, en 1924 fue ordenado al
ministerio, siendo uno de la más jóvenes en recibir el
rito hasta ese momento.
De repercusiones duraderas en su pensamiento
fue el estudio bíblico que tuvo con un ministro
protestante, quien demostró algunas inconsistencias en
sus presentaciones bíblicas. Luego de ese apuro Were se
prometió a sí mismo no volver a ser avergonzado. Se
embarcó en un curso personal de estudio de la Biblia
para mejorarse a sí mismo. Su amplia lectura y
conclusiones sobre temas proféticos más tarde lo
llevaron a controversias con el pensamiento adventista
tradicional de sus días, pero esto no le restó éxito como
evangelista. Estaba muy bien considerado por muchos
administradores, y fue designado como delegado especial
a los Consejos anuales de la Australasian Union
Conference, entre 1932 y 19351.
El período entre las dos guerras mundiales fue,
en términos generales, una época de efervescencia en la
interpretación profética. Were no se apresuró a escribir
sus incipientes perspectivas de la profecía. Sus primeros
artículos aparecieron en la revista denominacional Signs
of the Times2, del 8 al 20 de julio de 1931. Ellos fueron
aparentemente diseñados para contrarrestar algunos
1
Ibid., 7.
Por su misma naturaleza la revista Signs of the Times, tanto en su
edición americana o australiana, tendía a ser más popular. Paul B. Ricchiuti,
Arthur S. Maxwell: Remembering an Adventist Legend (Pacific Press Publishing
Association, 2009).,50. La popularidad de Signs era un arma de doble filo,
porque los errores interpretativos que se filtraran en ella afectaban
directamente la imagen de la iglesia ante el público en general.
2
53
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
elementos del futurismo que veía presentes en las
enseñanzas de la iglesia, por ejemplo, en los escritos del
pastor A.. Anderson. Cuando el libro de Anderson,
Through Turmoil to Peace ,se publicó en 1932 Were no
calló su desacuerdo con los capítulos que hablaban del
papel de Gran Bretaña, Turquía, Rusia y las naciones del
Lejano Oriente en el cumplimiento de la profecía
bíblica. Estas diferencias teológicas nunca se resolvieron.
De hecho, la mayoría de sus compañeros y los ministros
aún más jóvenes que se graduaban de Avondale hasta
finales de la década de 1950 siguieron las líneas
tradicionales de interpretación que se encontraban en la
exposición de Uriah Smith1.
Después de una larga y dolorosa lucha contra el
cáncer su esposa Jessie, falleció el 6 de enero de 1942,
en Adelaida. El Presidente de la Asociación de Australia
del Sur, pastor W.M.R Scragg, junto al pastor N.A.
Ferris, llevaron a cabo el funeral. A pesar del trauma
personal continuó lo mejor que pudo con el evangelismo
en la ciudad. El diálogo con sus sobre las diferencias
doctrinales también continuó. De hecho, se creó "La
Comisión de Estudio Especial", con el propósito
específico de examinar estas diferencias. Were fue
miembro de la subcomisión especial y presentó sus
puntos de vista sobre el Armagedón y temas
relacionados. Las reuniones del Comité se celebraron en
varias ocasiones durante 1941 y 1942, pero la gran
mayoría de los miembros del comité rechazaron las
interpretaciones de Were. Solo los pastores Kranz y
1
Milton Hook, «Louis Were», 8.
54
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
Scragg concordaban con algunos de sus puntos de vista1.
Were, rechazado por sus compañeros, denostado
por algunos, y traumatizado por la pérdida personal, se
encontró en una situación vulnerable en 1942. Una
mujer enajenada y con dos hijos, Sra D.E. Jacobs,
desarrolló un interés romántico en Were. Ella era la hija
de una pareja de ancianos en el distrito de las colinas de
Adelaida. Eran conversos recientes de la iglesia. La mujer
deseaba casarse de nuevo, proporcionando así un padre
adoptivo para sus hijos. Sin embargo, Were eligió de
manera diferente, y se casó con la señorita Alma Belle
Preuss, de Victoria, en 1943. Ella había servido a la
iglesia como instructora bíblica, pero actualmente
ayudaba en el negocio de su familia. De cuna bautista,
asistió al Colegio de Avondale, y posteriormente se
convirtió en Adventista del Séptimo Día.
La Sra. Jacobs, celosa porque Were se había
casado con otra mujer, echó a correr versiones
difamatorias contra Were, las cuales motivaron su
despido. Más tarde ella escribiría al presidente Scragg
confesando que había inventado las historias que
comenzaron los rumores. "Dios sabe que no se rompió la
ley moral, Were está sufriendo por algo que no hizo". Lo
cierto es que el 9 de marzo de 1943, la Junta de la
Asociación votó a favor de destituir a Were. El
presidente, Scragg, se opuso y escribió a la sede de la
Unión para que se reconsiderara el caso. En respuesta, el
Comité Ejecutivo votó que la Junta de la Asociación
definiera el tema. Were, en consecuencia, no fue
1
Ibid., 9.
55
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
reincorporado.
Él y Alma se trasladaron a Melbourne, donde
realizó trabajos de oficina. Alma, trabajó en un
floreciente negocio de ropa de su hermana. Louis, no
obstante, no fue desglosado de la iglesia. Asistió
regularmente a la iglesia de Auburn y su devoción por su
mujer y su iglesia nunca menguó. Aunque la recepción
inicial de la iglesia de Auburn fue fría finalmente se
descongeló. Louis continuó ganando almas, dirigió la
Escuela Sabática, una clase bíblica los sábados de tarde y
fue elegido anciano. Louis, en su tiempo se embarcó en
la carrera de escritor y llegó a ser prolífico1. Por veinte
años sacó casi un libro o tratado por año, mayormente
sobre escatología2. Falleció de un ataque cardíaco el 2 de
abril de 1967, a la edad de 71 años. Su funeral fue
dirigido por su amigo de años, el pastor J.W.Kent.
Sucesores de las Ideas de Smith
Las ideas de Smith acerca de un Armagedón
literal crecieron en popularidad, y continuaron en
autores tales como por H.E. Robinson, W.W. Prescott,
W. A. Spicer, W. H. Branson, J. E. Fulton, A. G.
Daniells y C.M. Snow3.
Además de estos autores destacados, un suceso
notable que propagó las ideas de Smith hasta mitad del
siglo XX fue la publicación del libro Bible Readings for the
1
Ibid., 11.
Ibid., 12.
3
Hook, «Louis Were». ,17.
2
56
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
Home, un manual de estudios bíblicos frecuentemente
estudiado en los cultos de familia y las iglesias, y
consultado continuamente en el evangelismo público y
personal. Uno de sus capítulos estudia la así llamada
“Cuestión Oriental”1, y contiene las principales ideas
promovidas por Smith en su libro Daniel y Apocalipsis.
Otro factor que añadió vigencia a las ideas de
Smith tuvo que ver con los acontecimientos de la
Primera Guerra Mundial, que aumentaron las
aplicaciones literales de las profecías del tiempo del fin.
Típico de esto fue el artículo de Snow publicado en 1914
bajo el título "¿Es este el Armagedón?" Armagedón,
escribió, es un lugar real donde "las fuerzas de las
naciones se reúnen ... para librar una batalla literal por la
posesión de una ciudad literal a unas cincuenta millas
desde ese lugar. Se reúnen en Armagedón; la batalla se
llevará a cabo en torno a Jerusalén ". Del mismo modo,
en el Valle de Josafat (Joel 3: 9-14), se veía como el
escenario de la batalla de los últimos tiempos2.
Los Adventistas del Séptimo Día, quienes
1
Bible Readings for the Home (Review and Herald Pub Assoc,
s. f.).,261. Este eufemismo de alguna manera suaviza el tórrido debate que
perduró por décadas. Paul Petersen y Ross Cole, Hermeneutics, Intertextuality
and the Contemporary Meaning of Scripture: Intertextuality and the Contemporary
Meaning of Scripture (ATF Press, 2013).,130.
2
Ibid., 21. Acontecimientos posteriores en la escena internacional
reforzaron este punto de vista entre los adventistas. La guerra ítalo-turca
(1911-1912), el ingreso de Turquía en la Primera Guerra Mundial en 1914, y
la guerra greco-turca lo volvieron al papado aparentemente irrelevante
(Mansell, p 39;. RH, 05 de noviembre 1871). “King of the north”. Fortin y
Moon, The Ellen G. White Encyclopedia.
57
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
enfatizan los servicios del santuario literal y su
importancia, junto a las ideas de que el Templo literal de
Jerusalén tiene su contraparte literal en el cielo, eran
naturalmente receptivos a las aplicaciones literales de la
escatología centradas en la Palestina literal. Cuando
Palestina cayó en manos de los ingleses y el Estado de
Israel se estableció posteriormente, haciendo improbable
que los turcos establecieran su capital en Jerusalén,
algunos adventistas comenzaron a buscar diferentes
explicaciones de las profecías. Louis Were fue uno de
esos hombres. La mayoría, sin embargo, persistió en la
escatología de Smith1.
Por supuesto, las predicciones, interpretaciones y
expectativas de que la Primera Guerra Mundial podría
culminar en una batalla literal de Armagedón, previa a la
Segunda Venida de Cristo, no se realizaron. En las
reinterpretaciones, los escritores confesionales seguían
contemplando los informes periódicos y su vinculación
con textos de la Escritura2.
Después de la Primera Guerra Mundial, A.W.
Anderson también estuvo entre los que reinterpretó los
tiempos. Anderson, antes de convertirse en adventista,
era un hombre de negocios en Melbourne. Sin ningún
entrenamiento formal en teología se convirtió en editor
y pastor de la denominación gracias a la fuerza de su
habilidad natural, especialmente su don para la escritura
y la oratoria. En 1925 Anderson escribió un artículo en
el que explicaba que cómo el papado era un poder
1
Ibid., 19
Hook, «Louis Were». ,24.
2
58
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
debilitado1, Satanás fue en busca de nuevos caminos
para esclavizar a la gente. Anderson propuso que el
sindicalismo obligatorio era el testaferro del diablo de la
década de 1920. Posteriormente publicó dos libros más
que añadieron más confusión que claridad2.
Were, en diálogo con un ministro protestante en
Nueva Zelanda, fue alertado del futurismo filtrado en la
iglesia adventista. Cuando trató de demostrar los errores
de su colega éste le hizo notar la afinidad de los puntos
de vista de Smith con los de su iglesia, junto con algunas
inconsistencias de este autor. Una vez que Were leyó los
libros y artículos de revistas denominacionales que
destilaban futurismo empezó a esforzarse para desviar la
tendencia, y presentar las aplicaciones espirituales de los
pasajes escatológicos de la Escritura.
1
El tema de un papado supuestamente debilitado se repitió muchas
veces en los editoriales mensuales de Smith en la Review. Él creía que el
papado declinaría notablemente antes del fin del mundo, y que esto mismo
estaba ocurriendo en sus días. Llama la atención como esta posición peculiar
perdurara tanto tiempo. El editor se diferenció de otros teólogos adventistas
que comprendían que la "herida mortal" del papado había comenzado
sanarse con la elección de un nuevo papa en el año 1800. Después de la
muerte de Smith, en 1929, aconteció el concordato del papa con Mussolini,
que marcó la restauración del poder temporal y la curación de la herida.
La fascinación de Smith por Turquía quizá lo encandiló como para
no ver el rol del papado en sus días. Incluso en ocasiones el pastor Smith
parece haber pasado de expositor a profeta, construyendo alusiones bíblicas
fragmentarias sobre las cuales erigía escenarios detallados. Anderson fue uno
de sus sucesores en esta tendencia.Durand, Yours in the Blessed Hope, Uriah
Smith.,208. Irónicamente, el asunto de una “Roma inofensiva” ha retornado
hoy. Loren Seibol, «Letting Roman Catholics Off the Hook», accedido 26 de
marzo de 2015, http://www.adventistonline.com/forum/topics/lettingroman-catholics-off.
2
Hook, «Louis Were». ,28.
59
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
Resistencia a Were en Australia, su país natal
Milton Hook reseña algunos motivos de la resistencia a los
postulados de Were en Australia. Declara que “los supuestos
subyacentes en las posiciones doctrinales son significativos.
Muchos miembros de la iglesia, entre ellos ministros, no estaban
entrenados para pensar de forma analítica ni fueron forzados a
examinar sus supuestos del escenario escatológico cuando los
aceptaron y comenzaron a enseñar. La resistencia al cambio se
debió en parte a este factor. Otros factores que consolidaron esta
resistencia fueron la fe en el punto de vista mayoritario, el
literalismo prevaleciente en la iglesia, los elemento futuristas
aceptados, la falta de voluntad para adoptar una actitud
pluralista respecto de las profecías no cumplidas; el aislamiento
geográfico de las tendencias progresistas de pensamiento dentro
de la iglesia en Norteamérica, la práctica de tener comités de
investigación compuestos mayormente por hombres sin
entrenamiento teológico formal… y la persistente tendencia a
mirar la profecía por medio del periódico en lugar de
entenderla a través de los ojos de su propios escritores. La
historia ilustra la multiplicidad de interpretaciones proféticas. Al
mirar al pasado se aprecia la necesidad de cautela al predicar
sobre el futuro1.
De esta manera Hook señala las razones por las cuales Were
resultaba incómodo. Sus ideas eran vistas como progresistas
aunque en realidad intentaban retrotraer el pensamiento
profético adventista a su rumbo original. Sin embargo las
convicciones de Were, al ser sólidas y bíblicas resistieron la
incomprensión inicial en Australia, y se abrieron paso a otros
1
Ibid.,66,67
60
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
lugares del mundo. Para algunos no fue “profeta en su tierra”,
pero para muchos fue un gran intérprete. Incomprendido cerca
pero aceptado lejos, su contribución fue más lejos en el tiempo y
en el espacio de lo que el mismo imaginó.
Controversia entre Were y A.W. Anderson
En 1931 Were envió un artículo al editor de la
revista Signs of the Times, C.M. Snow. No se refirió
directamente a la escatología de Anderson. Optó, en
cambio, por atacar el futurismo en general. Los que
enseñan el futurismo, escribió, "luchan contra la verdad,
se rebelan contra la Palabra de Dios, resisten el
testimonio del espíritu de profecía, dificultan el trabajo
de la Reforma, promueven el progreso de la apostasía, se
oponen a Cristo, y ayudan al Anticristo”. El artículo,
reimpreso en forma de folleto por la Signs Publishing
Company, trazó la historia del futurismo, reveló sus
debilidades, e insistió en que solo el papado era el
Anticristo1.
Poco después de esto, en 1932, sale de la misma
imprenta Through Turmoil to Peace2, de A. W. Anderson.
Were no publicó nada inmediatamente como para
contrarrestar directamente la opinión de Anderson, pero
inició discusiones en Victoria e hizo públicas sus
objeciones a las ideas de Anderson. Algunos
consideraron esto como un acto de valentía, otros como
un acto algo temerario en vista de que Were era un
1
Ibid.35.
A. W. Anderson, Through Turmoil to Peace ... Divine Plan in Nature
and Revelation (Signs Publishing Company, 1932).2
61
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
joven ministro y Anderson uno de los líderes de la
Unión de Australasia, y figura de larga data en la
administración de la iglesia. Su oposición al libro de
Anderson inició una larga “guerra fría” entre ambos. A
finales de 1933 Anderson escribió a Were justificando su
escatología con el argumento de que su largo y exitoso
ministerio demostraba que sus enseñanzas no podían ser
erróneas1. Anderson no percibió que los buenos
resultados como ministro son evidencia de la obra del
Espíritu Santo en el trabajo, no de una perfecta teología.
El Espíritu Santo se digna a obrar pese a una teología
imperfecta2.
Sin embargo el giro de los acontecimientos fue
contra la opinión de Anderson y pareció reivindicar la
posición de Were. Antes de que la Segunda Guerra
terminara, Were empezó a levantar el perfil.
Comprensiblemente, Anderson se mantuvo relativamente
callado en cuanto a los temas candentes. Los que
secundaban a Anderson en la escuela tradicional de
pensamiento, aún influidos por las ideas de Smith, se
sentían cada vez más incómodos con Were, pero el punto
más álgido de la controversia llegaría una década después
de la publicación del libro de Anderson.
Pero Anderson no estaba sin compañía. Ideas
similares a las suyas también se encontraban pululando en
Norteamérica, como por ejemplo con la obra escrita en
1937por Gwynne Dalrymple, titulada The Hour of Destiny:
1
Ibid., 36.
Ibid., 37.
2
62
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
Awakening of the Orient1.
Como ya fue dicho, las circunstancias de la
Segunda Guerra Mundial habían puesto en duda algunos
aspectos del escenario escatológico tradicional . Ante estos
eventos Were tomó nuevos bríos en la expresión de sus
aplicaciones espirituales de las profecías. Anderson, por su
parte, persistió en sus interpretaciones personales. Al
término de una reunión entre ambos el pastor Kranz
solicitó a los administradores de la iglesia un comité "para
investigar la verdad de Daniel 11 y dar alguna orientación
sobre este asunto de la especulación y las nuevas teorías".
Un subcomité especial se estableció inmediatamente para
estudiar los puntos de vista opuestos. Las reuniones se
llevaron a cabo en julio de 1941 en Warburton, Victoria,
y en Wahroonga, en septiembre de ese mismo año. Tanto
Anderson y Were estaban entre los doce miembros de la
comisión, pero solo una minoría tenia preparación
teológica formal2.
Crece la Controversia entre Were y dirigentes australianos
Un hecho que caldeó los ánimos en contra de Were fue
que el comenzara a predicar sus puntos de vista en marzo de
1942, alentado por algunos colegas. Quizá dando por sentado
que la mayoría de la comisión especial de estudio estaba de su
lado, o que el presidente de su campo misionero era de mente
abierta sobre el tema, o quizás forzando la cuestión después de
una década de debate privado, lo cierto es que comenzó a
1
Ibid. Gwynne Dalrymple, The Hour of Destiny: Awakening of the
Orient (Pacific Press, 1937).
2
Ibid., 39.
63
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
publicar sus ideas correctas antes de que los dirigentes de la
iglesia estuvieses preparados para apoyarlas. Probablemente su
alma de evangelista, al ver que los acontecimientos bélicos
habían desacreditado algunos de los puntos de vista
tradicionales, lo llevo a reevaluar y publicar sus “nuevas”
interpretaciones. Puede ser que se haya sentido de alguna
manera reivindicado al hacerlo. Cualquiera haya sido su
motivación, lo que siguió atrajo la atención internacional y tuvo
repercusiones duraderas1.
Were Hace Públicas Sus Ideas
En el contexto de la guerra y la especulación de
una eventual invasión japonesa se llevaron a cabo tres
conferencias públicas en el Ayuntamiento de Adelaida en
marzo, abril y mayo de 1942. Aunque era difícil convocar
una audiencia en tiempos de guerra, Were logró reunir
interesados mediante la capitalización de la inminente
invasión japonesa. El 22 de marzo y el 17 de mayo Were
hizo caer sus bombas atómicas figurativas. Fue un impacto
en la audiencia2.
Esta interpretación espiritual de Armagedón iba
en contra de la tradicional y fue criticada por los colegas
de Were. Su primera conferencia fue, sin embargo, la que
encendió la explosión inicial. La conferencia se tituló "El
Peligro Amarillo”, planteando las preguntas. ¿Hacia
dónde va Japón? ¿Irá a Palestina a través de la India? ¿Son
los japoneses" los reyes de Oriente"? ¿Cumplirá Japón la
1
Hook, «Louis Were».,67.
Ibid., 44.
2
64
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
profecía? Todas las preguntas que un tradicionalista
respondería afirmativamente, serían rotundamente
refutadas por Were. Concluyó su conferencia diciendo
que: "La Biblia no dice nada sobre Japón, y no dice nada
acerca de sus conquistas en cualquier dirección". La
importancia de esta disertación no puede ser
subestimada. Por primera vez se esbozó públicamente su
respuesta a los elementos del futurismo filtrados en la
escatología adventista1.
Las interpretaciones de Were chocaron
estruendosamente con la larga lista de expositores
tradicionales de la iglesia, pero se alinearon con las de
Miller y Jaime White. A pesar de ser acusado de remover
los hitos de la fe en realidad los estaba restaurando a su
lugar2.
Comité De Estudio Rechaza Las Ideas De Were
El Comité volvió a reunirse luego de las conferencias de
Were, pero ratificó las inconsistencias tradicionales, indicando
que los símbolos podrían aplicarse literalmente,
espiritualmente, o incluso de ambas maneras. Su decisión fue
trascendental, ya que sentó las bases para un manifiesto
1
Ibid., 45. Una vez finalizada la segunda guerra mundial lo que
anticipó Were fue reconocido. Ver Andrew Nelson, «Japan and the Kings of
the East», Ministry Magazine, accedido 1 de abril de 2015,
https://www.ministrymagazine.org/https://www.ministrymagazine.org/archi
ve/1946/06/japan-and-the-kings-of-the-east.
2
Ibid., 47.
65
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
posterior que procuró ser la palabra final sobre este asunto1. En
el documento declararon que
1. En nuestra opinión la afirmación del pastor Were
sobre que "los reyes del Oriente" son "los santos de
Cristo y sus ángeles y resucitados" es insostenible, y
no tiene apoyo ni en las Escrituras ni en el Espíritu
de Profecía. Deseamos ofrecer los siguientes motivos
de esta opinión:
a) Que el Oriente no es el sitio de la Presencia de
Dios, sino que bíblicamente Oriente es oriente
de Palestina.
b) Que no hay razones ni en las Escrituras ni en
el espíritu de profecía para creer que los Reyes de
Oriente son "celestiales".
c) Que dicha interpretación es totalmente
contraria al estilo general y el carácter del libro de
Apocalipsis en que el escritor muestra a Cristo.
2. Recomendamos que, en armonía con el
consejo del Espíritu de Profecía esta
interpretación no sea enseñada, ya que creemos
que la exposición de esta enseñanza confundirá
en lugar de edificar a la gente2.
Los miembros del Comité regresaron a sus diversas áreas
de trabajo llevando con ellos las mismas convicciones que tenían
antes. Un tratado destacando la visión tradicional se preparó y
distribuyó ampliamente en todo Australasia. Poco después,
Were quedó cesante.
1
Ibid., 48.
Ibid., 55.
2
66
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
De alguna manera su despido lo liberó de las
restricciones anteriores. Pronto publicó un folleto titulado “Qué
es el Armagedón?” Antes de que terminase la Segunda Guerra
Mundial había publicó dos folletos más en relación con este
tema1. Estos folletos fomentaron el debate sobre el tema entre
los miembros de la iglesia. En un intento de sofocar la creciente
aceptación de las enseñanzas de Were, especialmente en
Melbourne, los pastores Conley, Fastor y A.H. Piper realizaron
cuatro reuniones. Pero la serie de reuniones de Melbourne
resultó contraproducente para los tradicionalistas, porque
despertaron aún más interés en los puntos de vista de Were. El
pastor A. Davies, (cuñado del ex presidente de la Asociación
General, el pastor C.H. Watson), escribió al pastor W.G.
Turner, presidente de la Unión, pidiendo que la
administración revisara las ideas de Were, pero Turner
respondió que el tema ya se había estudiado y definido2.
Se Suman Adherentes A Las Posiciones De Were
Mientras tanto los postulados de Were ya eran leídos por
muchos en Australia y en el extranjero. S. Lindt, profesor en
Walla Walla, enseñaba lo mismo. Su posición, tomada
independientemente de Were al menos quince años antes, al
parecer tuvo su contraparte en Estados Unidos entre algunos
maestros de Biblia3. Noticias sobre el gradual interés en estos
1
Ibid.
Ibid, 56.
3
Un ejemplo de la hermenéutica de Lindt, muy similar a la de Were
lo encontramos en sus conclusiones acerca de la identidad de los reyes del
oriente. “Satanás empezó esta gran controversia en el cielo y la continuará
2
67
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
puntos de vista poco a poco fueron ganando la simpatía de los
líderes de la iglesia en Estados Unidos. Esto fue desconcertante
para la mayoría de dirigentes australianos debido a la posición
inflexible adoptada por ellos en 19421.
El intercambio de cartas entre los administradores
australianos y estadounidenses durante los siguientes años deja
ver el esfuerzo australiano para contener o erradicar las creencias
de Were . La reacción norteamericana fue inicialmente negativa
a la aplicación espiritual. En otras ocasiones, se mostró evasiva,
paternalista e incluso conciliadora, hasta el punto donde se
obtiene la impresión de que la nueva opinión ya contaba con
apoyo en América2.
siempre que el tiempo dure. En los días finales de la historia de la tierra va a
suplantar a Cristo y venir como un ángel de luz, exigiendo el homenaje del
mundo. Un homenaje que el remanente se niega a dar, y por lo tanto quedan
marcados para la destrucción.
La batalla referida en la sexta plaga no se nombra en la Escritura como la
batalla de Armagedón, sino más bien la batalla de aquel gran día del Dios
Todopoderoso. (Apocalipsis 16:14). Los reyes de la tierra se juntarán por los
espíritus inmundos, y se reunieron para hacer guerra contra el Cordero.
(Apocalipsis 17:14). Esto lo puede hacer sólo por que se rebela contra el
pueblo de Dios.
Los reyes del oriente se establecen en contraposición con los reyes de la tierra
en Apocalipsis 16, porque son un grup independiente y distinto, y no se los
puede considerar como una parte de este mundo. Así nos vemos obligados a
la conclusión de que estos reyes del sol naciente son, en realidad, el pueblo
de Dios, y en respuesta a sus oraciones, y para reprender a los impíos el Señor
abre la vía de escape para ellos como lo hizo con Israel a través del Mar Rojo”.
S.H. Lindt, «Los Reyes del Oriente: Un detallado estudio de la Sexta Plaga»
(College Place, Washington, s. f.).
1
Ibid., 57.
Ibid. 60.
2
68
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
Algunos profesores americanos comenzaron a escribir
cartas de apoyo y gratitud a Were. Mientras tanto en Australia
las enseñanzas de Were eran aceptadas por muchos pastores y
miembros de iglesia. El pastor Joseph Harvey fue movido a
publicar su propio folleto titulado, El Armagedón del Apocalipsis.
Cuando empezó a distribuir el folleto fue asesorado por Neal
Wilson, el nuevo presidente de la Unión de Australasia, para
que deje de hacerlo. Harvey, ofendido, escribió a la Asociación
General una carta de queja. Wilson escribió también para
informar de la situación. Roenfeldt, actuando como defensor de
la visión tradicional, respondió a Harvey diciendo que "la
denominación no acepta sus opiniones particulares sobre el
tema... Lo correcto es que usted guarde silencio sobre este tema
... Si Dios tiene nueva luz, o luz adicional, para su pueblo, no va
a limitar la entrega de esa luz a una sola persona. ". Eso
precisamente estaba pasando con hombres como Were, Kranz,
Scragg, Price, Lindt, Wolfkill y muchos más. Roenfeldt estaba
en condiciones de saber eso, pero se resistía a hacerlo1. Harvey
también perdió su empleo a causa de sus ideas2.
Esta interna entre tradicionalistas y progresistas se
caracterizó por una preparación académica escasa en unos y por
la natural profundidad de pensamiento, propia de los
académicos, en los otros3.
Were, no obstante, proseguía su lucha porque
consideraba que el futurismo minaba el adventismo. Creía,
como ya vimos, que el énfasis del futurismo en Palestina sacaba
del centro de atención al papado y por lo tanto era una
distracción satánica del Mensaje del Tercer Ángel. La batalla
1
Ibid., 61.
Ibid.,63
3
Ibid.
2
69
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
espiritual de los últimos días sería acerca del sábado en lugar de
una lucha literal entre naciones en Palestina. Were enseñó que
el séptimo día, el sábado, debía ser sostenido por el Israel
espiritual. Es decir, que no era sólo una institución para el Israel
literal. Además, la interpretación de la denominación de los
mensajes de los tres ángeles se basa en una aplicación espiritual
de los acontecimientos literales en los tiempos del Antiguo
Testamento. Por ejemplo, "la hora del juicio de Dios... es el
antitipo del día de la expiación en la economía antigua literal de
Israel." Were era muy consciente de que el futurismo socavaba
algunos de los fundamentos del Adventismo1.
Las ideas de Were fueron ganando terreno. Incluso los
hombres que regresaban a Australia luego de estudiar en el
Seminario de Washington qse sumaban a su lado .
Luego del Congreso de la Asociación General de 1950 se
realizó un Concilio de Profesores de Biblia. Aunque Were no
tomó ninguna parte visible, los eruditos le estaban agradecidos
por sus conversaciones esclarecedoras en privado. Durante el
Consejo de Profesores un participante presentó un documento
titulado "La enseñanza de temas polémicos". R.F. Cottrell
propuso una encuesta anónima que se distribuyera luego de su
presentación para que los oyentes expresaran sus puntos de vista
en relación a temas polémicos como el Armagedón, el rey del
norte, y el río Eufrates. Las respuestas se recopilaron y
publicaron los resultados en el informe del Consejo. Los
resultados indicaron que los profesores mayormente creían en la
aplicación espiritual en relación con el Armagedón. Were,
1
Ibid.,64.
70
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
comprensiblemente, estaba exultante y regresó a Australia
sintiéndose reivindicado1.
Costo Político de las Hermenéutica de Were
Si L. Were hubiera sido políticamente correcto sus ideas
se hubieran extinguido en la lejana Australia, donde algunos
hombres dirigentes prominentes se le oponían. Sin embargo no
renunció a sus posiciones teológicas sino que las siguió
profundizando, predicando y escribiendo, aún después de
quedar cesante, de manera que sus enseñanzas influenciaron a
los adventistas de Europa y Norteamérica2.
Lo cierto es que en todo tiempo la iglesia ha enfrentado
voces divergentes. Tanto en el tiempo de Were, como en el
anterior y en el actual se han suscitado crisis y voces divergentes,
que impactaron con mayor o menor fuerza en la vida de la
iglesia. Sin embargo la historia también da testimonio de la
aparición de las “personas correctas, en el lugar correcto, y en el
momento correcto”. Personas con convicciones que pagaron el
precio de las mismas siendo fieles a la conciencia de su deber, las
cuales influyeron en el rumbo de la denominación. Were, en su
momento, fue una de ellas. Y este tiempo necesita personas
tales.
Were Aceptado En EEUU Aunque Resistido En Australia
1
Ibid.,65.
Gluder Quispe, Dónald Jaimes Zubieta, And Nidia Montalvo
Cárdenas, The Apocalypse In Seventh-Day Adventist Interpretation (Ñaña, Lima:
Imprenta Unión, 2013). 135. Sobre El Costo Político De Las
Interpretaciones Similares A La De Were Ver Mansell, Los Adventistas y el
Armagedón.,66 Nota 41.
2
71
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
Arthur Patrick recuerda que en sus años como estudiante del seminario de
Teología “no era políticamente correcto…mencionar el nombre de Louis
Were o ser visto con sus libros. Pero cuando llegué al Seminario Teológico
Adventista en la Universidad Andrews, pronto encontré una actitud muy
diferente hacia Were. De hecho Hans LaRondelle recomendaba sus libros a
los estudiantes de seminario, para ser leídos junto con los apuntes de clase” .
1
La encrucijada de N. Wilson
Sintiendo como si estuviera perdiendo el control del
problema N. Wilson escribió una carta angustiada al pastor
W.H. Branson, presidente de la Asociación General, y al pastor
A.V. Olsen, secretario general . Wilson describió su situación
como una en la que se encontraba atrapado entre el
tradicionalismo intransigente de los australianos en 1942 y el
aparente pluralismo que reinaba en América. Los
administradores americanos aparentemente estaban
permitiendo que la aplicación espiritual en relación con el
Armagedón siguiera su curso. Si Wilson hiciera lo propio temía
ser desleal con el "manifiesto" de 1942. Para empeorar las cosas
algunos crujientes tradicionalistas australianos estaban poniendo
presión sobre Wilson para acabar con la propagación de las
ideas de Were de una buena vez.
Wilson reiteró su preocupación en otra carta, afirmando
sentirse "muy avergonzado" porque parecía que los maestros de
Biblia de Norteamérica habían renunciado a la vieja posición
sobre el Armagedón. Los líderes americanos intentaron
tranquilizarlo asegurándole que el tema no era esencial para la
1
Ibid., 174.
72
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
salvación, y que lamentaban las molestias que le ocasionaba en
su liderazgo en Australia.
La Visita De Louis Were A Los Estados Unidos Y El
Crecimiento Del Énfasis Cristocéntrico En La Interpretación
Profética.
Como se ha visto hasta aquí, un importante punto de
inflexión en el desarrollo de la escatología adventista del
séptimo día fue promovido por los conceptos escatológicos
cristocéntricos del australiano Louis Were. Vimos también que
ya en la década de 1930 Were defendía el concepto de que el
Armagedón debía ser considerado como la última batalla
cósmica entre las fuerzas del bien y el mal.
A pesar de la oposición que enfrentó en Australia y en
otros lugares, asistió por su cuenta a la sesión de la Asociación
General de 1950 en San Francisco, California, y permaneció
por algún tiempo en los Estados Unidos. Sus ideas fueron bien
aceptadas en ese momento por varios miembros de la Biblical
Research Fellowship. Algunos de su libros fueron más tarde
republicados y distribuidos en los Estados Unidos y otros países
por Hans K. LaRondelle, profesor del Seminario de Teología de
la Universidad Andrews. La comprensión que Were tenía sobre
el los conceptos de “norte” y “Armagedón” se convertirían
posteriormente en la comprensión adventista básica del asunto.
Esta tendencia ayudó a restaurar el foco cristocéntrico de la
escatología adventista, previamente expuesto por James White y
Ellen G. White.
73
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
Para impulsar el nuevo énfasis cristocéntrico fue también
importante la exposición de W. E. Read acerca de "El Gran
Conflicto" en la Conferencia Bíblica de 19521, basada en una
interpretación consistente de la Biblia y los escritos de Elena G.
White2.
Otra contribución importante del período 1950-1970 en
el estudio de escatología adventista fue la publicación del
Comentario Bíblico Adventista. Su interpretación del
Armagedón sigue de cerca las ideas de Elena G. de White y
Louis Were, aunque en algunas ocasiones, como en el caso de
la interpretación de los 144.000 (Rev. 7: 1-8; 14: 1-5), considera
más de una posición como aceptable. Mientras que algunos
estudiosos consideran que esa era la mejor manera de evitar
conclusiones y controversias dogmáticas, otros consideraron
que fue el primer paso hacia una lectura más pluralista de las
profecías bíblicas3.
A finales de la década de 1960, las tensiones
escatológicas adventistas se produjeron dentro del marco
1
La Conferencia Bíblica de 1952 fue celebrada en la Iglesia de Sligo,
en Takoma Park, Maryland desde septiembre 1 hasta 13, 1952. Asistieron un
promedio de 450 personas durante las presentaciones, siendo la segunda
mayor Conferencia Bíblica celebrada por los adventistas durante el siglo XX,
y la más importante de su tipo después de la Conferencia Bíblica de 1919.
Según el entonces presidente de la Asociación General, W.H. Branson, estas
reuniones fueron consideradas como "una de las reuniones más importantes
de nuestra historia”.«1952 Bible Conference (Adventist)», Wikipedia, the Free
Encyclopedia, 6 de enero de 2015,
http://en.wikipedia.org/w/index.php?title=1952_Bible_Conference_(Advent
ist)&oldid=641186471.
2
Timm, «Escatologia Adventista Do Setimo Dia 1844-2004». 280
Ibid., 281.
3
74
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
hermenéutico historicista. Pero ya veremos que a principios de
la década 1970 una nueva generación de revisionistas
adventistas desafió este marco explícitamente, tratando de
reemplazarlo con otras alternativas hermenéuticas. Una nueva
fase era así introducida en la historia de la escatología
adventista
Cambios Inevitables en la Hermenéutica
¿Era inevitable que se produzcan cambios en la
interpretación profética? Sí. En primer lugar, existen
precedentes en abundancia de que tal desarrollo podía
acontecer.
Además, los puntos de vista de Smith, que se habían
convertido en norma para la iglesia, siguieron un razonamiento
particular. Al concluir las series proféticas, como por ejemplo en
los versículos finales de Daniel 11, los acontecimientos
históricos hacían evidente que el camino hermenéutico era el
errado. Tal situación provocó que la gente pensante intentara
laboriosamente desandar algunos pasos para descubrir donde
habían hecho un giro equivocado1. Era imperioso probar las
hipótesis e incluso mismo el método de interpretación.
Pero cuando se enfrenta un dilema siempre hay personas
a las que les resulta demasiado exigente caminar penosamente
hacia atrás a lo largo de la carretera del razonamiento. A cambio,
la objetividad dolorosa se calma por la reafirmación de la
tradición, un rasgo a menudo condenado por la denominación,
pero persistente en la naturaleza humana. En lo más íntimo del
alma todo el mundo debe enfrentarse alguna vez a la autoridad
1
Hook, “Louis Were”, 68.
75
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
de la dirigencia, a la subjetividad, y al status quo. Algunos optan
por anular su conciencia. Otros reorientan sus energías en
asuntos menos candentes. Algunos agitan los prejuicios .Por
otro lado el reformador, caracterizado por una apertura al
Espíritu y por la voluntad de volver sobre los pasos y recorrer un
camino diferente, se ve generalmente confinado a una minoría
de personas muy agudas en lo mental y sensibles en lo moral. En
un momento del debate teológico, es inevitable que algunos
reaccionan mediante la adopción de puntos de vista que son
más contextuales, coherentes y objetivos. Pagan el precio de la
profecía, el costo de mantenerse fieles a la interpretación
correcta de la Palabra de Dios. Pueden ser combatidos en su
tiempo pero sin duda son vindicados en el futuro por las
generaciones sucesivas1.
Si Were no hubiera agitado vientos de cambio, otros
finalmente hubieran precipitado un fenómeno similar debido a
que un escenario escatológico especulativo era muy evidente. Las
permanentes llamadas de alerta profética llevaron a Were a
analizar el escenario ya por la década del 30. A excepción de
unos pocos, hubo relativamente poco desgaste entre los
ministros o miembros de la iglesia, como resultado de las
opiniones de Were. Esto fue, sin duda, en gran parte debido al
1
H. H. Meyers, Colin D. Standish, y Russell R. Standish, The
Evangelical Dilemma (Hartland Publications, 1996).,145. En una carta dirigida
al president de la División Australasiana, fechada en setiembre de 1978, el
pastor W. Scragg, uno de los que apoyó la posición de Were durante la
controversia de 1942, manifestaba que uno de los factores que explicaba el
éxito en la ganancia de almas en el Pacífico Sur era el despojarse de las
antiguas enseñanzas de Uriah Smith sobre temas como el Armagedón y el
Rey del Norte.
76
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
apoyo creciente de los líderes en América y su ortodoxia en las
posiciones adventistas fundamentales como el día de reposo, el
Santuario y el don de profecía.
Una Hermenéutica Consistente
Las profecías por cumplirse no pueden separarse de las
que se están cumpliendo hoy1. El riesgo de los que introducen
explicaciones foráneas al texto bíblico es que fallarán en ver los
acontecimientos que sí están predichos en la revelación
profética. Esperando ver lo que imaginan se perderán de ver lo
que ya ha sido revelado.
En este sentido se aprecia que la base de la
interpretación de Smith se cimenta en la territorialidad literal, lo
cual es inapropiado ya que las profecías anticipan el conflicto
entre el bien y el mal implicando al Israel de Dios, el Israel
espiritual, su iglesia2. La interpretación literal del Armagedón en
Palestina era inviable aún desde el punto de vista militar, ya que
el espacio territorial sería insuficiente, y esta idea es contraria al
sentido común3. Por el contrario, los que sí capturan el
verdadero principio de Daniel 11 son capaces de seguir la
historia presente del rey del norte y entender el significado de
los eventos y destino de este poder. La adivinación no es
necesaria, porque el correcto entendimiento es posible ya que
los adecuados principios provistos por la Biblia abarcan el
pasado, el presente y el futuro. Después de todo, la misma Biblia
nos advierte contra ser “agoreros o adivinos” (Levítico 19:26).
1
Cottrell, «Pioneers Views on Daniel Eleven ,8
Ibid., 10
3
Louis F. Were, Europe And Armaggedon (Melbourne, Australia,
N.D.).80.
2
77
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
Ninguna Verdad Se Basa En Un Solo Texto
En su infinita sabiduría el Señor ha repetido varias veces
las verdades de la Biblia de manera que podamos, comparando
un pasaje con otro, ser guiados en nuestro entendimiento de las
Escrituras. Ninguna verdad se basa en un solo texto. Esta es una
de las principales reglas de interpretación. Dios no nos deja
librados a conjeturar acerca del significado de su Palabra y nos
advierte contra dar por sentado lo que carezca de una sólida
evidencia del “está escrito”1.
Louis Were enfrentó varias falsas aplicaciones de la
profecía, alguna de ellas realmente fantasiosas, como que la
entrada del rey del norte en la tierra gloriosa significaba la
irrupción del papado en la iglesia adventista por medio de falsas
enseñanzas2. La arbitrariedad de postulaciones semejantes no
merece mayores explicaciones.
Pero Smith era consciente de la hermenéutica adecuada,
aunque a veces no la aplicara correctamente. Comentando
Apoc. 9:11 dijo que “los dos lenguajes introducidos hacen
evidente que el carácter antes que el nombre de ese poder, es lo
que se quiere representar”. El mismo argumento debe servir
para Armagedón!3
La Triple Aplicación De La Profecía: Literal-Espiritual-Literal4.
1
Were, The King Of The North: Not In The SDA Church.
Ibid., 5.
3
Uriah Smith, Daniel And Revelation (Abrams WI: Lighthouse
Publishing, 1998).,479.
4
Were, “What is Armaggeddon”, 61-71.
2
78
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
El mensaje del tercer ángel toma las cuestiones del
antiguo pacto de su literal y típico ámbito original y revela en un
sentido antitípico que el cumplimiento de las cosas de Israel
debe ser aplicado en un sentido mundial y espiritual. En esto no
solamente encontramos la completa verdad de Dios sino además
la salvaguarda contra los errores de los últimos días respecto de
los conceptos de Israel, tierra de Israel y Armagedón.
Las Guerras Literales Del AT Y El Conflicto Espiritual
Louis Were explica su teología del gran conflicto
argumentando que algunas grandes guerras son predichas en la
Biblia y el espíritu de profecía, pero no se deben aplicar las
profecías referidas a un conflicto espiritual contra la iglesia
como enseñando una guerra literal entre naciones. El conflicto
espiritual está situado en un marco palestino a causa de que la
iglesia, el Israel espiritual, ha tomado el lugar del Israel nacional,
y por lo tanto los enemigos literales de aquel Israel son ahora
símbolos de los enemigos espirituales de este Israel1.
Mucha confusión sería evitada en el pueblo de Dios si se
pudiera discernir la diferencia entre las guerras literales,
brevemente mencionadas en varias profecías, y el conflicto
espiritual que es descrito largamente en toda la Biblia. Las
reyertas militares no están desconectadas del conflicto espiritual.
Desde la primera promesa de la Biblia se menciona que
el Señor estaría junto al hombre en el conflicto contra el mal.
En la Palabra de Dios, a través de los siglos se puede trazar el
desarrollo de esa controversia. Allí el cristiano no es presentado
1
Were, The King of the North: Not in the SDA Church.,5.
79
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
como quien está llamado a una “nursery”, sino a un campo de
batalla.
La palabra bíblica guerra o batalla describe la controversia
entre Cristo y Satanás desde que este ángel fue expulsado del
cielo hasta que el conflicto termine al fin del milenio. La Biblia
fue escrita para que el hijo de Dios sea sabio en este conflicto
espiritual, y encuentre fortaleza al pelear la buena batalla de la
fe1. Los vaivenes políticos y militares de la humanidad solo
tienen peso profético en relación con el pueblo de Dios y el gran
conflicto. Este conflicto es tan real como cualquier guerra entre
naciones.
El mal avanza en proporción a la poca visión espiritual
que se tenga al interpretar las metáforas de guerra en el
Apocalipsis. El enemigo procura debilitar la iglesia al diseminar
falsas interpretaciones que no informen al cristiano de su propio
papel en este conflicto, y de qué lado se encuentra en esta
lucha2.
Si Armagedón fuera solamente un conflicto militar
futuro en Palestina, no tiene valor espiritual presente ni futuro
para el creyente, ni afecta su experiencia cristiana. Pero siendo la
conclusión del gran conflicto sí tiene un mensaje muy definido
para los que ahora están involucrados en esa guerra. Las
profecías concernientes a eventos futuros del gran conflicto ya
tienen una bendición espiritual para el presente.
Los principios básicos de cada lado del conflicto son los
mismos en cada una de las etapas del mismo, por lo tanto lo que
pasó antes sirve para entender lo que está pasando ahora y en el
futuro. La mención de guerras literales en la Biblia es solo
1
2
Ibid,83.
Ibid., 84
80
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
incidental, porque ella es una revelación acerca del conflicto
espiritual1.
Siendo que Israel está involucrado en este drama, lo que
le pasará al pueblo de Dios en los últimos días tiene que ver con
el Israel de Dios, la iglesia, y no la nación judía literal que habita
en Palestina2.
Puesto que desde Apoc. 12:7 se viene hablando de la
gran controversia entre Cristo y Satanás que comenzó en el
cielo, y se desarrolla el tema hasta la consumación de la guerra
luego del milenio (20:8,9), sería un giro inapropiado pasar a
hablar de la guerra militar entre dos naciones reales en el medio
de esta sección3.
Entonces cabe preguntarse sobre qué bases los
expositores antiguos interpretan el Éufrates como Turquía en
Apoc. 16:12. No se encuentran mayores esfuerzos en probar
semejante posición, sino que “saltan” hacia la conclusión sin
sopesar la evidencia contraria4.
El método que emplea el enemigo para esconder la
verdad es ocultándola debajo de interpretaciones contrarias5.
Cualquier enseñanza que declara que el Armagedón es
una batalla entre naciones que ocurre antes de la venida de
Cristo contradice la enseñanza de la Biblia y el espíritu de
1
Ibid., 85
Ibid., 86.
3
Ibid., 87.
4
Ibid., 142.
5
Ibid., 144.
2
81
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
profecía1. Nunca se apoya la idea que es un conflicto a ser
desarrollado en Palestina.
En resumen, las metáforas de guerra de la batalla de
Armagedón deben ser entendidas simbólicamente en relación a
la batalla entre el bien y el mal, y no literalmente en relación a
asuntos militares2. El espíritu de profecía en armonía con la
Biblia hace silencio acerca de acerca de una concentración de
fuerzas militares en Palestina para Armagedón.
Un Conflicto Espiritual Enfocado En Las Profecías
Las fuerzas espirituales, detrás de escena, van reuniendo
tropas para la crisis final sobre el sábado y la lealtad al gobierno
de Dios3. Es decir que hacia el final del tiempo se da el mismo
fenómeno que se ve en las guerras de la Biblia. El enemigo de
turno puede cambiar su fachada, pero siempre es el mismo. El
gran conflicto se libra entre Dios, Satanás, y los seres humanos
que controle cada uno.
El marco palestino de Daniel 11 es interpretado en
Apoc. 11 como mundial en el contexto de la iglesia. La
interpretación literal es inviable, pero la espiritual contiene un
mensaje acerca del amor de Dios hacia su iglesia.
La ventaja de la interpretación cristológico-eclesiológica
de la profecía es que no solo alumbra el futuro sino que alienta
al pueblo de Dios, con mensajes acerca del cuidado, la
providencia y el poder que Dios tiene para guiarlo hasta el final.
1
Were, The Spirit Of Prophecy And Armageddon.
Ibid., 4.
3
Louis F. Were, Preparaing For The Close Of Probation (Melbourne,
Australia, s. f.). 12
2
82
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
La Magnitud del Conflicto Final
Uno de los rasgos destacados de las profecías de los
últimos días es la magnitud de los hechos en ellas descritos. No
afectan solo un lugar, sino todos a la vez1. El enemigo busca
minimizar la magnitud del advenimiento de Cristo literalizando
el marco simbólico de Apoc. 16:12 al 16. Pero solo puede
restringir el conflicto final a un solo lugar quien no conoce lo
que se ha revelado en relación a esto.
Cuando la iglesia volvió a estudiar El Gran Conflicto
como debía, encontró la causa hermenéutica de sus errores y
pudo retomar el camino.
Razones Contra Un Armagedón Militar
Se ha visto que el espíritu de profecía, en armonía con la
Biblia, habla de guerras en general pero guardia silencio en
relación a un Armagedón militar en Palestina2. Armagedón en
verdad es la destrucción de todos los que hacen guerra contra
Dios, su ley y su iglesia.
La salida de la iglesia desde Babilonia y su congregación
en la tierra de Israel es espiritual. Consecuentemente los
enemigos que el pueblo de Dios tuvo antes, ahora deben ser
entendidos como los enemigos espirituales de la iglesia, y los
pasajes que presentan semejanzas de guerra son retratos de los
peligros y triunfos de la iglesia. Esa es la razón por la cual el
Revelador, al describir el conflicto venidero, habla del lugar
1
Were, Europe And Armaggedon.82.
Were, Armageddon, The Time Of Spiritual Israel´S Deliverance. ,2
2
83
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
simbólico donde los enemigos de Israel eran ejecutados. Esta
profecía contiene un mensaje que no puede ser entendido por
otros. Así como la iglesia se congrega espiritualmente en la tierra
de Israel, así son reclutadas espiritualmente las naciones que
intentarán un ataque espiritual contra el pueblo de Dios1.
Es incongruente interpretar el Éufrates como simbólico y
Meguido como literal cuando ambos están unidos en la profecía.
Lo más obvio y lógico es entenderlos a ambos simbólicamente2.
El trasfondo histórico del término debe ser estudiado de
modo que se entienda la referencia antitípica de Meguido en
Apoc. 16:16. Todos los lugares proféticos, nombres propios, y
designaciones de Apocalipsis son empleados simbólicamente y
en conexión con Cristo y su iglesia o los enemigos de ellos3.
Así como con las siete iglesias, Meguido es mencionado
en relación con el significado de su nombre y la historia
vinculada a ese lugar: un sitio de conflicto entre Israel y las
fuerzas del mal.
Armagedón es mencionado en Apocalipsis a causa de su
importancia para la iglesia. Las naciones y batallas específicas del
pasado son mencionadas en la Biblia solo en relación con el
conflicto presente y futuro del pueblo de Dios.
El Armagedón, entendido correctamente, se enmarca en
la esfera religiosa, aunque el final del conflicto entre el bien y el
mal sea retratado como una escena de guerra. La guerra
1
Ibid., 3.
Ibid., 8.
3
Ibid., 9.
2
84
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
involucra la adoración a Dios en contraposición a la adoración
de la bestia1.
La Continuidad Del AT En El NT, Importante Clave
Hermenéutica
Es imposible entender el mensaje del tercer ángel sin
aplicar el principio de tipo-antitipo, la aplicación espiritual que
el NT hace de las cosas literales del AT. El literalismo
resquebraja la continuidad intrínseca de ambos testamentos y
priva a la escatología de todo su fundamento previo.
La Biblia es una unidad porque el Espíritu Santo inspiró
y supervisó su escritura, y por lo tanto cada parte debe ser leída
en relación con las demás. Lo que no cuadre con esto resulta en
una interpretación privada2, es decir, una interpretación no
autorizada por la inspiración.
Luego del rechazo de la nación hebrea como pueblo de
Dios, y el llamado a que la iglesia sea el Israel espiritual, todas las
promesas y profecías del Israel antiguo pasan a ser heredadas por
la iglesia. Esto complica a algunos sinceros buscadores de la
verdad, en particular en lo tocante a la última parte de Daniel
11. Algunos han supuesto que los eventos militares literales
cercanos a Jerusalén que son descriptos en la primera parte de
Daniel 11 son prueba de que al final del capítulo también se
habla de algo similar. Evidentemente el problema de la
transición de lo geográfico y local a lo espiritual y universal es el
nudo de esa dificultad.
1
Ibid., 11.
Louis F. Were, 144000 Sealed! ¿When? ¿Why?”, (Melbourne,
Australia, N.D.).,5.
2
85
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
Cuando Israel era la nación escogida, y Palestina era su
hogar y el sitio donde eran concedidas las bendiciones de Dios,
entonces todas las profecías debían ser entendidas literalmente:
Israel era una nación literal, Jerusalén una ciudad literal, y
asimismo el templo, el santuario y los sacrificios realizados en su
medio. La tierra de Israel era un país literal con enemigos
literales que le atacaban con ejércitos reales, y el pueblo hebreo
se defendía de la misma manera. Pero el NT es explícito en el
sentido que esas mismas cosas son ahora aplicadas
espiritualmente a la iglesia, aunque el lenguaje sea precisamente
el mismo. Dios habla en el mismo lenguaje, pero la aplicación es
diferente. No hay cambios en la terminología empleada, sino
una simbología diferente de las mismas palabras. Cuando no se
captura este hecho tan elemental se produce una lamentable
falta de discernimiento acerca de cómo el NT interpreta el AT,
confundiendo el sentido de las metáforas1. De esta manera,
perdiendo la línea de la profecía, el resultado de la
interpretación causa confusión y frustración más que ánimo y
certeza.
Si tomamos en cuenta el principio antedicho, cada
profecía del AT que encuentra su cumplimiento en la era
cristiana y en particular en el fin del tiempo hallan su aplicación
espiritual y mundial solo en relación al pueblo de Dios2.
Se aprecia en algunos casos del AT que Dios alivió a su
pueblo permitiendo que una fuerza maligna se opusiera a otra
similar que lo estaba afligiendo3. En el curso de la historia Dios
mide la prueba y junto con ella envía la salida para que su
1
Ibid., 20.
Were, God Speaks and Israel Triumphs.19.
3
Were, 144000 Sealed! ¿When? ¿Why?”,. 15
2
86
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
pueblo pueda soportar. Las historias del AT aplicadas al Nuevo
alientan a la iglesia de cara al conflicto final.
La Transición AT-NT: Clave Hermenéutica Promovida
Por Were
Se ha visto que debido a que desaprobaron sus
posiciones Were fue considerado un hereje cuando en
realidad había utilizado la misma hermenéutica de los
pioneros y la había aplicado al tema de Armagedón y el
rey del norte1.
Una de las mayores contribuciones
hermenéuticas de Were quizá haya sido explicar por qué
al pasar a la era cristiana, hay una transición automática
de la Babilonia literal espiritual; de la Jerusalén literal a
la espiritual; de las tierras literales de Israel y Babilonia a
sus antitipos espirituales. Es decir que lo relativo a
Jerusalén ahora se refiere a la iglesia, y el rey del norte y
el Armagedón tienen connotaciones espirituales.
Además Were creía que la puesta en ejecución de las
leyes dominicales cumpliría la profecía de Daniel 11:45.
Enseñó que el “monte glorioso y santo” se refiere a la
iglesia de Dios2. Argumentó que “Edom, Moab y la
mayoría de los hijos de Amón” son almas que en el
fuerte clamor salen de entre las filas de los enemigos de
Dios y serán salvadas, almas que se pondrán del lado del
1
Mansell, Los Adventistas y el Armagedón.. 69.
Ibid., 72.
2
87
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
pueblo de Dios y así escaparán de la mano del papado1.
Enseñó que el comunismo era una de las barreras más
grandes entre el papado y su objetivo. Esta barrera la
consideró como un obstáculo serio para la adquisición
del control del mundo por parte de Roma. Las Escrituras
declaran que el papado vencería esa barrera tremenda, y
que “no escapará el país de Egipto”; los países que han
adoptado el comunismo no escaparán del control papal2.
Basado en los escritos de Elena de White y en
Apocalipsis 13:3 declaró que la profecía señalaba a
Roma, Europa y el apoyo de América del Norte. En
consecuencia cualquier guerra militar que hubiera de
pelearse entre las diversas naciones y aun si alguna lucha
tuviera lugar en Palestina, incluso en el valle de Josafat o
en Meguido, esas guerras no tendrían relación directa
con el “Armagedón”3.
En otras palabras, Were encontró las razones
bíblicas profundas que avalaban las declaraciones del
Gran Conflicto. Pareciera como que fue el primero en
captar los principios hermenéuticos del espíritu de
profecía y aplicarlos, a manera de ejemplo, al estudio de
Daniel 11 y el Armagedón.
Comparar Lo Espiritual Con Lo Espiritual
Para establecer la base sobre la cual atacaría el futurismo
literalista L. Were escribió El Propósito Moral de la Profecía, donde
1
Ibid., 73.
Were, Europe And Armaggedon., 74.
3
Ibid, 76.
2
88
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
resume sus principios hermenéutico-escatológicos
fundamentales1, que fueron luego ampliados y ejemplificados en
sus demás publicaciones. Algunos de sus argumentos
detallamos a continuación.
Vemos entonces que las profecías relacionadas con
Armagedón fueron escritas para alentar a la iglesia, puesto que
allí se traerá la liberación de la misma y la destrucción de sus
enemigos2.
Al estudiar las profecías debemos comparar lo espiritual
con lo espiritual. Pero la iglesia en ocasiones resultó ser
influenciada por aquellos que no saben que es estar como Juan
“en el espíritu en el día del Señor”3.
Dado que la iglesia no se encuentra solo en Palestina
sino en todo el mundo, es evidente que el conflicto no debe
abarcar solo ese lugar sino todo el planeta. Las guerras
aumentarán, pero ellas no tienen una relación específica con
Armagedón.
Las profecías solo pueden ser entendidas bajo la luz que
brilla de la cruz del Calvario. Correctamente entendida, toda la
Biblia es una revelación de Jesucristo como Salvador de los que
ponen su confianza en El como Destructor del mal. Por lo tanto,
bien comprendido, Armagedón ha de revelar a Jesucristo como
Libertador de su pueblo y Destructor de sus enemigos, no a
Rusia, Inglaterra, América, las naciones orientales, etc.
1
Louis F. Were, El Propósito Moral De La Profecía (Libertador San
Martín, Entre Ríos, N.D.).
2
Were, Armageddon, The Time of Spiritual Israel´s Deliverance.12.
3
Louis F. Were, Armageddon, The Battle Of The Great Day Of God
Almighty, 1977.,4.
89
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
Apocalipsis es un mosaico de citas del AT y las
expresiones o metáforas del Revelador pueden ser entendidas
solo cuando se vuelve a su fuente veterotestamentaria1. A través
de todo el AT señalan al gran día del Señor, cuando la gracia
divina cesará y la ira contra los impíos se derramará en todo el
mundo.
Armagedón es la guerra especial que el cielo luchará
contra las multitudes irregeneradas del mundo, unidas en su
lucha contra El por rehusar obedecer su ley y perseguir a su
pueblo2.
En esto se nota la costumbre de los antiguos profetas de
señalar a una calamidad o evento local como una miniatura de
algo de carácter mundial en tiempos del Mesías. Por cierto la
plenitud del evangelio fue anticipada en el AT. Jesús mismo usó
este principio cuando habló de la destrucción de Jerusalén como
anticipo de la destrucción de un mundo que, al igual que la
nación hebrea, rechazaría el mensaje final de Dios acerca del
plan de salvación. Considerando esto, no debiera sorprendernos
si otros lugares son simbólicamente mencionados en relación a
la futura destrucción de los impíos3.
También es un principio consistentemente empleado
por los profetas bíblicos hablar de eventos mundiales como si
sucedieran en Palestina. La completa historia de la salvación
emplea una fraseología similar. Todos los eventos locales y
literales de la economía mosaica anticiparon eventos mundiales
vinculados a la iglesia cristiana. Del rechazo de este principio
1
Ibid., 7.
Ibid., 8.
3
Ibid., 9.
2
90
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
surgen los errores de la iglesia romana1. El futurismo pertenece
al mismo sistema que entiende lo espiritual como literal2.
Con la falsa enseñanza del Armagedón palestino el
enemigo ciega a las personas al hecho de que ahora debemos
estar siendo reunidos con Cristo en su lucha contra el mal3.
Es una mala interpretación de las profecías pensar que
los paganos de la profecía son las naciones orientales. Nada
apoya esta teoría, y esta idea no debe utilizarse para fomentar la
opinión de que las naciones orientales invadirán Palestina en
ocasión de Armagedón4.
Las interpretaciones mundanas de una supuesta guerra
en la lejana Palestina pueden entretener a las personas pero no
serán el importante mensaje de advertencia y salvación que
necesitan. Todos debemos hacer nuestra decisión en esta batalla,
y al hacerla se determinará de qué lado estaremos en la matanza
mundial de Armagedón5.
Principios Hermenéuticos de Were Más Influyentes
El legado de Were fue perdurable. En su tesis doctoral G.
Quispe concuerda en que los tres principios hermenéuticos que
1
Ibid., 11.
Ibid., 12.
3
Ibid., 24. Un eco posterior de esta idea se encuentra en Kenneth
Brown, «“Gathering” for Armageddon», Ministry Magazine, accedido 1 de
abril de 2015,
https://www.ministrymagazine.org/https://www.ministrymagazine.org/archi
ve/1974/08/gathering-for-armageddon.
4
Were, What Is Armageddon. ,10
5
Ibid., 33
2
91
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
más influenciaron la interpretación adventista subsiguiente
fueron los así denominados:
1. Crisotológico: “La interpretación debe revelar a
Cristo y hacer de El el centro”
2. Triple aplicación literal-espiritual-literal
enfocadas en la experiencia de Israel y su
continuidad, la Iglesia.
3. Las profecías literales y geográficas de Israel en el
pasado se repiten a mayor escala a nivel mundial
y espiritual1.
Hacia finales de 1940 y principios de 1950, cuando los
escritos de Were fueron más difundidos entre los eruditos de
Norte América, comenzaron a aparecer varios importantes
comentarios del Apocalipsis2
Textos Claves en la Hermenéutica de Were
Were no tuvo que retroceder hasta Daniel 2 para
encontrar “la punta del ovillo”. Desde Daniel 11 y Apocalipsis
16, observando la interacción de la historia política y religiosa
contemporánea, abogó por una reinterpretación del escenario
escatológico. Aceptó gran parte de los argumentos tradicionales
de la iglesia, pero reaccionó ante los que tendían a la
especulación derivada de la literalidad y una forma de
futurismo.
1
Quispe, Zubieta, And Cárdenas, The Apocalypse In Seventh-Day
Adventist Interpretation.,137
2
Ibid.138
92
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
El Rey del Norte según Were
Were concentra de su discusión en las actividades
del rey del norte, en Jerusalén (Dan 11: 40-12). Aplica
los reyes del norte y el sur geográficamente a las
divisiones del imperio griego (11: 5-13) 0.1 Él sostiene
que "Turquía" no puede ser el rey del norte de Daniel
11: 36-45. Se aplica la figura de" rey del norte", en primer
lugar, a los seléucidas, y luego a la Roma pagana y el
Papado. Se refiere, además, al rey del norte como el
"Anticristo" de 2 Tesalonicenses 2: 3-10, y aduce que ese
poder funcionó basado en los principios de la soberbia
de Lucifer (Isaías 14: 12-14) Subraya que la profecía de
Daniel 11: 40-45 describe las experiencias del Israel
espiritual, no se refiere a los acontecimientos en
Palestina1. Como vimos, el rey del sur es el poder ateo2 y,
recordamos, asegura que los que escapan de la mano del
rey del norte, “Edom, Moab, y la mayoría de los hijos de
Amón”, representan a los que se pasan al remanente al
con el ultimo clamor del mensaje3.
La mayoría de los historicistas en la actualidad
sostienen que Daniel 11:40-45 tiene cumplimiento
futuro y que el Armagedón representa una contienda
espiritual y mundial, no geográfica ni literal4.
1
Parasian Silitonga, “Continuity and Change in World Rulers: A
Comparative InterStudy and Evaluation of Seventh Day Adventist
Interpretations of Daniel 11.”65.
2
Ibid., 259.
3
Ibid., 262.
4
Ibid., 268. Hector Urrutia, Profecías Apocalípticas De Daniel
(Santiago, Chile: Wandersleben EIRL, 2012).
93
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
Aunque después de la cruz debemos abandonar
la geografía literal y local para entender a los poderes
mundiales, es necesario entender la geografía bíblica
para entender su lenguaje1.
La Historia Vindica La Hermenéutica Correcta
La interpretación escritural presentada por Were acerca
del comunismo cuando éste se hallaba en la cresta de su poder,
publicada en sus libros “The King of The North at Jerusalem” y
“Europe and Armageddon”, fueron justificadas rápidamente por los
sucesos acaecidos años después2. El enfoque sistemático de
Were, autorizado por la inspiración, fue al tiempo confirmado
por los desarrollos históricos subsiguientes.
En las primeras diez páginas del libro Preparaing For The
Close Of Probation se ve un buen ejemplo de cómo interpretó
Were los sucesos de sus días en el marco de la profecía. Es cierto
que el suponía que el ataque del papado hacia el comunismo era
el impulso final de Roma hacia la dominación mundial y la
persecución del pueblo de Dios3. Pero aunque esperaba que los
eventos fueran más rápidos de lo que luego fueron, estaba en la
línea interpretativa adecuada.
Es inevitable que el intérprete se deje llevar por sus
emociones cuando ve que la profecía se está cumpliendo delante
de sus propios ojos. En ese entusiasmo busca nuevos elementos
que afirmen sus convicciones. Sin embargo la virtud
1
Urrutia, Profecías Apocalípticas De Daniel. ,381
Were, Preparaing For The Close Of Probation.,5.
3
Ibid., 11
2
94
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
fundamental en la escatología no es el entusiasmo sino la
cautela.
El problema de Smith, más que su entusiasmo por lo
que consideraba el cumplimiento de las profecías, fue muy
diferente, fue estructural. Él modeló parte de su interpretación
en base a los sucesos de su tiempo. Su estructura hermenéutica,
viciada por ideas ajenas al historicismo, lo llevó a mirar más a la
actualidad de sus días que al propio testimonio inspirado.
Algunos, de hecho, sospechan que conocía poco del
Conflicto de los Siglos, porque de haberlo estudiado con
detenimiento se hubiera percatado de los errores que estaba
cometiendo1.
Efecto “Boomerang” Por El Énfasis Evangélico En Las Profecías
Las malas interpretaciones de la profecía se dan cuando
son entendidas independientemente de la obra de salvación
obrada por Jesús2. Frecuentemente las profecías son vistas como
meros ítems de interés, como la habilidad divina de leer eventos
futuros, o estimulantes mentales de la curiosidad intelectual.
Estas falsas interpretaciones dividen la línea entre el evangelio y
las profecías, y fallan en discernir el evangelio en las profecías3.
Un estudio adecuado de las profecías ha de revelar el
amor y la bondad de la Deidad, y revelará el evangelio tanto
como las demás porciones de la Biblia4. Este énfasis evangélico
en las profecías, no obstante, inició una tendencia que se fue
profundizando hacia lo que algunos ven como una
1
Carmelo Martines, Uriah Smith y el Conflicto de los Siglos,
diálogo, 29 de enero de 2015.
2
Were, Europe And Armaggedon.139.
3
Ibid.,141.
4
Ibid.,87
95
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
espiritualización peligrosa de la profecía. ¿Hasta dónde la
aplicación espiritual debe ser extendida? ¿Cuál es el límite entre
cumplimiento y espiritualización? ¿Cómo se relacionan los
conceptos con los cumplimientos en el historicismo?
Falencias En La Obra De Were
Were era un orador dinámico y evangelista éxito. Su
estilo de escritura, sin embargo, tendía a ser verborrágico. Por
otra parte, al parecer, no examinó del todo algunos supuestos en
otras áreas de su teología por estar preocupado mayormente con
las opiniones de la iglesia referentes a la escatología entre las dos
guerras mundiales. Además sus modos no resultaban demasiado
suaves.
George R. Knight solía decir en sus clases que debiera
haber un undécimo mandamiento: no harás teología contra tu
prójimo. La razón es simple: cuando una persona defiende su
posición, que en realidad tienden a crear polarización teológica.
Casi inconscientemente la persona se refugia en una postura
defensiva y predispone a que otros alrededor hagan lo mismo1.
Probablemente la teología de Were haya predispuesto a
mayor polarización en el adventismo de sus días, y algo de eso se
haya trasvasado hasta nuestros días. Pero Were consideraba que
los pequeños detalles futuristas en las ideas de Smith respecto de
Daniel 11 y Armagedón representaban una grieta en el todo
teológico adventista, lo cual era peligroso desatender. El
consenso en el error suele ser más nocivo que el disenso en
busca de la verdad.
1
«The 1919 Bible Conference and Theological Polarization».
96
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
No obstante, a diferencia de otros contemporáneos que
polemizaron con los dirigentes adventistas australianos, Were
permaneció leal a la iglesia hasta su fallecimiento1.
El Puente Hermenéutico de Were
La interpretación literalista de la Biblia versus la
simbólica figuraba también en los debates sobre la cuestión del
Oriente y el Armagedón. Estaba en juego una diferencia
fundamental en la comprensión bíblica. Muchas de estas
cuestiones doctrinales se concentraban en profecías. La iglesia
misma nació del estudio de las profecías y no era de
sorprenderse que los primeros dirigentes de la iglesia proyectaran una dilatada influencia mientras sus puntos de vista
continuaban impactando a teólogos posteriores. Los estudios
proféticos, especialmente los pasajes apocalípticos de la Biblia, se
convirtieron en el sello distintivo de la integridad de la iglesia.
Como el principal estudiante de las profecías dentro del
adventismo, la influencia de Uriah Smith fue enorme y a veces
él le asignó un crédito desproporcionado a sus puntos de vista.
Cuando aparecían interpretaciones diferentes, y a veces
equivocadas, algunos feligreses se sentían abochornados y se
preguntaban si existían otros errores que todavía se ignoraban.
Surgió el temor de que nuevos puntos de vista derribarían toda
la estructura profètica como un castillo de naipes, y que la iglesia
se desmoronaría.
Un resultado significativo de estos debates fue que se
llegó a la conclusión de que a los adventistas les iba a resultar
1
Hook, «Louis Were». 68-71.
97
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
imposible alcanzar la unanimidad en estas cuestiones, aunque le
diesen gran importancia a una interpretación bíblica exacta.
Con suma cautela podemos atrevernos a afirmar que los
teólogos adventistas del siglo XIX parecían considerarse
responsables de alcanzar un conocimiento correcto de todas las
profecías. El deseo de ser teológicamente correctos, de tener un
conocimiento exacto de todos los detalles bíblicos era la fuerza
impulsora de su pensamiento. Tales convicciones, loables en sí
mismas, produjeron no obstante un ambiente legalista para el
adventismo.
Sin negar la necesidad de una comprensión exacta de las
profecías, los adventistas emergieron de estas discusiones con un
mejor aprecio de la importancia de comprender por experiencia
las enseñanzas centrales del adventismo, que giraban en tomo a
la muerte expiatoria de Cristo1.
En este sentido, Louis Were tendió un puente
hermenéutico entre la tradición profética adventista y el énfasis
en la justificación por la fe, haciendo ver que las profecías tienen
mensajes sobre cumplimientos históricos futuros en lenguajes
propios del pasado, pero de relevancia y ánimo para la vida
cotidiana del presente.
1
Schwarz, Greenleaf, y Education, Portadores de luz.,612.
98
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
CAPÍTULO III.
CONTINUIDAD Y REFINAMIENTO DE LA
HERMENÉUTICA DE WERE
Cautela Hermenéutica Ante la SGM
Comparando la primera con la segunda guerra mundial
puede decirse que hubo una reacción relativamente tranquila
por parte de los evangelistas y escritores adventistas1. Después de
la Primera Guerra Mundial continuó el compromiso adventista
con la evangelización, pero hubo un cambio en el énfasis. En
lugar del Armagedón, los evangelistas hablaban de un tiempo de
paz en el cual advertir al mundo del pronto regreso de Jesús2. En
contraste con el enfoque casi predictivo de A.G. Daniells en
ocasión de la Primera Guerra Mundial, el presidente de la
Asociación General, J.L. McElhany advirtió a sus lectores acerca
de ser cautos a la hora de anticipar eventos. “Nuestras palabras
debieran ser pocas, elegidas, y bien ponderadas” exhortó3.
1
Esto se debió a que “en la recién concluida la Primera Guerra
Mundial, los adventistas se habían decepcionado al ver que Turquía no
cumplía su papel apocalíptico como el "Rey del Norte" que daría paso a la
cadena de acontecimientos finales, tal como la mayoría de los expositores
adventistas habían predicho”. Ver Campbell, «The 1919 Bible Conference
and Its Significance for Seventh Day Adventist History and Theology».,216.
2
Schwarz, Greenleaf, y Education, Portadores de luz.,338.
Hans K. LaRondelle, «Minha Jornada e Minhas Descobertas em
Escatologia Apocalíptica», en O Futuro: A Visao Adventista dos Últimos
Acontecimentos. Arti- gos teológicos apresentados no V Simpòsio Bíblico-Teológico SulAmericano em homenagem a Hans K. LaRondclle (Engenheiro Coelho, SP:
Unaspress, 2004). 279. En la tensión entre el enfoque sensacionalista de las
revistas evangelísticas y la cautela de la Review and Herald, ésta posición
resultó ser la más válida. La guerra mundial había llevado a la iglesia a un
3
99
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
El ideal de Smith, después de la Primera Guerra
Mundial, desapareció repentinamente. Sus ideas, no obstante, se
siguieron defendiendo hasta, por lo menos, 1959 cuando el
brasileño A.S. Mello, publicó su libro “A Verdade Sobre as
Profecías do Apocalipse” y brotaron una vez más en el año
20041 y 20112. No obstante desde 1950 comenzó a notarse la
restauración de la comprensión de Jaime White sobre el
Armagedón como una batalla cósmica entre Satanás y Dios, y
entre la Tierra y el Cielo. La semilla plantada por Were fue muy
bien cultivada por Hans K. LaRondelle.
Vaivenes En La Interpretación Del Armagedón
Hans K. Larondelle declara que la historia de las
interpretaciones adventistas sobre Armagedón revela una
sucesión de posiciones diferentes en cuanto a la interpretación
de la profecía no cumplida. Debe entenderse de que manera las
determinado curso de presentación e interpretación profética arriesgado .
Sólo el tiempo dirá cuánto se ha aprendido de esta experiencia. Ver Gary
Land, «“The Perils of Prophecying: Seventh-day Adventists Interpret World
War One,”» Adventist Heritage, 1974.,56.
1
“Cuando Dios habló del fin del rey del norte, no habló nada de la
devastación total como con Babilonia o Tiro. Simplemente dijo que cuando
el rey del norte (el Imperio Otomano) llegara a su fin, no le ayudaría. Es
sorprendente la precisión con esto se ha cumplido según lo registrado por
Uriah Smith en sus comentarios sobre el Imperio Otomano en el capítulo 9
de Reflexiones sobre el Apocalipsis. Uriah Smith no vincula Dan. 11:45 con el
Rev. 9, pero la conexión es obvia”. Roderick L. Yip, Daniel’s Difficulties
Resolved - Revelation’s Secrets Revealed (TEACH Services, Inc., 2004).,32.
2
Tim Roosenberg, Islam & Christianity In Prophecy (Review and
Herald Pub Assoc, 2011).
100
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
mismas surgieron y se popularizaron de manera de no repetir el
error de tomar los acontecimientos presentes como norma
directriz de la interpretación profética1.
Las cuatro fases que LaRondelle detalla son las
siguientes:
1. Período de los pioneros: entre 1844 y 1862, armonía
básica sobre Armagedón y el rey del norte. Armagedón
era entendido como el conflicto final entre Cristo y
Satanás, y hasta 1871 el rey del norte era identificado
con el papado.
2. Período de Smith: Desde 1871, en el ocaso político del
papa, U. Smith introduce en el adventismo el punto de
vista de los premilenaristas británicos, los cuales
consideraban a la Turquía moderna como el rey del
norte. Al morir Jaime White, quien discrepaba con esta
posición, se consolida la postura de Smith y predomina
por 70 años. Además Smith consideraba que Armagedón
significaba una lucha de potencias políticas y militares
por la posesión de Tierra Santa.
3. Período de Spicer: entre 1903-1952 se considera el
Armagedón como una pugna secular entre Oriente y
Occidente por la supremacía mundial y el dominio del
petróleo.
4. Período actual: Desde 1952 se retorna a la posición
tradicional por medio de W.E.Read, quien expone
sistemáticamente el punto de vista de Elena de White,
no un estudio exegético y sistemático de la Biblia.
Encarar ese estudio profundo fue la inquietud de Louis
F. Were, quien publica varios libros en los que desnuda
1
Holbrook, Frank B., Simposio Sobre Apocalipsis-II (Colombia: Gema
Editores, 2011).,541.
101
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
las especulaciones injustificadas de sus días y mejor aún,
la causa de las mismas. Con el se inicia la tarea
inconclusa de establecer principios hermenéuticos neotestamentarios adecuados de interpretación profética
adecuados1.
La Conferencia Bíblica de 1952 consolida el cambio
La Conferencia Bíblica de 1952 marcó un cambio de
rumbo en la interpretación de la escatología adventista, por lo
menos en tres aspectos: destacó el aumento de las señales desde
los días de los pioneros, advirtió contra el avance de la alta
crítica, y descartó la interpretación política de la escatología
bíblica por no ser acorde a las Escrituras ni a la posición de los
pioneros2.
En esto se aprecia al aporte y contribución de Were al
reencauzar el rumbo hermenéutico-escatológico de su
denominación.
En esta Conferencia Bíblica, celebrada en Estados
Unidos del 1 al 13 de septiembre de 1952, algunos descontentos
con la visión tradicional tomaron la palabra, y empezaron a
presentar documentos sobre el Armagedón, el rey del Norte, y
Daniel 11. A principios de 1954 apareció un informe de sus
hallazgos. Se describieron las opiniones pertinentes de Miller,
Jaime White y Smith, optando por retornar a la posición
original y desacreditando la opinión de Smith sobre Daniel 11:
36-39. El informe dijo que, "... le pareció al Comité que estos
versículos necesitan ser estudiados a la luz de los
1
Ibid., 541-549.
Martines, El Remanente Fiel, Un Debate Contemporáneo. 104.
2
102
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
acontecimientos actuales y pueden referirse justamente a un
conflicto mayor y más extenso que un asunto local entre Egipto
[el rey del sur] y Turquía [el rey del norte]”.
Estos desarrollos sepultaron el escenario escatológico de
Smith, un escenario que contó con la Revolución Francesa, con
Egipto, Turquía y Rusia como los antagonistas principales en
una batalla literal de un Armagedón centrado en Palestina. De
ello se desprende que también fueron desacreditados los
desarrollos posteriores del escenario de Smith, promovidos por
Spicer, tales como la incorporación de las conquistas de Japón.
También el futurismo más flagrante de Anderson cayó en
desgracia. Con pocas excepciones, los principales principios de
interpretación de la Escritura adoptados por Were fueron
ampliamente aceptado en su iglesia junto con sus conclusiones
alcanzadas en relación con los conceptos de "el rey del norte",
"los reyes del Oriente", "Armagedón” y el “Éufrates”. Para su
satisfacción vivió lo suficiente como para observar la aceptación
de sus ideas en su alma máter, el colegio de Avondale, y el
extranjero1.
El Comentario Bíblico Adventista y la Merma en la Influencia
del libro “Daniel y Apocalipsis”
El cambio de enfoque y la merma en la influencia del
libro de Smith se enfatizaron con la aparición del Comentario
Bíblico Adventista, cuyo éxito estribó en los siguientes factores:
1. Fue uno de los mayores proyectos editoriales de la
Review and Herald.
1
Hook, «Louis Were»., 70.
103
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
2. Se utilizó como libro de texto en los colegios de la
denominación.
3. Fue traducido a varios idiomas
4. Con la Conferencia Bíblica de 1952 se inauguró una
nueva etapa de mayor apertura, libertad y diálogo
para el estudio de la Biblia1.
5. El notable desempeño del staff editorial, a cargo de
J.Snider, primer impulsor del proyecto, y F. D.
Nichol2.
El Peregrinaje Teológico De Hans Larondelle Y La Influencia De Louis Were
En Su Pensamiento.
Pero la tarea de Were fue completada por uno de sus discípulos: Hans
K. LaRondelle. El mismo da testimonio del impacto que las enseñanzas de
Were tuvieron en su pensamiento teológico.
“Habiendo sido criado como católico hasta los dieciocho años, en
Holanda, aprendí desde joven a creer en Dios y a creer en la autoridad de la
Iglesia Católica para perdonar los pecados. Cuando mi madre se casó más
adelante con un hombre protestante, me enviaron a la escuela de esa confesión
1
La Conferencia Bíblica de 1952 destacó la influencia que los
teólogos y los historiadores de la iglesia desempeñan dentro de la
denominación. Mediante la producción de recursos teológicamente sólidos,
se demostró cuánto esto puede fortalecer la confianza en el mensaje
adventista. Michael W. Campbell, «Adventist Review: Adventist Theology
Comes of Age», accedido 24 de marzo de 2015,
http://archives.adventistreview.org/article/4507/archives/issue-20111518/adventist-theology-comes-of-age.
2
Quispe, Zubieta, y Cárdenas, The Apocalypse in Seventh-Day Adventist
Interpretation.14
104
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
y allí aprendí que la Biblia es la Palabra de Dios y debe ser nuestra autoridad en
la creencia. A los diecinueve años decidí asistir a la escuela de leyes en la
Universidad de Leyden y comencé a leer la Biblia. Allí los profesores de derecho
me enseñaron a pensar por mí mismo, de manera disciplinada y académica.
Cómo no podía entender el sentido de las leyes y rituales del Antiguo
Testamento comencé a leer el clásicó “La Imitación de Cristo”, de Tomás
Kempis. Con este libro trataba de establecer una unión con Dios a través de
devociones y prácticas piadosas, lo cual fue un esfuerzo frustrado.
En este momento, un nuevo amigo me regaló para mi cumpleaños
un libro acerca de la Biblia escrito por un pastor adventista holandés. Este libro
me explicó el significado de la Biblia de una manera sencilla, y me mostró como
Cristo es el centro de todo el plan de salvación. Por la fe en Jesús, experimenté
en el pequeño sótano de mi casa un renacimiento de corazón y un verdadero
amor por Dios. Por eso decidí que mi vida pertenecía a Él y que cambiaría mis
estudios de derecho por los de teología. Aunque mi padrastro se entristeció con
esta decisión, mi madre, sin embargo, me animó a seguir donde Dios me
guiara.
Poco después de mi bautismo en 1949, a la edad de veinte años,
comencé a asistir al recién creado Seminario Adventista de Utrecht. No había
allí ningún profesor con la preparación formal en teología, como yo esperaba.
Frustrado por eso comencé a leer el libro Bible Readings For The Home Circle,
junto a algunos libros de Elena de White. Esto me satisfizo, pero eso proveía del
conocimiento especializado en teología que anhelaba. Esperaba tener una
comprensión más completa de la Biblia más tarde, cuando tuviera la
oportunidad de leer cada libro de la Biblia en su contexto, en lugar de sólo
emplear textos-prueba para sostener las doctrinas de la Iglesia y el carácter único
de su mensaje.
Mi primer descubrimiento provino de una fuente inesperada. Una
hermana de la iglesia, que trabajaba en las oficinas holandesas de La Voz de la
Esperanza, me entregó un libro que había recibido de un amigo en Australia.
105
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
Ese libro fue “The Certainty of The Third Angel Message”, publicado en 1945 por
su propio autor, Louis F. Were , quien había sido un exitoso evangelista
adventista en Australia. Su libro presentaba una revolucionaria lista de
principios bíblicos de interpretación de la Escritura que hacían de Cristo el
propósito moral de todo tipo de profecías. Con esto descubrí la inspiración
continua de las Escrituras y la unidad espiritual del Antiguo y el Nuevo
Testamento. Al reavivar el estudio de la tipología bíblica1 Were demostraba la
naturaleza cristocéntrica de las promesas escatológicas efectuadas a Israel. Esto
demostraba la consistencia de la Biblia, y me atrajo tanto espiritual como
intelectualmente. Era el "eslabón perdido" en el adventismo, y fue para mí una
iluminación que me dio un nuevo compromiso con el mensaje adventista,
exaltando a Cristo como el centro de todas las profecías y doctrinas de la Iglesia.
Were había descubierto lo que pocos adventistas habían visto: la razón
por la cual el secamiento del río Éufrates era aplicado a la Turquía moderna, y el
Armagedón a la primera o segunda guerras mundiales, lo cual era predicado
por los evangelistas adventistas, eran falsas interpretaciones proféticas. Were
descubrió la causa del fracaso hermenéutico del literalismo geográfico. Mostró
1
Este “reavivamiento tipológico” fue fundamental para la teología
adventista. De hecho se reconoce aún hoy que “para los adventistas del
séptimo día el significado de tipología no es sólo una cuestión de
investigación histórica. Ella ha demostrado ser una fuerza determinante en la
teología, el pensamiento, y a veces incluso en la práctica adventista. Desde la
primera aparición de la tipología a principios del adventismo, ha
proporcionado ayuda a la comprensión de la Escritura, pero también ha sido
la fuente de mucho malentendido. La necesidad de explorar su naturaleza,
características y aplicación ha sido una preocupación constante para el
adventismo y debe seguir siéndolo”.Erick A. Mendieta Soza, «Typology and
Adventism‟s Eschatological Identity: Friend or Foe?», AUSSJ: Andrews
University Seminary Student Journal 1, n.o 1 (1 de febrero de 2015),
https://www.andrews.edu/openjournal/index.php/aussj/article/view/11.,43
106
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
convincentemente que Uriah Smith y Elena de White aplicaban diferentes
principios interpretativos en las expresiones territoriales de las profecías bíblicas.
Llegó a la conclusión de que todas las aplicaciones del Armagedón como una
batalla escatológica literal por el santo sepulcro en Palestina, o el "oro líquido del
valle del Eurfrates" violentaban la hermenéutica fundamental del evangelio y del
Nuevo Testamento. Sostuvo que nuestras aplicaciones de la profecía bíblicogeográficas al Medio Oriente no eran otra cosa que adaptaciones del futurismo
dispensacional.
Esto me convenció de establecer el descubrimiento hermenéutico de
Were sobre la base de la Biblia misma, sin necesidad de utilizar a Elena de
White como autoridad interpretativa, de manera que nuestro mensaje
profético pudiera tener una influencia más amplia. Elegí esto como mi
contribución a la escatología adventista y lo desarrollé en forma sistemática
durante mis veinticinco años como profesor en el Seminario de la Universidad
Andrews. Esta hermenéutica cristológica se presenta en mi libro “El Israel de Dios
en la Profecía. Principios de Interpretación Profética”. Además aplico la hermenéutica
del evangelio al Armagedón, como la última guerra santa de Dios en favor de
sus fieles seguidores, en mi libro “Carrozas de Salvación”
1
Hans Larondelle Inserta El Énfasis Cristológico En La Identidad
Profética Adventista
El viejo literalismo escatológico de Uriah Smith fue
reemplazado gradualmente por la escatología cristocéntrica de
Louis Were. Pero ella no habría tenido el mismo impacto en la
Iglesia mundial sin la contribución de Hans K. LaRondelle,
1
Hans K. Larondelle, “Minha Jornada E Minhas Descobertas Em
Escatologia Apocalíptica,” In Ofuturo: A Visao Adventista Dos Últimos
Acontecimentos. Arti- Gos Teológicos Apresentados No V Simpòsio Bíblico-Teológico
Sul- Americano Em Homenagem A Hans K. Larondclle (Engenheiro Coelho, SP:
Unaspress, 2004).Xxi-Xxviii.
107
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
quien no sólo republicó los libros de Were sino que amplió y
profundizó los conceptos escatológicos de este autor. Es de
destacar el hecho de LaRondelle construyó y consolidó un
marco escatológico que combina la identidad profética
adventista con el nuevo énfasis cristocéntrico1.
Se ha reconocido que la exposición más importante para
la comprensión adventista de Israel en las profecías bíblicas es la
obra de LaRondelle titulada “El Israel de Dios en la Profecía”.
Bajo el presupuesto de que la Biblia es su propio intérprete y de
que Cristo es el verdadero intérprete de la Biblia hebrea
LaRondelle argumenta que el Nuevo Testamento es la
interpretación divina y autoritativa del Antiguo Testamento.
Esto implica que el cumplimiento de la misión de Israel debe
ser la misión de la Iglesia cristiana, que el Nuevo Testamento
universaliza las promesas territoriales de Israel, lo cual deja sin
justificativo la idea de una alianza de Dios con el Israel
territorial2.
LaRondelle propone redefinir el historicismo según
parámetros más bíblicos que históricos. A continuación se
expresan y evalúan sus principales ideas al respecto.
1
Ron Du Preez, Ed., Prophetic Principles: Crucial Exegetical, Theological,
Historical & Practical Insights (Lansing, MI; Berrien Springs, MI: Michigan
Conference Of Seventh-Day Adventists ; Printed By Lithotech Graphic
Services, 2007). ,189.
2
Ibid., 293.
108
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
El Historicismo según Hans LaRondelle
LaRondelle señala que “es necesario definir el
historicismo cuidadosamente antes de que podamos discutir su
validez y límites”1. Por esto analiza algunos de los supuestos
historicistas propuestos por LeRoy Froom e instalados en el
adventismo, por ejemplo que el historicismo es "el
cumplimiento progresivo y continuo de la profecía, en secuencia
ininterrumpida, desde los días de Daniel y el tiempo de Juan,
hacia abajo a la segunda venida y el fin del mundo".
Para LaRondelle la definición de Froom implica una
cierta exégesis teológica, que él no identifica, como hilo
conductor de su comprensión de lo que constituye un
cumplimiento de la profecía. Un cumplimiento verdadero debe
corresponder al significado previsto por el profeta, y por lo tanto
requiere una exégesis de la Escritura en su contexto literario e
histórico. Incluso la Cruz no se explica por sí sola y necesita de
una interpretación divina (ver 1 Cor. 1: 22-25; 15: 3; Romanos
3:25, 26.).
Esto nos lleva a preguntarnos por el origen bíblico del
historicismo; es decir, por la revelación profética que periodiza
la historia en épocas sucesivas que conducen hasta el
establecimiento del reino de Dios. Ese origen, según el consenso
mayoritario, es el libro apocalíptico de Daniel, cuyas visiones
proceden de su propio tiempo hasta el final de la historia del
1
Hans K. LaRondelle, «The heart of historicism», Ministry Magazine,
accedido 31 de marzo de 2015,
https://www.ministrymagazine.org/https://www.ministrymagazine.org/archi
ve/2005/09/the-heart-of-historicism.html.
109
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
mundo, enfocadas de continuo en la historia de la salvación. Se
centran en Israel como el pueblo del pacto de Dios y en sus
futuras experiencias. Daniel mismo proporciona así el criterio
teológico por el cual un cumplimiento de la profecía debe ser
evaluado.
Sobre la base de estas aplicaciones Nuevo Testamento de
las profecías de Daniel a la era de la iglesia, LaRondelle recuerda
que la Enciclopedia Adventista del Séptimo Día concluye que "el
historicismo como método de interpretación se encuentra en la
Biblia misma, y proporciona la clave para la interpretación de
los libros apocalípticos de Daniel y Apocalipsis”.
La clave hermenéutica que la misma Escritura ofrece,
que permite que todos los creyentes puedan estar al tanto de la
norma bíblica para la interpretación de las profecías y de la
veracidad de las aplicaciones históricas es el cristocentrismo.
Solamente los cumplimientos que pertenecen a Cristo y su
pueblo del nuevo pacto aumentarán nuestro conocimiento de
Daniel y Apocalipsis (cf. Dan. 12: 4).
Las tradiciones historicistas del pasado tienen que ser
probadas en según su veracidad exegética, de acuerdo con la
perspectiva bíblica de la historia. Esta calificación teológica de
un verdadero cumplimiento de la profecía debe ser reconocida
como el principal responsable del historicismo. Si profesamos el
principio Sola Scriptura ¿cómo podemos nosotros, al mismo
tiempo alegar como Froom que "la historia" como tal "es el
verdadero y último intérprete"?
Nuestra confianza en el fundamento exegético apropiado
110
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
de las interpretaciones "historicistas" de la Escritura no puede
darse por sentado. Dar cuenta de nuestras interpretaciones
proféticas es una condición bíblica previa a aceptar la
responsabilidad individual por su veracidad (véase 1 Pedro
3:15). Pablo pone todas las manifestaciones del Espíritu en la
iglesia bajo la necesidad de pruebas sobre su veracidad: "No
desprecien las profecías. Examinadlo todo, retened lo bueno" (1
Tesalonicenses 5:20, 21, NVI.).
Si la historia de salvación es el foco de las profecías
apocalípticas, debemos probar y purificar el historicismo
mediante la perspectiva bíblica de la historia del pacto. Tenemos
que definir que es un "cumplimiento" histórico, de acuerdo con
el tema de la controversia cósmica en Daniel y Apocalipsis. El
Nuevo Testamento nos da la norma cristológica por el cual
hemos de probar cada aplicación histórica de la profecía. La
aplicación de esta norma centrada en Cristo engendra
credibilidad a nuestras proclamaciones públicas de las
intenciones divinas de la profecía.
Si nos desentendemos de la historia bíblica del pacto, no
podemos evaluar la veracidad de las reivindicaciones historicistas
anteriores. Es nuestro deber como intérpretes cristianos
reexaminar nuestro método de interpretación y aplicación
profética para definir una hermenéutica cristológica consciente y
consistente.
El historicismo necesita la reflexión disciplinada de
exégetas y teólogos sistemáticos para su afirmar su propia
credibilidad teológica y exegética. La verdad de la Biblia no se
111
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
establece por una visión de la mayoría de los intérpretes
piadosos, sino por una exégesis veraz, contextual de la Escritura.
Esto exige una cooperación de todas las disciplinas teológicas de
la iglesia para que todos los buscadores de la verdad puedan
experimentar una progresiva comprensión de la profecía, basado
en los principios del Evangelio del Nuevo Testamento.
La conexión bíblica del evangelio apostólico con las
interpretaciones apocalípticas sigue siendo el tema crítico para el
historicismo adventista. ¿Puede el evangelio tener una influencia
transformadora en nuestras interpretaciones apocalípticas? Si se
pasa por alto la prioridad del evangelio en la interpretación
profética, el escollo de la literalidad casi no se puede evitar. El
literalismo, reconocible por sus aplicaciones étnicas y geográficas
de Medio Oriente de la profecía, usurpa inmediatamente el
lugar primario de Cristo como la norma decisiva para la
interpretación profética. Este hermenéutica moderna exige
vigilancia renovada en cada generación para salvaguardar la
prioridad del evangelio eterno en las interpretaciones
apocalípticas (ver Apocalipsis 12:17; 14:12; 20: 4).
Sólo ha comenzado la tarea de un examen honesto del
historicismo adventista a través de una sana exégesis de la
Escritura. El problema principal sigue siendo una definición de
los principios del Nuevo Testamento de la interpretación de la
Escritura que se apliquen por igual a las profecías cumplidas y
no cumplidas. Una prueba tal de nuestras suposiciones y
aplicaciones tradicionales puede conducir a una proclamación
más bíblica y creíble que moverá otra vez el corazón. Algunos
teólogos líderes adventistas han comenzado a reafirmar el
principio motivador del protestantismo: ecdesia reformata semper
112
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
reformanda, que significa "una reforma que nunca se completa
una vez y para siempre, sino que se renueva y volver a aplicar de
generación en generación, a la luz de las Escrituras”.
Las ideas de LaRondelle son útiles en su medido
equilibrio. Pero el enfoque exegético-contextual que no atiende
con igual interés a “las cosas que deben suceder pronto” deja la
profecía en un terreno más cercano a la homilía que a la
proclamación urgente que despierta a un mundo mostrándole lo
que pasó y preparándolo para lo que viene.
Por otra parte la reforma continua no necesariamente
significa cambio continuo. ¿Será posible profundizar sin
cambiar, o la reforma requiere la remoción de los hechos
establecidos en el pasado? ¿Las bestias de Apocalipsis son las
mismas siempre, o van cambiando según el tiempo? ¿Daniel y
Apocalipsis son evangelios, eslabones de un todo evangélico, o
libros proféticos?
Acerca de los cumplimientos históricos, como por
ejemplo los acaecidos en 1755 y 1833, ¿deben entenderse como
eventos casuales, mal entendidos como cumplimiento profético,
o señales concretas anunciadas en el pasado de manera concreta?
¿Cuál sería la norma que distinga el cumplimiento cristológico
del cumplimiento histórico?
No se duda que el literalismo geográfico debe ser
vigilado, y mucho más siendo mayoritario hoy en día. Pero un
descuido de lo histórico en detrimento de lo exegéticocontextual no parece ser la mejor solución.
Además, que un historicismo “evangélico” sea mejor
para evangelizar no está garantizado. Más bien la Palabra bien
113
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
trazada, manifestada y cumplida en los tiempos fue la esencia de
la predicación apostólica, y dinamiza el adventismo hasta la
fecha1.
Lamentablemente la apelación de LaRondelle por un
historicismo purificado permite cuestionamientos desde los
oponentes de este enfoque2.
Aportes de Were y LaRondelle Según A. Treiyer
En la opinión de Alberto R. Treiyer, uno de los más
destacados historicistas adventistas actuales, la mayor
contribución de Louis Were fue buscar un cumplimiento de las
promesas hechas al antiguo Israel que no ignorasen el evangelio.
En otras palabras, Israel no es más el antiguo literal, sino el
1
“Hay elementos en varias profecías bíblicas concretados en la
experiencia adventista. Tal evidencia dispara la dinámica del adventismo,
impulsando la iglesia hacia adelante en las partes más remotas del mundo
para cumplir la tarea profética. Jesucristo, el Autor de todas las cosas y el
Redentor de los hombres, está pronto a volver en majestad para inaugurar su
reino de gloria. Las profecías cumplidas dan urgencia a la predicación actual y
aseguran la certeza del triunfo futuro. La historia, en efecto, ofrece pruebas
convincentes de que la obra del evangelio, propugnada por los adventistas
como su principal preocupación entre todas las empresas terrenales, es
verdaderamente la obra de Dios”.George Reid, «History confirms the divine
call», Ministry Magazine, accedido 31 de marzo de 2015,
https://www.ministrymagazine.org/https://www.ministrymagazine.org/archi
ve/1982/12/history-confirms-the-divine-call.
2
Eduard Hanganu, «Adventist Historicism Reexamined And
Critiqued Basic Draft», accedido 29 de marzo de 2015,
https://www.academia.edu/11151060/Adventist_Historicism_Reexamined_
And_Critiqued_Basic_Draft.
114
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
espiritual: la iglesia. Esto no significa espiritualizar las profecías
en el sentido de volverlas puramente filosóficas o ideológicas, ya
que se concretan en una entidad definida: la iglesia. Asimismo
pasa con Babilonia en su proyección simbólica: la Iglesia
Católica Romana apóstata que se asienta sobre Roma, etc. En
esencia, en el NT, los aspectos geográficos y étnicos continúan
pero sólo en una dimensión simbólica.
Treiyer también considera que la mayor contribución de
LaRondelle se vio en su libro The Israel of God. Es una
ampliación y documentación mayor y mejor sistematizada de lo
que introdujo Were. Los problemas de LaRondelle, aduce
Treiyer, comenzaron cuando tendió a espiritualizar el
cumplimiento de las profecías y a negar valor a la caída de las
estrellas y las demás señales estelares, etc1.
Continuidad Teológica De Los Principios Rescatados Por Were
LaRondelle toma, refina y desarrolla los principios
hermenéuticos de Were, desnudando las especulaciones
modernas sobre cumplimientos proféticos, la verdadera y la falsa
profecía en el antiguo Israel del Nuevo Testamento, y la
presencia del remanente fiel de Israel que será protagonista de
los eventos escatológicos finales2.
En lo que probablemente sea su obra cumbre, una
especie de manual hermenéutico para la profecía bíblica,
LaRondelle desarrolla técnicamente los principios vislumbrados
por Were, medio siglo antes. Estudia el foco cristocéntrico de la
1
Alberto Treiyer, “Contribuciones y Debilidades Escatológicas,” EMail Dirigido Al Autor, Feb. 5, 2015
2
Hans K Larondelle, Armagedom: O Verdadeiro Cenário Da Guerra
Final (Tatuí, SP: Casa Publicadora Brasileira, 2004).
115
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
Escritura, la clave interpretativa del AT, los defectos de las
interpretaciones literales y alegóricas, la naturaleza de la
interpretación tipológica, la interpretación cristológica y el
protagonismo del remanente en el Nuevo Testamento. En
resumen, en esta obra se pule el método cristológicoeclesiológico vislumbrado por Were desde 19301. El impacto de
esta obra excedió las fronteras de la teología adventista2.
En un golpe argumentativo lapidario LaRondelle señala
que “desde la perspectiva de la unidad de ambos testamentos
parece claro que cualquier interpretación del Armagedón no
centrada en el Dios de Israel o su Mesías Jesús de Nazaret
transforma la profecía en un ejercicio de adivinación”3.
“La idea filosófica detrás del literalismo profético es que
las profecías del AT deben tener un cumplimiento literal
incondicional en los tiempos del NT, sin considerar el impacto
fundamental de la primera venida de Cristo en la profecía
bíblica”4.
“Las promesas de bendición del AT son cumplidas en la
comunidad mesiánica de fe, no en el pueblo judío como entidad
política o étnica”5.
Una vez establecida su hermenéutica LaRondelle aplica y
ejemplifica el método cristológico-eclesiológico en el estudio de
1
Hans K. Larondelle, The Israel Of God In Prophecy: Principles Of
Prophetic Interpretation (Berrien Springs, Mich: Andrews University Press,
1983).
2
Michael J. Vlach, Has the Church Replaced Israel?: A Theological
Evaluation (B&H Publishing Group, 2010).
3
Hans K Larondelle, Armagedom: O Verdadeiro Cenário Da Guerra
Final 7.
4
Ibid., 14.
5
Ibid., 21.
116
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
las profecías escatológicas, e intenta probar que tanto Jesús
como Pablo interpretaron así los escritos de Daniel1. Con estas
herramientas comenta consistentemente las principales profecías
del Apocalipsis. De este modo LaRondelle actualiza y afirma la
viabilidad de la hermenéutica redescubierta por Were. Sus
libros, artículos en la revista Ministry, y clases de posgrado en
todo el mundo extendieron la influencia de la obra de Were
mucho más lejos en el espacio y en el tiempo de lo que el
escritor australiano hubiera imaginado.
Influencia de Were en Otros Teólogos Posteriores
Entre los teólogos que reconocen haber sido
influenciados por Were, además de Hans LaRondelle, se
encuentra Jon Paulien. Así como LaRondelle le reconoce a
Were haber demostrado la naturaleza cristocéntrica de la
profecía y la orientación escatológica de las promesas del pacto
de Dios con Israel2, Paulien reconoce que Were le contagió su
pasión por una comprensión adventista de la profecía orientada
al evangelio y a la vez relevante para la vida cotidiana3.
En lo que tiene que tiene que ver con el mundo de habla
hispana se destaca la continuidad de las ideas de Were en las
libros de Antolín Diestre Gil, en Europa, y en la extensa
docencia de Humberto R. Treiyer4.
1
Hans LaRondelle, Las Profecías Del Fin (CreateSpace Independent
Publishing Platform, 2015).
2
Quispe, Zubieta, y Cárdenas, The Apocalypse in Seventh-Day Adventist
Interpretation. 155.
3
Ibid.,219.
4
El Dr. H. Treiyer ejerció la docencia en instituciones universitarias
de Argentina tales como la Universidad Adventista del Plata y el Instituto
117
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
En su libro Enigmas Descifrados1, H. Treiyer abunda en
los conceptos de Louis Were (hay 5 libros del australiano en la
bibliografía final de la obra). De hecho este autor fue quien trajo
sus materiales desde Australia a la Argentina. Por ejemplo,
analiza la transición de lo literal a lo simbólico con estas
palabras:
“La crucifixión de Jesucristo marcó un gran cambio en la
identificación de lugares, puntos cardinales y referencias
geográficas en las profecías; de hecho, la literalidad de
estas referencias geográficas caducó con ese trascendental
evento. ¿Qué queremos decir con ésto? Que hasta la
Cruz el pueblo de Dios, los judíos, ocupaban un lugar
geográfico definido, lugar qu el mismo Dios les había
asignado despojando a los pueblos corruptos y
extremadamente crueles que habitaban ese territorio.
Hasta la muerte de Cristo en la Cruz, el gran centro del
planeta, el gran punto focal de referencia de toda la
Biblia, era un monte literal, el Monte Moria, más
conocido como Monte Sion, una Sion literal, una
Jerusalén literal, y, por extensión, una Palestina literal,
una Babilona literal, un Éufrates literal, un Egipto literal,
un Norte, un Este y un Sur literales, etc. Sin emergo,
todas las referencias geográficas proféticas se volvieron
simbólicas o espirituales a partir de la Cruz. ¿Por qué este
Superior del Profesorado; en la Universidad Adventista de Centroamérica,
Costa Rica; en la Universidad Adventista de Colombia; y en Filipinas, en el
Adventist International Instítute of Advanced Studies. Adicionalmente dictó
cursos en el Instituto Adventista de Ensino (Brasil); en la Universidad
Adventista de Chile; en el Colegio Adventista de Sagunto (España) y en
Solusi University (Zimbabwe).
1
H. R. Treiyer, Enigmas descifrados: conozca los fascinantes misterios de
Daniel capítulos 11 y 12 (Antillian College Press, 2006).
118
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
cambio? Como ya se mencionó, su causa del rechazo que
habría de experimentar el pueblo judío como nación
escogida de Dios” (Mateo 23:38)”1.
No sorprende, en consecuencia, que H. Treiyer siga muy
de cerca toda la interpretación que Were hace de Daniel 11.
Quizá su mayor diferencia estribe en que Treiyer considera la
tierra gloriosa como una mención al poder norteamericano
aliado al papado en el fin del tiempo, presentando cinco
argumentos en apoyo de esto2.
Como demostración del impacto de las ideas de Were
más allá del mundo angloparlante se hallan los voluminosos
libros del español Antolín Diestre Gil, quien continúa el legado
hermenéutico de Were y LaRondelle y lo aplica a las profecías
de Daniel y Apocalipsis, documentándolo históricamente con
1
Ibid., 26.
1-Esa “tierra" comenzaría a hacer sentir su presencia en mundo hacia
fines del siglo XVIII;
2-En esa tierra se conservaría, como en ningún otro país de ese entonces,
la revelación de Dios en su pureza; 3-Con el paso del tiempo esa pureza
se iría perdiendo dando lugar a una generalizada apostasía [el texto
paralelo lo anticipa con claridad meridiana al indicar que el “rey del
Norte” habría de entenderse “con los que abandonen santo pacto"
(11:30)]. 4-Precisamente en tiempos de esa apostasía esa nación
habría de transformarse en una superpotencia mundial única ya que
de lo contrario no podría ayudar al “rey del Norte‟ lograr el dominio mundial
descripto en los vv. 41 a 43. 5-EI verbo „entrar‟ utilizado en la expresión clave
“entró en la tierra gloriosa‟‟, parecería anticipar que no habría de ser
conquistada por el “rey del Norte” por medio de fuerza, sino que esa estrecha
colaboración implicada entre ambos habría de ser resultado de un proceso de
acercamiento y entendimiento paulatino y pacífico. En otras palabras, sería la
apostasía de la “tierra gloriosa" la que abriría las puertas a la entrada pacífica
del “rey del Norte” en ella. Ibid., 163. Esta posición es original de Treiyer y
ha sido criticada por las recientes publicaciones Elías Mora y Héctor Urrutia.
2
119
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
particular detalle. Su contribución especial consiste en expresar
en buen castellano las ideas de Were y LaRondelle, y añadirle
profusa y actualizada evidencia histórica1.
Al analizar Daniel 11, Diestre Gil admite la influencia de
Were y LaRondelle. Declara que LaRondelle “nos ha legado una
contribución que tiene que ver con la correcta hermenéutica de
los pasajes que estamos estudiando, y que sirve para otros
relativos a promesas y profecías escatológicas del Antiguo
Testamento. Lo logra “después de haber estudiado a otro
precursor, Louis F. Were, quien pone en práctica el método que
posteriormente Larondelle sistematizará”2.
Al sentar las bases de su exposición de Daniel 11, Diestre
Gil resume los puntos de la hermenéutica que establece Were y
desarrolla y sistematiza LaRondelle: la significación teológica del
nombre Israel, “junto al concepto de Israel de Dios”, y su
aplicación cristocéntrica en el NT3.
Otro teólogo influido por Were, cuya docencia extendió
por muchos años los postulados principales de este autor entre
los estudiantes de teología del cono sur americano, es David
Gullón. Al introducir un artículo sobre el Armagedón, David
Gullón declara sobre que: “A esta guerra varias veces milenaria
la denominamos la guerra escatológica, y en esta investigación
presentaremos el alcance de la escatología apocalíptica, lo que la
1
Antolín Diestre Gil, El Sentido De La Historia Y La Palabra Profética:
Un Análisis De Las Claves Históricas Para Comprender El Pasado, Presente Y El
Futuro Político-Religioso De La Humanidad Desde La Civilización Babilónica Hasta
El Nuevo Orden Mundial (Terrassa (Barcelona): Editorial CLIE, 1995).,763809.
2
Diestre Gil, El Sentido De La Historia Y La Palabra Profética.,326.
3
Ibid., 326-337.
120
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
Biblia dice acerca de esta guerra, los principios de interpretación
que seguiremos y la identidad de la escatología del Antiguo
Testamento y del Nuevo Testamento, y por consiguiente la
unidad y continuidad de la guerra escatológica” . En este
artículo Gullón trazará los principios de Were con ejemplos de
ambos testamentos. Reconoce que “el alcance de la escatología
apocalíptica es muy amplio y no se centra únicamente en los
eventos de los días finales, sino que comprende todo el tiempo
que abarca la Revelación, es decir los tiempos del Antiguo y del
Nuevo Testamento. El conflicto entro el bien y el mal es el
centro y la columna vertebral de la profecía escatológica y por lo
tanto la historia ocupa un lugar importante en su alcance y
desarrollo” . Declara que “el alcance de la escatologia apocalíptica
es cristocentrico y no meramente geográfico y se centra sobre
Israel ya que en las profecías de los días finales Israel aparece en
el centro del conflicto entre el bien y el mal” colocando así en la
misma posición planteada por Were, a quien cita tres veces en
su artículo . Con claridad señala que “la interpretación
cristológica consistente de! Antiguo Testamento por el Nuevo
Testamento, tiene implicaciones hermenéuticas de largo alcance
para la escatología. Podemos decir que a semejanza de una elipse
con sus dos centros, las dos venidas de Cristo constituyen los
dos centros de la escatología del Nuevo Testamento. Cristo y el
pueblo del pacto de todas las edades son la norma para el
cumplimiento final de las promesas y las maldiciones del
pacto” .En cuanto a la relación con la tipología y la escatología
afirma que “los tipos genuinos del Antiguo Testamento son
1
2
3
4
1
David Gullón, “Identidad Y Continuidad De La Guerra
Escatológica,” Enfoques, 1976. ,69.
2
Ibid.
33
Ibid., 89,90.
4
Ibid., 73.
121
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
realidades, sean personas, eventos o cosas del Antiguo
Testamento, que más tarde, escritores inspirados muestran que
tienen una correspondiente realidad espiritual que reemplaza al
hecho histórico. Con frecuencia tienen significado espiritual
tanto para el tiempo cuando fueron dados como para el
futuro” .Finalmente, asombrado, escribe que “lo sorprendente
del apocalipticismo del Nuevo Testamento es que reinterpreta
básicamente lo apocalíptico del Antiguo Testamento; mantiene
el mismo simbolismo, fraseología y centro, pero con una
interpretación cristocéntrica” . De esta manera D. Gullón se
ajusta también a la hermenéutica propuesta por Were treinta
años antes de la publicación de este artículo.
1
2
La Sistemática Adventista Contemporánea Avala Un
Armagedón Espiritual
Norman Gulley concuerda en que el Armagedón,
contrariamente a lo que se cree casi masivamente hoy en
el mundo protestante, no es una lucha económica ni
política sino religiosa, en un mundo polarizado entre dos
bandos: los que están con Dios y los que se le oponen.
En la Biblia un suceso local puede tipificar algo a escala
mundial. Esto es realidad también en relación con el
Armagedón, ya que muchas batallas bíblicas fueron
definidas por Dios cerca de esa zona. En esos eventos se
veían tres elementos comunes: (a)el enemigo excedía en
número al pueblo de Dios, (b)pero fue completamente
destruido por Dios para que de ese modo (c) su pueblo
1
Ibid., 75.
Ibid., 79.
2
122
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
fuera totalmente liberado1.
Las naciones encuentran su lugar en la Biblia
solo si tienen que ver con el pueblo de Dios, ya sea por
apoyar al pueblo de Dios o por combatirlo2.
El Armagedón no vendrá antes de la ley
dominical o el decreto de muerte, porque ocurre durante
la sexta plaga3.
Aunque la etimología precisa del término sigue
siendo debatida, lo cierto es que hay consenso acerca del
sentido de esta batalla como siendo la definición del
gran conflicto de las edades4.
Teólogos Sudamericanos Reafirman La Hermnéutica Adventista
Otro hito importante para la escatología adventista fue el V
Simposio Bíblico-Teológico Sudamericano, celebrado en
Ingeniero Coelho, en 2002. Allí se dejó expresado que
1. El elemento escatológico es una parte esencial de la
profecía bíblica, hallando su centro y clímax en la persona
de Jesucristo y su obra redentora.
2. El elemento profético de las Escrituras es genuinamente
predictivo y se cumple a lo largo de la historia humana.
1
Norman R Gulley, Cristo Viene!: Un Enfoque Cristocéntrico De Los
Eventos De Los Últimos Días (Buenos Aires, Argentina: Asociación Casa
Editora Sudamericana, 2003).,589-591.
2
Ibid., 592.
3
Ibid., 593
4
Angel Rodríguez, «The Battle Over Armageddon», Advenist Review,
s. f., http://archives.adventistreview.org/2001-1506/story3.html., accedido
24 de marzo 2015.
123
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
3. El historicismo es el método bíblico de interpretación
profético-apocalíptico.
4. El principio día-año debe ser utilizado en la
interpretación de los elementos que figuraban en las
profecías apocalípticas en las que se utilizan los símbolos
para describir entidades más amplias.
5. Las 2300 tardes y mañanas de Daniel 8:14 representan
2300 años, los cuales comenzaron en el año 457
a. C. y terminaron en 1844 dC, cuando comenzó en el
Santuario Celestial el juicio investigador previo al
advenimiento.
6. La doctrina de la inmortalidad condicional del ser
humano y la noción correcta de la destrucción final de los
impíos es el fundamento para la comprensión de la
escatología bíblica.
7. La segunda venida de Cristo se describe en el cuerno de
como un solo evento, literal y visible, cuando los justos de
todas las edades serán llevados al cielo, donde reinarán con
Cristo mil años.
8. No hay base bíblica para cualquier teoría alternativa,
como ser el arrebatamiento secreto de la Iglesia antes de la
parusía o un reino judío-mesiánico en la tierra durante el
milenio.
9. Hay señales que indican el inminente regreso de Cristo,
pero conviene ser cuidadosos para no atribuir significados
escatológicos a eventos no claramente determinados en las
Escrituras.
10. La Iglesia del Día Santo es la comunidad escatológica a
la que Dios encomendó la tarea de proclamar al mundo por
el Espíritu Santo, el evangelio eterno en el contexto del
124
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
mensaje de los tres ángeles mensajes de Apocalipsis 14:6121.
Daniel 11 En La Interpretación Profética Actual: Continuidad
Y Variantes
Así como el rey del Norte o Seléucida que gobernó Siria
y Babilonia, en el tiempo del fin atañe a la Babilonia espiritual
(Apoc.14:8, 17:5; 18), el rey del Sur o Ptolomeo que gobernaron
Egipto, en el tiempo del fin representa al Ateísmo. Estos
poderes antagónicos son parte de la misma bestia ya que ambos
luchan contra el “pacto santo”. Diestre Gill afirma: “El „Norte‟
alude a lo „religioso‟ hasta el extremo de actuar como si fuera
Dios, mientras que el Sur apunta a lo puramente „humano‟
apoyándose en sí mismo, no tiene en cuenta las directrices
divinas2.
Carlos Mora y Héctor Urrutia se diferencian de
Were en el detalle de que Edom, Moab y Amón
abandonan el remanente en lugar de unirse a éste3. Más
allá de pequeñas variantes ambos se ajustan a la misma
hermenéutica de Were y LaRondelle4.
1
Ron Du Preez, ed., Prophetic Principles: Crucial Exegetical, Theological,
Historical & Practical Insights (Lansing, MI; Berrien Springs, MI: Michigan
Conference of Seventh-day Adventists ; Printed by LithoTech Graphic
Services, 2007). 301.
2
Hector Urrutia, “Profecía Apocalíptica De Daniel,” N.D.,23.
3
Carlos Mora, Dios Defiende A Su Pueblo (Mexico: Adventus,
2012).,180
4
Ibid., 3-9.
125
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
CAPÍTULO IV.
REVISIONISMO PROFÉTICO EN LA IASD
Aunque la hermenéutica historicista resultó fortalecida
por los aportes de Louis Were, en los últimos años este enfoque
interpretativo ha sido discutido ya no solamente desde fuera del
adventismo sino desde algunos sectores del mismo. En este
capítulo se detallarán las críticas realizadas y los efectos de la
misma tocante al mensaje y misión de la iglesia.
Razones Para el Descrédito del Historicismo
Luego del Gran Chasco la estructura hermenéutica del
fijado de fechas quedó completamente desacreditada fuera del
pequeño círculo del grupo millerita sobreviviente, y en
Norteamérica la sociedad le dio la espalda a la especulación
milenarista por una generación1. Esta consecuencia, esperable
entre quienes no aceptaron la validez de la fecha del 22 de
octubre de 1844 como inaugurando el juicio previo al
advenimiento, dejó al historicismo casi como una pieza de
museo. El mundo erudito quedó disociado de este enfoque.
Surge El Revisionismo Profético Adventista
1
Martin Ballard, End-Timers: Three Thousand Years Of Waiting For
Judgment Day (Santa Barbara, Calif: Praeger, 2011). ,142. Además la
reinterpretación de este traumático evento por parte de los creyentes que lo
sobrevivieron fue objeto de miradas inquisidoras diversas. Ver Leon
Festinger, Henry W. Riecken, y Stanley Schachter, When Prophecy Fails (Pinter
& Martin Limited, 2008).
126
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
Probablemente a causa de la creciente presión del
mundo académico1, la apocalíptica adventista, según lo
perciben algunos observadores externos, se ha venido
fragmentando2. Y esta misma fragmentación, como si
retroalimentara un círculo vicioso, produce dispares
interpretaciones que generan nuevas críticas (no todas ellas
desacertadas)3. El precio de la profecía, en este caso, sería el
rechazo o aislamiento de la erudición teológica contemporánea.
Pero algunos autores adventistas no están dispuestos a
afrontar este costo. Los promotores del nuevo enfoque
revisionista no dudan en restringir su enfoque escatológico al
mundo contemporáneo, considerando obsoleta la comprensión
adventista historicista respecto de cumplimientos específicos de
la profecía en toda la historia humana4. Este enfoque, de ser
1
Kenneth G. C. Newport, Apocalypse and Millennium: Studies in
Biblical Eisegesis (Cambridge University Press, 2000). Este libro es un notable
ejemplo de las acusaciones que el mundo académico contemporáneo hace a
la hermenéutica adventista. Es probable que las mismas generen una especie
de “timidez hermenéutica” con la consecuente dilución escatológica.
2
Thomas Robbins y Susan J. Palmer, Millennium, Messiahs, and
Mayhem: Contemporary Apocalyptic Movements (Psychology Press, 1997).,213.
3
En su crítica al historicismo E. Hanganu observa apropiadamente
que la definición adventista de este método hermenéutico está fragmentada
en varios formulaciones irregulares que en su conjunto ha producido
interpretaciones proféticas desiguales.Hanganu, «Adventist Historicism
Reexamined And Critiqued Basic Draft».,73.
4
Valga como ejemplo la siguiente declaración: “No importa nuestra
interpretación, si se transmite el mensaje (que es, creo, el mensaje
escatológico esencial de toda la Escritura) que Dios está en control, entonces
tal vez no tiene que estar de acuerdo. En cuanto a mí, creo que cuando me
encuentro con Jesús, me llevará al cielo si o no me puedo identificar con
precisión quién era el rey del norte”. Loren Seibol, «Islam in Bible
Prophecy», Spectrum, 18 de octubre de 2012,
127
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
aceptado, no sólo generaría una ruptura significativa con la
hermenéutica historicista sino que eclipsaría la identidad
profética de la iglesia como un movimiento fundado en los
cumplimientos proféticos del siglo del siglo XIX1.
Por ejemplo, en 1974 Jack W. Provonsha, profesor de
Filosofía y Ética Cristiana en la Universidad de Loma Linda,
argumentó que todas las intervenciones de Dios en la historia y
la vida personal de cada uno son algo así como “segundas
venidas”. Esta idea, confortadora como lo parece, es un
alejamiento de la creencia adventista en una parusía tan
histórica como lo fue el primer advenimiento de Cristo2.
Un enfoque muy negativo para con el historicismo
adventista se vislumbró en los estudios doctorales de Kai
Arasola, entonces presidente de la Asociación del Este de
Finlandia. Arasola sostuvo que luego del chasco millerita el
historicismo cayó en descrédito y fue suplantado por el
dispensacionalismo. Sin embargo esta posición fue refutada más
tarde por Samuel Nuñez y P. Gerard Damsteegt3, entre otros1.
http://spectrummagazine.org/article/column/2012/10/18/islam-bibleprophecy.
1
Ofuturo: A Visao Adventista Dos Últimos Acontecimentos. Arti- Gos
Teológicos Apresentados No V Simpòsio Bíblico-Teológico Sul- Americano Em
Homenagem A Hans K. Larondclle (Engenheiro Coelho, SP: Unaspress,
2004),282.
2
Jack Provonsha, God With Us (Washington: Review And Herald,
1974).,143.
3
Ibid., 290. “La Profecía No Cumplida Asestó Un Golpe Fatal Para
El Corazón De La Identificación Del Movimiento Millerita Pero No Puso Fin
Al Adventismo Milenarista”. Ver Jerry L. Walls, Ed., The Oxford Handbook Of
Eschatology, Oxford Handbooks In Religion And Theology (New York ;
Oxford: Oxford University Press, 2010).
128
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
Poniendo la base para su apelación a más
“desarrollo doctrinario” Rolf Pohler reclama que “hay
algunas preguntas que necesitan ser abordadas: ¿Qué le
ha pasado al movimiento adventista desde el momento
de su nacimiento? ¿Estamos todavía en camino,
continuando la acción reformadora con vigor y celo? ¿O
quizá ya la hemos completado, alcanzando el punto de
inflexión después de lo cual no hay más verdades para
ser descubiertas, ni doctrinas que reformar, ni
comportamiento que cambiar? ¿Acaso seguiremos los
pasos de nuestros predecesores por dormirnos en los
laureles, satisfechos con lo que hemos logrado, sin mayor
crecimiento, resistiendo el avance de la verdad,
convirtiéndonos en aburridos tradicionalistas? ¿Acaso
estamos prometiendo más de lo que realmente podemos
ofrecer? ¿Somos guardianes de la llama o simplemente
1
“El hecho de que la mayoría de los comentaristas de los últimos
150 años hayan abandonado su propio patrimonio historicista no justifica
seguirlos por el acantilado del futurismo o sumergirse en el estanque del
preterismo”. Martin Weber, «1844---is it biblical?», Ministry Magazine,
accedido 31 de marzo de 2015,
https://www.ministrymagazine.org/https://www.ministrymagazine.org/archi
ve/1994/10/1844-is-it-biblical. La razón para sostenerlo tiene que ver con
que los adventistas siempre opinaron que “un alto concepto de la autoridad
de la Escritura no se basa en una teoría de la inspiración verbal sino en la
creencia de que los escogidos de Dios eran sus voceros para hacer que la
verdad fuera conocida por el hombre. Esta revelación lleva la misma
autoridad que la misma voz audible de Dios”.Gordon M. Hyde, «Jesus is
coming soon!», Ministry Magazine, accedido 31 de marzo de 2015,
https://www.ministrymagazine.org/https://www.ministrymagazine.org/archi
ve/1982/03/jesus-is-coming-soon.
129
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
preservadores de cenizas?”1. Por extraño que parezca es
exactamente tratando de preservar una valiosa tradición
que los eventuales reformadores de las tradiciones
eclesiásticas se han convertido a sí mismos en rígidos
tradicionalistas2.
Aunque esta apelación de Pohler pareciera llamar
a una profundización de la experiencia de los pioneros
en realidad apela al liberalismo teológico. Nótese que
Pohler no habla de profundizar las verdades que
tenemos sino de descubrir nuevas verdades.
El mismo autor agrega que estudios recientes de
la historia teológica adventista han demostrado que los
adventistas han mejorado y ajustado su teología en varias
ocasiones con el transcurso del tiempo. Es de esperar
que también se lo haga en el futuro, a menos que
dejamos de crecer en la fe y nos negamos a seguir
avanzando en nuestras creencias. En tal caso nos
convertiríamos en tradicionalistas, al igual que otros a
los que evaluamos críticamente3.
Añade que hay una diferencia crucial entre la
estima de la propia tradición, y la reverencia casi idólatra
que va en detrimento de la iglesia y su avance.
Conteniendo la riqueza de la experiencia y puntos de
vista de nuestros predecesores espirituales, la tradición
1
Borge Schantz And Reinder Bruinsma, Exploring The Frontiers Of
Faith: Festschrift In Honour Of Dr. Jan Paulsen (Lueneburg, Germany: AdventVerlag, 2009).,158.
2
Ibid., 159.
3
Ibid., 165.
130
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
sin duda que es una invalorable fuente de información,
inspiración y motivación. Pero nunca debe ser usada
para impedir estudios más profundos de la verdad, o
para ahogar el progreso intelectual de los creyentes, o
para obstaculizar el crecimiento doctrinal de la iglesia1.
Honrar el pasado significa avanzar en el espíritu
de nuestros predecesores. En otras palabras, significa que
debemos imitar su actitud, sostener sus principios, y
aprender de sus experiencias mientras que, al mismo
tiempo, avanzamos constantemente en el entendimiento
y aprecio de la verdad revelada2.
Se sugiere que quizá la misión hoy no sea la misma que
hace 150 años, que la iglesia fracasó en su énfasis en la segunda
venida, dado que las iglesias evangélicas han tomado la delantera
con este sentido (que incluye su idea de rapto), y que no se
conoce personaje renombrado que haya sido ganado para la
observancia del sábado3.
Se aboga por un enfoque más político-económico y
ecológico en la misión, de manera que se gane en relevancia4.
A estos clamores revisionistas se agrega R. Osborn
argumentando que la vitalidad del adventismo primitivo estribó
precisamente en la creatividad y efervescencia que siguió al
chasco de 1844, y a la determinación que tuvieron algunos
1
Ibid.
Ibid., 167.
3
J. David Newman “Are The Three Angels Message Still Relevant?,”
Adventist Today, Winter 2014.,7.
4
Sigve Tonstad, “The Core Of Adventism,” Adventist Today, Winter
2014.,12
2
131
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
milleristas de volver a estudiar los textos bíblicos para encontrar
un nueva palabra profética dirigida a los "principados y
potestades" de su tiempo y lugar. Las grandes decepciones
pueden conducir a grandes despertares y a la recuperación de las
percepciones más vitales. Tal fue la experiencia de los pioneros
adventistas y puede ser que sea la experiencia de los adventistas
contemporáneos. Pero en sus esfuerzos por preservar los pilares
teológicos que se recibieron de los pioneros, los adventistas
contemporáneos han perdido de vista el espíritu más profundo
de su propia tradición, su relevancia teopolítica y su urgencia
crítica. Al congelar de manera permanente su herencia
milenarista del siglo XIX y los métodos historicistas ha sido
incapaz de enfrentar los aspectos angustiantes de su propia
historia para ser una verdadera voz profética ante las
desconocidas bestias políticas, religiosas y económicas del
presente1.
Debe subrayarse que Osborn considera al historicismo el
factor “congelante” de la apocalíptica adventista. Por otra parte
en su comentario subyace la idea de que la profecía más que
señalar a desarrollos históricos concretos y específicos apunta a
tendencias que van cambiando según la época, de modo que las
bestias del siglo XIX no son las del siglo XXI.
Sin ir tan lejos como Osborn, en 2006 Jon Paulien
señaló que suponer, como muchos adventistas lo han hecho,
que todo el libro de Apocalipsis debe ser leído como "histórico
1
Ronald E. Osborn, «The Theopolitics of Adventist Apocalypticism:
Progressive or Degenerating Research Program?: The Theopolitics of
Adventist Apocalypticism», Modern Theology 30, n.o 2 (abril de 2014): 219-50,
doi:10.1111/moth.12077.,247.
132
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
apocalíptico" no es un enfoque adecuado para los estudiosos. Es
importante destacar que, sin embargo, Paulien no reniega
completamente del enfoque historicista, aunque practica un
enfoque mucho más matizado.
Cambio De Las Tendencias Hermenéuticas Desde 1970
Desde Kenneth Strand en la década de1970 se “instó al análisis literario
del Apocalipsis, que propone una estructura de quiasmo del libro. Como
resultado, algunos eruditos adventistas han tendido a restar importancia a la
aplicación histórica, incluso sin mencionar fechas específicas. También se observa
que los autores adventistas, después de Uriah Smith hasta alrededor de 1970
citaban más frecuentemente los escritos de Elena G. de White. Desde 1970
también se observa una tendencia creciente a no señalar el papado como
cumplimiento histórico de la profecía. Por otro lado, hay una tendencia a ser más
Cristocéntricos, y poner mucho más énfasis en buscar alusiones, ecos e imágenes
del Antiguo Testamento” .
1
“El énfasis bíblico-teológico tiende a mantener a Cristo en el centro de
la interpretación de las profecías. Se asimila al énfasis bíblico-exegético en el
hecho de centrarse principalmente en los primeros lectores del Apocalipsis y el
contexto histórico del primer siglo. Sin embargo, el primero de ellos también
puede tender a "espiritualizar" el mensaje del Apocalipsis, algo parecido al
enfoque idealista. La segunda tendencia, enfocada en el primer siglo, puede
acercarse al enfoque preterista. Ambos énfasis, aunque quizás
involuntariamente, se han alejado del historicismo clásico. La tendencia de
muchos estudiosos adventistas de Apocalipsis en los últimos años parece estar
lejos del método historicista.
Jon Paulien insiste en que la recuperación del
1
Ibid.
133
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
significado original que el texto de Apocalipsis tuvo para
con los primeros lectores hace más claro el sentido de las
verdades que debemos extraer hoy1.
Pero “sin negar la valiosa contribución de los enfoques bíblicos
teológicos y bíblico-exegéticos, parece que la identidad Adventista está más
directamente enraizada en la interpretación historicista de las profecías de
Daniel y Apocalipsis. Es el cumplimiento historicista de las profecías en fechas,
eventos y poderes religiosos y políticos específicos lo que afirma la identidad
Adventista como pueblo divinamente suscitado con la misión de proclamar la
"verdad presente" al mundo, lo cual fue confirmado mediante el don de
profecía manifestado en Ellen G. White. Por el contrario, una desviación del
método historicista contribuye a la pérdida de la identidad adventista como un
pueblo con una misión en el mundo” .
2
Algunos comentarios recientemente publicados intentan un enfoque
holístico, o ecléctico, según algunos lo han catalogado. Al comentar un texto lo
analizan exegética, teológica, histórica y espiritualmente . La porción histórica
está, pero se le da un tratamiento más bien tangencial. Podría decirse que el
resultado es similar al que se tendría escribiendo un comentario de los
evangelios.
3
Cambio de Enfoques en el Transcurso del Tiempo
Desde 1970, entonces, el énfasis en la interpretación ha
sido múltiple, ya no histórico como en el período dominado por
Smith, ni teológico como cuando el Comentario Bíblico
1
George Reid (Ed.), Compreendo As Escrituras: Uma Abordagem
Adventista (Engenheiro Coelho, SP: Unaspress, N.D.).
2
Ibid., 270,271.
3
Zdravko Stefanovic, Daniel: Wisdom To The Wise: Commentary On
The Book Of Daniel (Nampa, Idaho: Pacific Press Pub. Association, 2007).
134
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
Adventista hizo lo propio, sino más bien exegético y variado. Las
publicaciones de Kenneth Strand, quien propone un abordaje
hermenéutico literario-estructural, las conferencias bíblicas de
1974 y las reuniones de Glacer View suscitaron el desarrollo de
variadas y numerosas publicaciones1.
Condiciones Sociológicas Para el Enfriamiento Apocalíptico
Michael Barkun estudia los movimientos actuales que
vinculan teorías proféticas y especulativas, y afirma que pese a
que las mismas parezcan bizarras no por ello son inocuas o
indignas de escrutinio, dado que generan nuevas ortodoxias de
devastadores efectos2. Es probable que en el sincero interés de
diferenciarse de los que generan especulaciones en base al mal
uso de la profecía bíblica esté licuando o diluyendo el mensaje
histórico-profético del movimiento adventista. Pero el mismo
Barkun diferencia al movimiento millerita de los demás al
afirmar que este movimiento careció de elementos especulativos,
y mantuvo buenos vínculos con el resto de la sociedad hasta
muy cerca de la fecha del gran chasco3. Ocurre que el valor de
los milleritas para enfrentar el mundo de sus días quizá no sea el
de esta generación.
1
Quispe, Zubieta, y Cárdenas, The Apocalypse in Seventh-Day Adventist
Interpretation.16.
2
Michael Barkun, A Culture Of Conspiracy: Apocalyptic Visions In
Contemporary America (Berkeley, Calif.: University Of California Press, 2003).,
189.
3
Ibid., 9.
135
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
Louis Were reaccionó ante la especulación profética de
sus días1, encauzando la corriente hacia un enfoque cristológicoeclesiológico, el cual fue enfatizado por dos décadas2. En la
actualidad este enfoque es solo uno de tantos, y conviven
múltiples enfoques diferentes, algunos de ellos combinando a su
vez elementos diversos de diferentes perspectivas3. Aunque
1
“Un predicador, tratando de explicar Apocalipsis 14:20 afirmó que
los 1.600 estadios equivalían a 200 millas (lo cual es correcto ), y que,
viajando en automóvil de Jerusalén a Meguido se sorprendió al observar que
el velocímetro registraba exactamente 200 millas. Esto le hacía pensar que en
la gran Armagedón habría un río de sangre literal, a 200 kilómetros de largo,
y entre cinco y seis pies de profundidad”. Ver J.A. Stevens, «Fantastic
Theories and Interpretations», Ministry Magazine, accedido 1 de abril de 2015,
https://www.ministrymagazine.org/https://www.ministrymagazine.org/archi
ve/1940/07/fantastic-theories-and-interpretations.
2
Este tensión adventista entre especulación y cautela es reconocida
es descripta de la siguiente manera desde una perspectiva ajena a la
denominación: “La Primera Guerra Mundial produjo una avalancha de
declaraciones apocalípticas en publicaciones como Signs of the Times, y
Watchman Magazine, en las cuales se prestó especial atención al papel de
Turquía en el conflicto, un país vinculado con el "rey del norte " de Daniel
11. Algunos adventistas especularon que la guerra podría ser un paso hacia el
Armagedón, pero otras voces advirtió contra afirmaciones proféticas
específicas” Bernard McGinn, John J. Collins, y Stephen Stein, The
Continuum History of Apocalypticism (Bloomsbury Publishing USA, 2003).,
507.
3
Hector Urrutia, Las Bestias De Apocalipsis (Santiago, Chile: Doblebe
Impresiones, 2014). ,7. Como A. Hernández cabe preguntarse qué tipo(s)
de diversidad pueden ser aceptables sin perder o poner en peligro la
identidad teológica y escatológica de la Iglesia. Abner F. Hernandez,
«Adventist Eschatological Identity and the Interpretations of the Time
Periods of Daniel 12:11-12», AUSSJ: Andrews University Seminary Student
136
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
estamos lejos de la especulación a la que reaccionó Were y de la
cual advierte Barkun, se corre el peligro de diluir demasiado el
mensaje histórico-profético que hizo del movimiento adventista
lo que es. La excesiva cautela resultaría en ese caso tan mala
como la excesiva especulación.
Escatología Vs. Responsabilidad Social
En la actualidad algunos comienzan a criticar las
expectativas escatológicas porque ocupan más a las personas en
el mundo venidero que en el presente, y descuidan la
responsabilidad social que demanda un mundo con problemas
de explosión demográfica, agotamiento de los recursos naturales,
escalada en el armamento y calentamiento global1. Se argumenta
que la falta de respuestas y compromiso en este sentido acarreará
Journal 1, n.o 1 (1 de febrero de 2015),
https://www.andrews.edu/openjournal/index.php/aussj/article/view/3.,84.
1
La razón de este desinterés en la responsabilidad social se explica en
que la rigidez con que los adventistas han mantenido su panorama
apocalíptico en el siglo XX contribuyó a una estrechez de la visión que ha
limitado las maneras en las que han actuado por la libertad. Preocupados por
las leyes dominicales, han tenido poco que decir acerca del desempeño
americano en materia de derechos humanos en su política exterior, o en
relación con la radicalización política, los derechos de las mujeres y las
minorías raciales. Las penetrantes críticas acerca de los desvíos
gubernamentales de los ideales de la nación, tal como se encuentran en las
protestas del siglo XIX contra esclavitud y el imperialismo eran raramente
expresadas un siglo después. Douglas Morgan, «Adventism, Apocalyptic, and
the Cause of Liberty», Church History 63, n.o 2 (1 de junio de 1994): 249.
137
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
la tan temida tribulación sobre el mundo que comparten tanto
creyentes como incrédulos1.
Como se ve la presión de algunos pensadores en relación
con el compromiso social están produciendo una re-evaluación
de los énfasis distintivos de la escatología adventista. Siendo que
el tiempo se estira y el planeta y la sociedad se degradan, ¿es aún
relevante el mensaje profético de la Iglesia Adventista? ¿No debe
ser “aggiornado” o re-enfocado? De hecho algunos pensadores
adventistas “progresistas” sostienen que de la misma manera en
que la iglesia superó sus interpretaciones proféticas erróneas,
debe mantener la verdad “presente o actualizada”, dando un
mensaje directo en relación con los problemas del mundo
presente2.
Pero, en verdad, la tensión adventista con la sociedad ha
ido pendulando. Marcó sus mismos inicios, cuando el
adventismo desafió el sueño americano del siglo XIX3,
desarrollando una identidad única en su relación con la
República y la escatología de sus días. Sería este grupo y no la
nación americana el vehículo de la redención mediante la
presentación y promoción de un nuevo estilo de vida, una
experiencia diferente y una nueva señal de la alianza. De esta
manera los adventistas del séptimo día rechazaron el sueño
1
Martin Ballard, End-Timers: Three Thousand Years Of Waiting For
Judgment Day (Santa Barbara, Calif: Praeger, 2011).205,206. Es de notar que
algunas voces adventistas critican que el proyecto de distribución mundial del
Conflicto de los Siglos costara diez millones de dólares más que el
presupuesto anual de la agencia humanitaria adventista (ADRA). Osborn,
«The Theopolitics of Adventist Apocalypticism».,249.
2
Loren Seibol, «A Dinamic Theology», Spectrum, 2 de febrero de
2012, http://spectrummagazine.org/node/3779.
3
Osborn, «The Theopolitics of Adventist Apocalypticism».,235.
138
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
americano y usurparon el papel redentor de la nación. Las
alternativas al sueño americano forjaron una identidad peculiar:
(1) políticamente, con un marcado escepticismo con respecto a
la política pura y una forma intencional de retirada política; (2)
socialmente, mediante la creación de una nueva búsqueda de la
felicidad en un sistema alternativo destinado a actuar como un
puerto seguro para una experiencia social auténtica; (3)
religiosamente, mediante el desarrollo de una plataforma
teológica sólidamente diseñada para proporcionar un marco
práctico para una nueva experiencia religiosa, donde el
desarrollo personal, el autocontrol y la templanza eran vistos
como ingredientes clave; y (4) escatológicamente, al desafiar los
paradigma postmilenialistas tan populares y la adopción de una
visión del mundo radicalmente premillennialista1.
La presión de la sociedad menguó paulatinamente una
vez que la distinción entre pre y postmilenialismo, tan
bruscamente dibujada en las primeras décadas del siglo XIX, se
hizo cada vez más borrosa por la segunda mitad de la década del
siglo XIX. Varios factores parecen responsables de la
convergencia: en primer lugar, las lecturas premilenialistas del
texto bíblico fueron recuperando el respeto intelectual. Además,
la confianza en el mejoramiento humano gradual se había
convertido en un virtual artículo de fe entre los estadounidenses
de todas las creencias religiosas. Por último, e irónicamente, el
1
Sorin Petrof, «The Eschatological Identity of Adventism: A
Paradigm Shift in the 19th Century America», accedido 29 de marzo de
2015,
https://www.academia.edu/11397183/The_Eschatological_Identity_of_Adv
entism_A_Paradigm_Shift_in_the_19th_Century_America.,16.
139
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
pesimismo en los círculos intelectuales y artísticos hizo de las
visiones catastróficas un lugar común y remanido1.
Desde finales del siglo XX y en los comienzos del XXI, la
sociedad vuelve a cuestionar al adventismo sobre cómo puede
transformar el mundo “socialmente” y ponerlo al servicio de lo
que quiere ser y de la manera en que anhela vivir2
Carmelo Martines sostiene que debe estudiarse la
manera en la que el remanente puede incorporar a su misión la
acción social cristiana sin abandonar su expectativa mesiánica y
escatológica3. Los reclamos de la sociedad y del adventismo
progresista deben ser escuchados, sin renunciar por ello al
enfoque original y distintivo de la denominación.
La misma dinámica de un adventismo cuya esperanza
escatológica ha motorizado numerosas iniciativas educativas,
sociales y de salud4 parece ser la base para el reclamo de un
1
Ronald Edsforth y Larry Bennett, Popular Culture and Political
Change in Modern America (SUNY Press, 1991).,35.
2
Marcelino Rivas, «Replanteamiento Crítico De La Ciencia A Partir
De La Hermenéutica», Avatares 8, N.O 24 (2005): 21
3
Carmelo Martines, El Remanente Fiel, Un Debate Contemporáneo
(Libertador San Martín, Entre Ríos: Universidad Adventista Del Plata,
2013).,184.
4
Thomas S. Bremer, Formed From This Soil: An Introduction to the Diverse History
of Religion in America (John Wiley & Sons, 2014).,294-296. R. Osborne
argumenta que “Sociológicamente, el rechazo adventista de la religión civil
estadounidense llevó a la denominación a imitar muchas de las funciones
sociales de los Estados Unidos mediante el desarrollo de una impresionante
red paralela de instituciones como escuelas, hospitales, y editoriales
orientadas a permitir que los adventistas vivan como un fiel "remanente"
140
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
compromiso cada vez mayor en este sentido. El dilema a resolver
es cuánto abocarse, y cuál es el límite entre las demandas sociales
y la misión peculiar y escatológica.
Situación De La Escatología Actual Según A. Treiyer
Alberto R. Treiyer advierte que la escatología adventista
está, en la actualidad, espiritualizando todo cumplimiento. No
hay que confundir la aplicación espiritual en el NT de las
profecías que provenían del AT, con un cumplimiento que
espiritualiza (siguiendo el método idealista actual en el mundo)
todo el contenido apocalíptico, haciendo vago el cumplimiento
histórico definido. Treiyer presenta los siguientes ejemplos
concretos.
a) 666: imperfección en lugar de Vicarivs Filii Dei.
b) Espiritualización del santuario celestial (tendencia), de tal
manera que se re-organiza el material del Apocalipsis según
conceptos que niegan dos cuartos y momentos del ministerio de
Jesús en ese santuario. Eso comenzó con Kenneth Strand en el
Apocalipsis quien supuso que en el Apocalipsis no hay dos
cuartos, sino uno solo; es seguido en la actualidad por Gerhard
Pfandl. Esa negación de la literalidad del santuario celestial
comenzó, independientemente del Apocalipsis, con Edward
Heppenstal, y de allí se extendió a todo el mundo en nuestra
iglesia. De hecho algunos críticos sostienen que el mensaje del
santuario fue una manera de salvar el mensaje adventista1.
dentro del vientre de la bestia sin ser completamente absorbido por ella”.,
Osborn, «The Theopolitics of Adventist Apocalypticism».239.
1
Fiona Bowie y Christopher Deacy, The Coming Deliverer: Millennial
Themes in World Religions (University of Wales Press, 1997).,167.
141
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
c) La espiritualización de los sellos y de las trompetas. Con
respecto a las trompetas, se espiritualiza la mayor parte de ellas
en cumplimientos filosóficos más que militares que reflejan los
juicios de Dios.
d) Las fechas proféticas de las trompetas son espiritualizadas
también. Roma deja de ser el objetivo de todos los juicios de las
trompetas. Se pierde el rumbo en relación con el propósito del
Apocalipsis, y de sus series proféticas. Esto se debe a que se
distraen con análisis terminológicos y figuras sin una teología
sana historicista que los guíe.
e) Babilonia pasa a ser una entidad universal y deja de estar
ligada necesariamente a Roma, sino que más bien se la vincula a
todo imperio o reino que se levante contra Dios. Se enfatiza el
espíritu de Babilonia que permea todos los reinos del mundo.
A. Treiyer concluye en que el mayor peligro que se
advierte es que se esté tirando por la borda la herencia profética
adventista, en una multiplicación de ideas y criterios que ponen
el énfasis en conceptos más que en cumplimientos históricos
concretos1.
La Interpretación Profética Idealista (No Ideal)
La escatología adventista está adoptando en la
actualidad, poco a poco, el método ideológico de
interpretación que proviene de otras teologías en boga en el
mundo cristiano. En lugar de buscar cumplimientos históricos
específicos y concretos de las profecías apocalípticas, muchos
están buscando cumplimientos idealistas, filosóficos o
1
Alberto Treiyer, “Contribuciones y Debilidades Escatológicas,” EMail Dirigido Al Autor, Feb. 5, 2015.
142
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
teológicos1, espiritualizando y debilitando de esta manera el
cumplimiento histórico. Poco a poco, todas las referencias
bíblicas simbólicas están siendo espiritualizadas, remodelando (o
aún vaciando) los mensajes apocalípticos de su aplicación
histórica definida. Cada vez que se quiere identificar el poder
(político, religioso, etc), claramente representado en una
determinada visión del libro del Apocalipsis, esos nuevos
enfoques les hacen recordar que esa visión tiene que ver con
conceptos más amplios, de tal manera que, en esencia, la visión
no se liga necesariamente a un evento
histórico específico.
Esto, se insiste, no tiene nada que ver con una aplicación
simbólica de algunas profecías del AT en el NT. Está claro que
algunos reinos del AT como Israel y Babilonia se vuelven
símbolos de la Iglesia y de Roma. En el NT, esos reinos se
proyectan a entidades y reinos específicos. El problema es que
esta nueva tendencia idealista se interesa más y más en
conceptos ideológicos en lugar de proyectar un cumplimiento
específico en eventos históricos definidos. Tiene que ver con
una espiritualización del cumplimiento apocalíptico. De este modo la
identificación escatológica de los sellos, de las trompetas y de las
bestias, se vuelve más y más ambigua, vaga, indefinida e
imprecisa. Permítasenos enumerar algunos ejemplos.
1
Stefanovic, Zdravko, «Adventist Review : Making Sense of Daniel
11», accedido 24 de marzo de 2015,
http://archives.adventistreview.org/article/2629/archives/issue-20091516/making-sense-of-daniel-11. Hernandez, «Adventist Eschatological
Identity and the Interpretations of the Time Periods of Daniel 12».,77-79.
143
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
A.Treiyer presenta el ejemplo de esta tentencia elusiva en la
interpretación apocalíptica, citando del libro de Ranko Stefanovic,
Revelation of Jesus Christ (Andrews University), pp.304-5:
“No es claro [es incierto] si Juan pretendió que cada detalle de
esta descripción sea interpretada”.
Treiyer recuerda que lo que los protestantes podían ver
con claridad en los siglos que nos precedieron, porque podían
entender definidamente el propósito de las trompetas y del libro
del Apocalipsis en general, varios teólogos adventistas no
pueden verlo hoy más. Se consideran orgullosamente a sí
mismos como “exégetas”. Pero, ¿cuál es el trasfondo real de esta
nueva tendencia que se aleja de nuestro legado profético? La
adopción de modelos teológicos evangélicos modernos tanto
como su método interpretativo idealista que se interesa más en
conceptos y mensajes desencarnados de su cumplimiento
histórico.Olvidan que nuestra iglesia nació con el legado
historicista protestante el que, además, fue confirmado por Dios
mismo mediante el Espíritu de Profecía. Pero esta confirmación
celestial está siendo desconsiderada, si no completamente, en
forma parcial.
En relación a la espiritualización del santuario celestial
Treiyer lamente que algunos vean santuarios en todos lados, y
universalicen el santuario divino. Por ejemplo, algunos toman
el Jardín del Edén como un templo para hacer a Eva también
una sacerdotisa como presuntamente lo habría sido Adán, en
igualdad con él, digna de un llamado actual para ser ordenada al
ministerio pastoral. Otros tratan de comparar el Monte Sinaí
con el tabernáculo del desierto. Otros aún proyectan la imagen
del templo a la ciudad celestial entera, olvidando que Dios es el
templo de esa ciudad, no la ciudad, etc. ¿Qué tiene que ver todo
eso con el modelo que Dios dio a Moisés? ¿Por qué se juega con
144
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
imágenes y términos que distraen de los mensajes verdaderos
que están comprendidos en el evangelio del santuario celestial?
En todos estos enfoques espiritualizadores, el claro
testimonio del Espíritu de Profecía es descuidado. A veces se
recurre a algunas de sus declaraciones, desprovistas de su
verdadero contexto, y sin que se den el trabajo de juntar todo lo
que Elena de White escribió sobre una visión apocalíptica en
particular.
Nuestro legado profético es de esta forma tirado por la
borda mediante la introducción de ideas y criterios que ponen el
énfasis en conceptos más que en cumplimientos históricos
concretos. Al espiritualizarse el cumplimiento profético, todo se
torna cada vez más vago e impreciso.
“Tinieblas espirituales han cubierto la tierra y densa
oscuridad las naciones… Hay en muchas iglesias escepticismo e
infidelidad en la interpretación de las Escrituras… El
razonamiento humano y las imaginaciones del corazón humano están
socavando la inspiración de la Palabra de Dios, y lo
que debiera ser aceptado de por sí, se cubre con una nube de
misticismo. Nada permanece en líneas claras y distintas, sobre una
base de rocas. Esta es una de las señales distintivas de los últimos
días” (1 MS 15).
Treiyer pide ser contado entre los que se mantienen
firmes en lo que los antepasados creyeron, para estar más
confiado en la misión y dirección profética divina de nuestra
iglesia1.
1
Alberto Treiyer, «El Peligro Más Grande en Nuestra Interpretación
Apocalíptica», febrero de 2015.
145
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
Símbolo Vs. Alegoría
Es probable que algunos intérpretes actuales estén
confundiendo símbolo con alegoría. La hermenéutica adventista
ya ha establecido la diferencia entre ambos, pero logró
comprenderla a un alto costo. Por algo en su el libro “O Israel de
Deus Na Profecía”, Hans K. LaRondelle afirma que “contra toda
espiritualización o alegorización abstracta, afirmamos un
cumplimiento literal e histórico de la profecía
veterotestamentaria. Deberíamos ser cuidadosos, con todo, para
no quedar atrapados en un falso dilema, como si tuviésemos
que elegir entre dos posiciones extremas: literalismo o
alegorismo”1. Las interpretaciones especulativas de la profecía,
que convirtieron lo simbólico en alegórico, obstaculizaron la
evangelización y provocaron apostasías. Vale mantener siempre
presente la diferencia entre ambos.
¿Debe Actualizarse el Adventismo?
Quienes soplan vientos de cambio lo hacen por razones
hermenéuticas, misionales y teológicas, dejando de insistir en los
aspectos apocalípticos, proféticos, escatológicos y apologéticos
que caracterizan la denominación desde la época de sus
pioneros2. Quizá la idea subyacente sea que el perfil original del
1
P. 73.
2
Carmelo Martines, El Remanente Fiel, Un Debate Contemporáneo
(Libertador San Martín, Entre Ríos: Universidad Adventista Del Plata,
2013).,163.
146
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
adventismo fue un subproducto de sus tiempos más que de la
intervención divina o la revelación profética. En ese caso, el
problema a discutir sería ante todo ontológico. ¿Qué es, en
definitiva, el adventismo? ¿Cómo surgió? ¿Ha quedado desfasado
y desactualizado? ¿O está fundamentado sobre bases más sólidas
que el devenir de los tiempos y los cambios socio-culturales?
En 1976 una serie de Spectrum , “Escatología Adventista Hoy ", sugirió un
revisionismo crítico del mensaje adventista a fin de tener más atractivo para el
mundo escatológico contemporáneo. Jonathan Butler, argumentó que
la misma fe apocalíptica, sin duda, puede ser condenada a la obsolescencia . ¿Es
ese el peligro del adventismo? Trataremos de responderlo en el próximo capítulo.
1
1
Stephen Bohr, Futurism’s Incredible Journey (Amazing Facts,
2009).,121.
147
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
CAPÍTULO V.
EL HISTORICISMO: ¿VIGENTE O CADUCO?
Continuidad del historicismo millerista en la IASD
Durante el siglo XIX una intensa agenda nacional, social,
económica, política y religiosa en Norteamérica anuló la sombría
visión puritana acerca de la pecaminosidad e incapacidad
congénita de la humanidad para producir su redención y giró
hacia un rumbo más racionalista y perfeccionista que persiguió
un potencial ilimitado en una era de esperanza escatológica. La
confrontación entre la tesis milenarista optimista y la opuesta
comprensión pesimista que el millerismo tenía de la historia
allanó el camino para una nueva síntesis escatológica en la
forma más notoria e innovadora del movimiento adventista1.
La influencia de Miller en el enfoque hermenéutico de
algunos grupos cristianos contemporáneos ha sido poco
reconocida en el pasado. Sin embargo, su influencia es
omnipresente entre las denominaciones que continuaron
empleando un enfoque historicista en la interpretación de la
Biblia, en particular la Iglesia Adventista del Séptimo Día…ellos
se ven a sí mismos como “el pueblo del Libro”. El enfoque
dominante en la hermenéutica bíblica dentro de la Iglesia
Adventista del Séptimo Día refleja el enfoque adoptado por
William Miller y ha sufrido pocos cambios desde que éste
publicó por primera vez sus principios en 1840. En el siglo XXI
los Adventistas del Séptimo Día siguen haciendo hincapié en los
principios milleritas tales que "la Escritura interpreta la
1
Petrof, «The Eschatological Identity of Adventism».,1.
148
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
Escritura"; "La Biblia es perspicaz "; la importancia de la lectura
literal de las Escrituras; la armonización de los pasajes de la
Biblia; y la necesidad de una comprensión "espiritual"1.
La Iglesia Adventista del Séptimo Día, desde su
formación hasta el día de hoy, se ha basado en el método
historicista de interpretación bíblica, sobre todo en referencia a
los libros de Daniel y Apocalipsis2. Como Reimar Vetne señala:
"Hoy la Iglesia Adventista del Séptimo Día es la única
denominación oficial importante que sigue el enfoque
historicista". Mientras que algunos recientes eruditos
adventistas actuales han cuestionado la aplicación simplista de
métodos historicistas de interpretación, particularmente a la
interpretación de Apocalipsis, el método sigue siendo
dominante en la corriente principal de los Adventistas del
Séptimo Día.
Ese compromiso se ha reforzado en su último congreso
mundial celebrado en 2010. Al votar sus líderes mundiales, la
Iglesia Adventista acentuó su fundamentalismo, a fin de ajustar
su compromiso con la cosmovisión apocalíptica basada en la
hermenéutica historicista del Apocalipsis, rechazada por la
mayoría de los teólogos y biblistas3. De hecho al rechazarse el
historicismo, si es que alguna vez sucediera, se alterará
radicalmente el adventismo al debilitar o destruir su propia
1
Crocombe, “„A Feast Of Reason‟: The Roots Of William Miller‟s
Biblical Interpretation And Its Influence On The Seventh-Day Adventist
Church.”,206.
2
Spectrum: Journal of the Association of Adventist Forums (The
Association, 2004).,vol. 32, 44.
3
Ronald E. Osborn, «The Theopolitics of Adventist Apocalypticism:
Progressive or Degenerating Research Program? », Modern Theology 30, n.o 2
(abril de 2014): 219-50, doi:10.1111/moth.12077., 220.
149
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
identidad. Por lo tanto, se podría esperar que la oposición
mayoritaria de la iglesia mundial a cualquier intento de
reemplazar nuestro sistema de interpretación profética1.
Una razón obvia para el uso continuado de los métodos
historicistas es que ciertas creencias adventistas no pueden ser
apoyadas desde el texto bíblico si se emplea cualquier otro
enfoque. Lo más obvio de ellos es la continua importancia del
22 de octubre 1844. Al igual que Miller, los adventistas
contemporáneos calculan esta fecha de Daniel 8:14 utilizando el
principio de día por año2. Aunque el fechado profético3 ha sido
1
Angel Rodríguez, «Wrestling with theological differences», Ministry
Magazine, accedido 31 de marzo de 2015,
https://www.ministrymagazine.org/https://www.ministrymagazine.org/archi
ve/1999/04/wrestling-with-theological-differences.
2
Crocombe, «“A Feast of Reason”: The Roots of William Miller‟s
Biblical Interpretation and its influence on the Seventh-day Adventist
Church.»,200.
3
Solo un puñado de adventistas se mantuvo en las fechas
establecidas después del Gran Chasco. De ellos surge el adventismo del
séptimo día. McGinn, Collins, y Stein, The Continuum History of
Apocalypticism.,500. “A pesar de su notoriedad, el Millerismo sigue siendo en
algunos aspectos un camino diferente en la historia de la creencia profética
de Norteamérica. La cronología de Miller involucra un enfoque historicista
arcaico que desapareció casi por completo después de 1844. Además, con
excepciones ocasionales, los escritores de profecía posteriores evitaron la
tentación del ajuste de la fecha, citando las advertencias de Jesús halladas en
Mat. 24:36 y Hechos 1: 7. De hecho, la secuela más duradera del Millerismo,
aparte de la Iglesia Adventista del Séptimo Día, ha sido el ejemplo
contundente acerca de los peligros del fijado de fechas”. Paul Boyer, When
Time Shall Be No More: Prophecy Belief in Modern American Culture (Harvard
University Press, 2009).,82.
150
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
considerado peligroso1, es esencial para el historicismo, y ha sido
preservado casi únicamente por los adventistas del séptimo día2.
Daniel Y Apocalipsis En La Genética Adventista
Daniel y Apocalipsis están en la genética adventista,
desde sus mismos orígenes milleristas3. Al definir el adventismo,
Frank Holbrook declara lo siguiente:
“¿Qué es un Adventista del Séptimo Día? Una
descripción común es que un adventista del séptimo día
es un cristiano que observa el sábado y se prepara para la
segunda venida del Salvador. Eso es correcto, pero el
panorama es más amplio. El verdadero marco distintivo
adventista es su comprensión de las profecías de Daniel y
Apocalipsis. En estas profecías apocalípticas, los
adventistas hallan descriptos el momento en el que
viven, su identidad y su misión”4.
Factores Que Explican El Éxito Del Movimiento
Adventista
Entre los factores externos que George Knight
enumera para el éxito del movimiento adventista se
encuentran los siguientes:
1
John Joseph Collins y John J. Collins, The Oxford Handbook of
Apocalyptic Literature (Oxford University Press, 2014).,10.
2
Robert C. Fuller, Naming the Antichrist : The History of an American
Obsession (Oxford University Press, 1995).,106.
3
Josep Antoni Alvarez, El Cristianismo: Unidad y Diversidad
(Barcelona: Aula7Activa, 2014). ,129.
4
Holbrook, «What Prophecy Means To This Church».,21
151
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
1. Combinación de reavivamiento, milenarismo
y pietismo.
2. Factores ambientales como crisis climáticas y
económicas.
3. Ortodoxia doctrinaria1.
Los factores internos son los siguientes:
1. Noción de la verdad, la cual apela a la razón
de las personas.
2. Enseñanzas distintivas, que hacen clara la
diferencia entre el mundo y la iglesia.
3. Estructura organizativa enfocada en la
misión.
4. Conciencia de una misión profética, para
terminar lo comenzado por el movimiento
millerita2.
5. Emplear todos los medios disponibles para el
desarrollo de la misión
1
George R. Knight, If I Were The Devil: Seeing Through The Enemy’s
Smokescreen: Contemporary Challenges Facing Adventism (Hagerstown, MD:
Review And Herald Pub, 2007).,236,237.
2
Ibid., 238-245.
152
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
6. El liderazgo de Elena de White1.
Knight advierte que si el adventismo rinde la
visión profética de sí mismo y olvida su herencia
profética estará apagando la “fiebre milenarista” que le
dio éxito y desactivará su misión2.
El Historicismo Según H. Douglass
Al definir el historicismo adventista, Herbert Douglass declara que
“básicamente, los adventistas enseñan la posición historicista clásica promovida,
en principio, por la mayoría de los padres de la iglesia y la mayoría de los
reformadores. Esta posición combina ciertos aspectos del preterista, historicista e
interpretaciones futuristas. Hay elementos en Daniel y el Apocalipsis, por
ejemplo, que se cumplieron durante la época del escritor de la Biblia; hay otras
partes que se cumplieron con la desintegración del imperio romano y el posterior
reinado del papado; hay elementos proféticos cuya aplicación aún está en el
futuro. Pero en la asignación de algunos elementos futuros de la profecía, la Iglesia
Adventista no cae en la falacia de bien intencionados pre o post-tribulacionistas
1
“Algunas comunidades fundadas en períodos apocalípticos
anteriores continuaron su crecimiento constante, como por ejemplo los
adventistas del séptimo día, liderados por Elena G. de White. Ella pasó sus
últimos años, después de regresar de sus viajes por Europa y Australia, dando
conferencias, escribiendo y participando en el gobierno de la comunidad.
Hizo hincapié en el evangelismo y el cumplimiento de la comisión de Cristo
de ir por todo el mundo con el evangelio. Los adventistas utilizan todos los
medios a su alcance para lograr ese objetivo, incluida la prensa y la radio”.
McGinn, Collins, y Stein, The Continuum History of Apocalypticism.,507,529. ,
John M. Court, Approaching the Apocalypse: A Short History of Christian
Millenarianism (I.B.Tauris, 2008).cap XI.
2
Knight, If I were the devil.., 248.
153
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
que requieren, por ejemplo, un período de siete años de la tribulación y la
emergencia de Israel como último signo significativo día” .
1
En esta definición, quizá algo confusa, Douglass parece afirmar lo que no se
propuso decir, habiendo sido un reconocido historicista. Es cierto que el
historicismo estudia las intervenciones de Dios a lo largo de la historia. Eso no
significa que el historicismo sea un compendio de preterismo, historicismo y
futurismo (lo que hoy se llama eclecticismo). La historia entera da cuenta de la
participación divina, pero estudiar eventos desde la perspectiva historicista no
significa ser preterista “por un rato”, así como estudiar profecías no cumplidas no
demanda ser futurista. Que el eclecticismo sea un enfoque promovido hoy para
el estudio de la profecía fue anticipado, quizá sin quererlo, por Douglass.
La Contribución Determina El Enfoque
“Los Adventistas del Séptimo Día son un pueblo con un mensaje especial
para un momento especial. Ninguna otra iglesia cristiana ha tenido este mensaje
en el pasado y no hay otra iglesia que lo tenga hoy en día. Por estas simples
razones los adventistas tienen una contribución única que hacer en los estudios
teológicos actuales de la escatología. Por lo tanto debemos utilizar enfoques
únicos para abordar al mundo; estableciendo las razones distintivas para explicar
cuándo y cómo Jesús volverá. Tal imagen del futuro estará en marcado contraste
con la expuesta por otros que ahora proclaman la inminencia o incluso la
cercanía del Advenimiento” .
2
Validez De Los Nuevos Enfoques Hermenéuticos En El Estudio
1
Herbert Douglass, “The Unique Contribution Of Adventist
Eschatology” (Presented At The North American Division Bible Conference,
Review And Herald, 1974). ,7
2
Edilson Valiante, «Principais Distracoes A Escatologia Adventista»,
Parousia, segundo semestre de 2001. 33.
154
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
Del Apocalipsis
“Al parecer el énfasis histórico tiende a descuidar algunos aspectos del texto
bíblico, y por otro lado, que los énfasis teológicos y exegéticos han tendido a pasar
por alto algunos aspectos de la aplicación histórica. Para corregir este énfasis
defectuoso, algunos estudiosos recientes han enfatizado la exégesis para
interpretar el Apocalipsis. Sin embargo, existe un problema importante y es la
aplicación al Apocalipsis de los mismos principios exegéticos que se usan en la
interpretación de los libros bíblicos que no son apocalípticos. La exégesis de los
libros no-apocalípticas se centra en el momento en el que el anuncio profeta
(análisis las palabras, las frases, contexto histórico, entorno geográfico, etc.) y a
partir de ello aplica el significado para los lectores de hoy. Pero, en cuanto a los
libros apocalípticos, ¿qué pasa con el tiempo transcurrido entre el profeta y los
lectores de hoy en día? La profecía predictiva se da especialmente para los lectores
que viven en el momento del cumplimiento de la profecía, o de lo contrario, de
lo contrario en que se notará el elemento clave de la misma? Los historicistas
adventistas del séptimo día buscan descubrir el momento de la realización
histórica de la profecía, con el fin de interpretar la profecía en el contexto de su
cumplimiento histórico… Desde la organización de la Iglesia Adventista del
Séptimo Día, hace 150 años, los eruditos adventistas parecen haber mantenido el
consenso general sobre la interpretación del Apocalipsis. Es sobre todo en el
tercer periodo, y sobre todo con el énfasis exegético, que las opiniones están
divididas. Tres autores (Maxwell, LaRondelle y Paulien) parecen haber influido
en este cambio, aunque no todos ellos publicaron un comentario versículo por
versículo sobre el Apocalipsis” .
1
Cabe peguntarse hasta si los enfoques históricos, teológicos y exegéticos son
complementarios o excluyentes. En el caso que sean complementarios ¿cuál
debiera ser el enfoque principal, y cuales los complementarios? Si la eclesiología y
misiología adventista dependen del historicismo, entonces cualquier enfoque
1
Quispe, Zubieta, y Cárdenas, The Apocalypse in Seventh-Day Adventist
Interpretation.266,267.
155
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
debiera tender al fortalecimiento del enfoque principal, no a su debilitamiento.
Equilibrio En La Exposición Escatológica
Al estudiar “el sermón escatológico de Jesús…es evidente
la necesidad de equilibrio en la exposición de la escatología
bíblica. Debe haber armonía entre los signos de los tiempos y la
preparación adecuada para la parusía.”1.
Historicismo, Misión e Iglesia
La apocalíptica bíblica fue la matriz en la que los
adventistas formaron su sentido de identidad y misión en
relación con las fuerzas religiosas y políticas circundantes,
interpretando las profecías de Daniel y Apocalipsis según la
escuela historicista, entendiendo que las visiones apocalípticas
de la Escritura constituyen un avance cronológico codificado de
la historia del conflicto entre el pueblo de Dios y las fuerzas del
mal, que se extienden desde la época del escritor bíblico hasta la
segunda venida de Cristo2.
“Los pioneros, al adoptar el método histórico para la
interpretación de las profecías…percibieron a un Dios actuando
en toda la historia y hasta el fin de la misma, llamando y
levantando al remanente final, comunicándose con El mediante
el don profético y comisionándolo para una obra de
restauración de las verdades olvidadas y de la predicación del
1
Edilson Valiante, “Principais Distracoes A Escatologia Adventista,”
Parousia, Segundo Semestre 2001.,53
2
Douglas Morgan, «Adventism, Apocalyptic, and the Cause of
Liberty», Church History 63, n.o 2 (1 de junio de 1994): ,236.
156
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
evangelio a todo el mundo…su preocupación fundamental
consistió en un compromiso de participación activa como
testigos de Dios en los momentos finales de la historia”1. De esto
se desprende que entrelazado al entendimiento historicista de
las profecías se hallan aspectos teológicos, eclesiológicos y
misiológicos. Cualquier cambio de enfoque, en consecuencia,
afectaría inseparablemente los demás aspectos. Cabe
preguntarse, en ese caso, cuál sería el costo o beneficio teológico,
eclesiológico y misiológico para una innovación semejante.
Es irónico descubrir que desde un marco no adventista
se elogia lo que algunos adventistas pretenden actualizar, revisar
o modificar. “La adhesión a su interpretación de la historia ha
ayudado a los adventistas mantener un sentido claro de misión e
identidad en el juego de las fuerzas religiosas y políticas
circundantes. La convicción de ser especialmente colocados en
la historia como un remanente fiel, llamado a defender los
"mandamientos de Dios y la fe de Jesús" ha contribuido a la
capacidad de resistencia de su compromiso con su misión
fundamental2. De manera que el mundo reconoce que el secreto
de la perdurabilidad del adventismo está en ser fiel a su esencia.
La Evangelización Y La Correcta Interpretación De La Profecía
En la p. 77 de su libro evangelístico Europe and
Armageddon se encuentra un ejemplo de cómo Louis Were
relacionaba la evangelización con las profecías. Si bien es cierto
que los adventistas han utilizado la incertidumbre generada por
1
Carmelo Martines, El Remanente Fiel, Un Debate Contemporáneo
(Libertador San Martín, Entre Ríos: Universidad Adventista Del Plata,
2013).,71
2
Morgan, «Adventism, Apocalyptic, and the Cause of Liberty».,249.
157
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
la guerra como una oportunidad para el evangelismo1, Were no
consideraba lícito transmitir un mensaje no garantizado por la
1
Campbell, «The 1919 Bible Conference and Its Significance
for Seventh Day Adventist History and Theology».,28. “El enfoque de
"crisis" de los evangelistas adventistas durante los años de la guerra logró
atraer una avalancha de nuevos conversos. El incremento anual de
membresía alcanzó un pico en 1917 de casi el 10 por ciento con respecto al
año anterior”.Howard Weeks, «Witnesses to a World at War», Ministry
Magazine, accedido 1 de abril de 2015,
https://www.ministrymagazine.org/https://www.ministrymagazine.org/archi
ve/1966/04/witnesses-to-a-world-at-war. Este enfoque, por lo tanto, era lo
que se recomendaba a los pastores y evangelistas. Ver S.G. Joyce, «Adapting
Evangelism to War», Ministry Magazine, accedido 1 de abril de 2015,
https://www.ministrymagazine.org/https://www.ministrymagazine.org/archi
ve/1942/11/adapting-evangelism-to-war. El tema de Armagedón, por su
interés candente en tiempos de guerra, se recomendaba predicar al momento
de transferir la audiencia del salón público al templo, o en los momentos en
que se consolidaba la audiencia, tanto en lugares populosos como rurales.
Ver Merle Mills, «Evangelistic Objectives And Technique: Transfer From
Hall to Church», Ministry Magazine, accedido 1 de abril de 2015,
https://www.ministrymagazine.org/https://www.ministrymagazine.org/archi
ve/1950/02/transfer-from-hall-to-church., J.W. Kent, «Preaching Our
Distinctive Message* No. 1», Ministry Magazine, accedido 1 de abril de 2015,
https://www.ministrymagazine.org/https://www.ministrymagazine.org/archi
ve/1937/04/preaching-our-distinctive-message. J.G. Cammack, «Reaching
Neglected Villages and Towns», Ministry Magazine, accedido 1 de abril de
2015,
https://www.ministrymagazine.org/https://www.ministrymagazine.org/archi
ve/1947/05/reaching-neglected-villages-and-towns.Tiempo después se
reconocía que promover tales temas ganaban un tipo de audiencia que no
perseveraría en el conocimiento de la Biblia. Harry Lundquist, «How to
Secure and Hold Attention», Ministry Magazine, accedido 1 de abril de 2015,
https://www.ministrymagazine.org/https://www.ministrymagazine.org/archi
ve/1968/02/how-to-secure-and-hold-attention.
158
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
Inspiración. Llamaba la atención de las profecías pertinentes a lo
que sí sucedía, pero clarificaba cuales sucesos contemporáneos
no se aplicaban a la profecía bíblica. Esto de alguna manera lo
diferenciaba de la tendencia generalizada de explotar
evangelísticamente todo suceso militar contemporáneo,
relacionándolo rápidamente con alguna profecía bíblica1. En el
afán evangelizador no todo sirve, ni todo vale. Lo que no
convence a los más exigentes, ni soportará la prueba de la
prudencia y el paso del tiempo, debe descartarse.
El evangelista y el intérprete de la profecía deben estar
alerta para ver las señales de los tiempos y llamar la atención de
las personas a las mismas, pero no pueden ver correspondencia
histórica donde no la hubiere2, ni predicar lo que la misma
Biblia no autoriza. De hecho la interpretación apocalíptica
adventista se ha desarrollado continuamente y ha cambiado,
siendo corregida a la luz de los acontecimientos (o, más a
menudo, a la luz de lo que no aconteció).3
Valor De Las Profecías En La Evangelización
1
Land, Adventism in America.,119.
Were, Europe And Armaggedon.77
3
Fritz Guy, Thinking Theologically: Adventist Christianity and the
Interpretation of Faith (Andrews University Press, 1999).,88. Una vez que se
corrigió la interpretación de Armagedón los principales evangelistas de la
iglesia la popularizaron. Ver Edward Cleveland, «The Leaping Frogs of the
Revelation», Ministry Magazine, accedido 1 de abril de 2015,
https://www.ministrymagazine.org/https://www.ministrymagazine.org/archi
ve/1968/02/the-leaping-frogs-of-the-revelation.
2
159
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
El adventismo lleva más de 150 años y el mundo erudito
ya ha apreciado varias tendencias escatológicas en su seno. Ven
que se ha perdido gran parte de su urgencia apocalíptica1; que
aboga por un premilenarismo claramente diferente; entre otros
matices. Lo explican aduciendo que es difícil para cualquier
movimiento mantener candentes sus creencias escatológicas. Se
reconoce el crecimiento en membresía; un mejor arraigamiento
en la sociedad y el establecimiento de muchas instituciones.
Todo este desarrollo no significa que los adventistas hayan
abandonado su escatología. Mientras que las creencias
escatológicas a menudo se han colocado en un segundo plano,
todavía siguen siendo enseñadas2. La iglesia es lo que es gracias a
sus enseñanzas escatológicas, y esconderlas sería privarse de sus
beneficios.
Declara A. V. Olsen: “Por un número de razones nuestro
mensaje es impopular, porque reclama una separación completa
1
En esto pueden haber incidido las críticas del resto del mundo
cristiano al enfoque kerigmático de la denominación. E. Hanganu declara
que “la obsesión adventista con las profecías escatológicas en Daniel y
Apocalipsis ha causado daños colaterales en los círculos adventistas. La
mayoría de sus reuniones evangelísticas parecen tener un enfoque singular,
que no es el evangelio, sino las extrañas bestias de Daniel y Apocalipsis. El
énfasis grandilocuente y triunfalista sobre los "eventos finales" y la
"inminente" segunda venida, que se considera la "verdad presente" ha
reemplazado al evangelio cristiano y causado el fracaso inexcusable en llegar
con el mensaje a un mundo hambriento de la verdad. Ver Hanganu,
«Adventist Historicism Reexamined And Critiqued Basic Draft»., 74.
2
Richard G. Kyle, Apocalyptic Fever: End-Time Prophecies in Modern
America (Wipf and Stock Publishers, 2012).,315.
160
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
del mundo con sus placeres, sus vicios y sus ambiciones.
Establece a sus seguidores aparte como peculiares, debido a la
modestia en el vestir y sus hábitos de temperancia en el comer y
beber. También los distingue debido a la observación de un
reposo diferente del resto del mundo cristiano profeso.
A pesar de estas características impopulares de nuestro
mensaje, se está haciendo un impacto en el mundo. Está
atrayendo la atención de multitudes y gana muchos conversos.
Uno de las excepcionales razones para ello es que se encuentra
en su precisión profética. Hay poder en las profecías, por la
manera que llegan a las personas. Bajo la influencia del Espíritu
que lleva a los hombres a humillarse ante Dios. Su valor en
nuestro trabajo nunca puede ser sobrestimado” 1.
Los adventistas de antaño siempre tuvieron en claro la
singularidad de su movimiento, y esa peculiaridad antes que
verla como una desventaja la estimaron grandemente2. Además,
en la interpretación y predicación de la profecía vieron un poder
especial, que daba relevancia y urgencia a su predicación, a la vez
que motivaba a los prosélitos a tomar una posición junto a ellos.
Esta tarea no ha caducado3.
1
Our Firm Foundation, Vol. 2 (Washington, 1953).,568.
“El crecimiento y el poder de la Iglesia Adventista del Séptimo Día
se debe a la hecho de que tiene creencias distintivas, dogmáticamente
establecidas, las cuales la iglesia siente que está divinamente comisionada
para proclamar. Hay un atractivo especial en el hecho de sentir que la verdad
divina se confía a la iglesia, y esto ha motivado un espíritu de sacrificio
especial para adelantar la proclamación”.James E. Bear, «Bible and modern
religions: The Seventh-Day Adventists», Interpretation 10, n.o 1 (1 de enero de
1956): 48.
3
Boyer, When Time Shall Be No More.,7. Compárese con la posición
de O´Leary acerca de la inviabilidad de la apelación profética al grueso de la
2
161
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
Pero el mundo ya no percibe tanta inminencia en la
evangelización adventista como antes. Se hace notar que
“aunque se retrata un escenario escatológico adventista sombrío,
para muchos evangelistas adventistas todavía esto es futuro. El
acceso irrestricto a las ventajas modernas, a los medios de
comunicación y la satisfacción con la buena imagen lograda por
sus instituciones en la sociedad, dejan ver cierto amoldamiento
al mundo actual”1. ¿Será que la institucionalización y las
comodidades actuales menguan el fuego de la inminencia en la
predicación del mensaje adventista?2
Pero el valor de las profecías no tiene que ver solamente con
la evangelización sino también con la identidad, confirmación y
crecimiento del creyente adventista3. Dado que el evangelismo
sociedad luego de 1844. Stephen D. O‟Leary, Arguing the Apocalypse (Oxford
University Press, s. f.).,208.
1
Robbins y Palmer, Millennium, Messiahs, and Mayhem.,215.
2
Precisamente esta tensión es vista como la clave del éxito adventista.
“El adventismo contiene elementos pre y postmilenialistas. A nivel teológico,
la tierra no será purificada hasta después del milenio, lo cual refleja en parte
al postmilenialismo. Pero la mayor confusión viene en el plano práctico. El
adventismo es premilenial pero se comporta como si fuera postmilenial. El
premilenialismo tiene una visión pesimista de la naturaleza humana, aunque
los adventistas del séptimo día mantienen una impresionante presencia
global. Su número ha aumentado significativamente. A nivel mundial, se ha
establecido muchas instituciones educativas, incluidas las universidades,
seminarios, escuelas secundarias y más de 4.500 escuelas primarias”. Este
equilibrio entre lo que se podría denominar “premilenialismo profético” y
“posmilenialismo institucional” es lo que ha desarrollado el movimiento a
escala global. Kyle, Apocalyptic Fever.,317.
3
“Las características duraderas del perfil adventista tomaron forma
en un crisol apocalíptico. A pesar de importantes modificaciones de tono y el
162
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
adventista enfatiza la escatología, los conversos suelen sentirse
atraídos por este tema. Sin embargo, cuando se unen a las
congregaciones adventistas, se encuentran con que sus pastores
suelen dar menos énfasis a los temas escatológicos que los
evangelistas1. En los países desarrollados la especialización
teológica adventista ha ido en detrimento del énfasis
escatológico clásico del adventismo2. Este importante descuido
quizá merme la identificación del creyente como siendo parte de
un pueblo peculiar y disminuya su compromiso con la
predicación de un mensaje especial y urgente.
Un Apocalipsis Diferente Del Anunciado Por El
Secularismo
En lugar de ridiculizar o ignorar los Milleritas,
haríamos mejor tratar de entender las fuerzas que
crearon el Adventismo y los resultados que le siguieron.
Un conjunto de teorías sobre la causa del
milenarismo mantiene que las visiones de destrucción
universal y renovación posterior apelan más a menudo a
las personas que se encuentran privadas material o
políticamente. Este despojo puede tomar la forma de la
énfasis, la interpretación de la historia que surgió en la década de 1850 y la
identidad particular y la misión que conlleva, no ha dejado de impulsar y
orientar a los adventistas a través de su historia. Se ha apuntalado la
persistencia de una identidad rigurosamente separatista”. Morgan,
«Adventism, Apocalyptic, and the Cause of Liberty».,239.
1
Robbins y Palmer, Millennium, Messiahs, and Mayhem.
Ibid., 216.
2
163
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
pobreza económica o de tiranía política, como el
colonialismo, por ejemplo; así que uno encuentra por
consiguiente milenarismo en cultos que prometen
riqueza para los salvados, en los movimientos de
liberación, o en las revoluciones sociales. Pero estas
teorías arrojan poca luz sobre el millerismo. Los
milleristas no se encontraban desposeídos ya sea material
o políticamente. No sólo no hay evidencia de pobreza
general entre los adventistas, sino que hay indicios
fuertes de que la mayoría de ellos estaban en una
posición cómoda. Sin embargo el anhelo pietista del
cielo, el hábito de contrastar la tristeza y el dolor terrenal
con la felicidad futura y la unión con Dios, sí hace ver
que se sentían espiritualmente privados. El millerismo
también tenía una tendencia liberadora que benefició a
los hombres y especialmente a las mujeres que
descubrieron por sí mismos un papel público activo a
través del adventismo, o que los liberó del autoritarismo
doctrinal de las iglesias formales.
El fervor se trasladó gradualmente a través del
país mientras la gente trataba de crear un nuevo sentido
de comunidad en su propio tiempo, una comunidad de
valores pietistas tradicionales. El millerismo ofreció la
esperanza de renovación cósmica y liberación del tiempo
profano. Con los valores tradicionales desintegrándose
delante de ellos, los adventistas rechazaron los valores
del mundo de una manera piadosa y amena.
El chasco no puso un fin permanente a este
proceso; sino que el fervor fue variando su ubicación.
Uno no necesita ser adventista para notar que la
164
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
apocalíptica no es ni primitiva ni poco creíble en esta era
nuclear donde las imágenes del Apocalipsis son
impresionantemente relevantes1. Si los catastrofistas
seculares aparecen como más racionales que sus colegas
religiosos también son más sombríos, ya que carecen de
la visión optimista de la redención humana. En
comparación su apocalipsis es más pobre, porque
presenta como la visión del fin de los tiempos un
páramo desolado, y esto empalidece al lado de la Nueva
Jerusalén en todo su esplendor2.
1
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fanáticos del adventismo no se pueden negar, pero han sido mínimos desde
sus inicios y no debieran empequeñecer el mensaje adventista para este
tiempo. Richard Connors y Andrew Colin Gow, eds., Anglo-American
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165
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
CAPÍTULO VI.
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
Las profecías son maravillosas, pero también
costosas. Toda profecía tiene un costo para el que las
conoce y el que las recibe. A lo largo de esta
investigación ha sido claro que los pioneros pagaron un
alto precio por ser el pueblo singular que la profecía
reclamaba. Smith pagó el precio del mensaje cuando sus
manos se ampollaban cortando las primeras Review, o
cuando permanecía escribiendo hasta las dos de la
mañana. J. White pagó el precio cuando, quemado por
su propio fuego, acortó su vida haciendo el mismo el
trabajo de tres personas. Were pagó el precio cuando
por sus posiciones correctas pero avanzadas fue
incomprendido y rechazado entre los suyos de la lejana
Australia. Incluso LaRondelle, invirtiendo su vida entera
en refinar el legado de Were. Y así cada uno de los
hombres que estudiaron, estudian y proclaman el
mensaje que Dios le confía a su pueblo en este tiempo.
No todos, sin embargo, están dispuestos a asumir
este elevado costo. Ningún hombre que no sea inspirado
recibe toda la luz junta, el mismo. La iglesia necesita
avanzar unida en el conocimiento de la Palabra de Dios y
en la luz que emane de ella. Uriah Smith abrió la brecha
en muchos sentidos, pero cometió errores que le
costaron lo suyo a la iglesia. Cuando estas limitaciones
fueron advertidas se postergó la resolución de las mismas
por temor al costo que representaran. Sin embargo, una
vez que las complicaciones fueron resueltas, la iglesia
166
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
resultó bendecida y fortalecida en el entendimiento de
las profecías.
Conforme avanza el tiempo, el mundo se degrada
y presiona de manera que todo se amolde a su antojo.
Cada vez será más costoso mantener la singularidad
esperada del remanente, y si se logra quizá sea al precio
del aislamiento y el desprecio creciente. Aunque algunas
voces del adventismo reclamen relevancia,
responsabilidad social, etcétera, si el adventismo
permanece fiel a su esencia siempre estará más
interesado en lo profético, escatológico y misiológico.
Otras cuestiones importantes tienen su lugar, pero Dios
se las ha confiado a otros grupos humanos como su
misión particular. Lo que el adventismo no cumpla no
será asumido por otro movimiento diferente.
En este tiempo se necesitan teólogos que
profundicen el historicismo e iglesias que lo prediquen
con renovado fervor. La salvación está más cerca que
cuando creímos, y el precio que se pague será
grandemente retribuido.
Porque Dios contó con hombres y mujeres que
pagaron el precio necesario fue que este movimiento se
levantó, se enderezó cuando se podía torcer, y
permanece vigente, creciendo entre los que aún pagan el
precio al ser llamados y salir de Babilonia. Al escribir
esto recuerdo la historia de Egidio, quien al comprar un
Conflicto de los Siglos a un colportor, por el año 1909 en
San Jerónimo, provincia de Santa Fe, fue expulsado de
su hogar por su decisión de empezar a guardar el sábado.
167
EL PRECIO DE LA PROFECÍA
Siendo inmigrante, sin familia ni nadie a quien recurrir,
se instaló en el recién fundado Colegio Adventista del
Plata donde estudió enfermería y fundó su familia. Pagó
el precio de la profecía, pero resultó bendecido.
También evoco el caso de Nicolás y Angélica,
quienes recibieron en su hotel, el único hospedaje de
Benito Juárez, en la provincia de Buenos Aires, a un
colportor que antes de irse les dejó un Conflicto de los
Siglos. Al leer este libro en familia, decidieron vender el
hotel, un próspero negocio, a fin de poder guardar el
sábado, y se trasladaron a la Capital Federal con toda su
familia. También pagaron el precio de la profecía, y
fueron grandemente bendecidos.
El autor de estas líneas es el bisnieto de Egidio y
el tataranieto de Nicolás y Angélica. Gracias a que ellos
pagaron el precio de la profecía un servidor es uno de los
seis pastores que esta sencilla familia entregó a la iglesia.
Si estás dispuesto a que estas verdades se profundicen y
pronto triunfen, te propongo que asumas el costo.
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