El nombre con el que se conocen estas sensaciones punzantes, de picor, de hormigueo, quemazón o entumecimiento es el de parestesia.
Por lo general, no hay que preocuparse por que las manos se duerman de repente, o porque lo haga cualquier otra parte del cuerpo. En la gran mayoría de las ocasiones tiene que ver por la presión sobre un nervio sensitivo durante un periodo de tiempo. Sin embargo, hay más razones del padecimiento de una parestesia temporal o transitoria y por este motivo conviene conocer 9 señales que nos da el cuerpo, sobre todo cuando esta afección sucede con gran frecuencia.
Migraña
Aproximadamente el 15% de las personas que padecen de migraña sufren este tipo de cosquilleo en la cara, mientras que un 13% lo siente en las piernas o los brazos. En ocasiones el dolor es tan fuerte que el paciente pierde la movilidad del área afectada. En este tipo de casos se recomienda hacer un cambio en la dieta, disfrutar de mayor tiempo para el descanso, practicar meditación o yoga, etcétera, cambios en el estilo de vida que pueden ser beneficiosos para dejar de sufrir este problema.
Ictus o accidentes cerebrovasculares
Los ictus o accidentes cerebrovasculares son la causa más peligrosa que puede provocar que las manos se duerman. Si este síntoma se sufre junto a trastornos en el habla y la visión, dolor de cabeza y confusión o perturbaciones en las extremidades inferiores, se debe actuar con rapidez y avisar a los servicios de emergencias, ya que la vida de la persona puede estar en peligro.
Neuralgia de plexo braquial
El plexo braquial es la red de nervios que envía las señales desde la médula espinal hasta el hombro, el brazo y la mano. La neuralgia es una inflamación del tejido circundante que puede ocasionar un fuerte dolor que se sigue seguido de un entumecimiento de las manos.
Neuropatía diabética
Si los niveles de azúcar en la sangre están altos de forma continuada, los nervios pueden sufrir lesiones, lo que provoca sensación de hormigueo en las manos, ardor o dolor profundo en las piernas y los pies. El 50% de las personas que padecen diabetes desarrollan la neuropatía en algún momento de su vida.
Síndrome del túnel carpiano
El síndrome del túnel carpiano es la principal causa del hormigueo en las manos, y es común que la sufran aquellas personas que tienen actividades relacionadas con el trabajo monótono y repetitivo con las manos, como sucede en el caso de escritores, músicos, sastres o programadores, entre otros.
Los movimientos repetitivos y constantes de los dedos provocan que los ligamentos pasen por el estrecho canal del túnel, que pasa a inflamarse. Cuando el nervio queda atrapado por el estrecho túnel de la muñeca es cuando se produce dicho hormigueo.
Osteocondrosis cervical
Aquellos que padecen de una perturbación en la columna vertebral que provoca la compresión de un nervio y la interrupción del flujo sanguíneo, provocando hormigueo en las manos.
Alteraciones en la circulación sanguínea
Si se te duermen las manos, aunque es más habitual en el caso de los miembros inferiores, puede deberse a alteraciones en la circulación sanguínea. Algunas enfermedades como la aterosclerosis es una de las más comunes que generan hormigueo en manos y brazos.
Codo de tenista
La epicondilitis o codo de tenista lo sufren aquellas personas que utilizan el codo de forma repetitiva. Es una inflamación o lesión en el tendón que puede provocar el hormigueo en los dedos de la mano o en todo el brazo.
Esclerosis múltiple
La destrucción de las membranas cerebrales y nerviosas de la médula espinal interrumpe el paso de los impulsos nerviosos, haciendo que se pierda sensibilidad a la par que provoca sensación de hormigueo y adormecimiento en las manos.
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