El nombre de William Blake aparece a menudo en los círculos de poesía, sin embargo, pocas personas saben que también fue un artista. Las pinturas y la poesía de William Blake estaban arraigadas en el movimiento del Romanticismo, aunque su trabajo incluso fue considerado como excéntrico por otros románticos. Se decía que las obras de arte y los poemas de William Blake estaban inspirados en visiones y encuentros con apariciones.
La vida de William Blake
| Nacionalidad | Inglés |
| Fecha de nacimiento | 28 de noviembre de 1757 |
| Fecha de fallecimiento | 12 de agosto de 1827 |
| Lugar de nacimiento | Londres, Reino Unido |
| Estilo | Romanticismo |
Si bien muchas personas conocen a William Blake hoy en día, fue ignorado en gran medida por sus contemporáneos y académicos durante su vida. Sin embargo, fue considerado como un visionario por un pequeño grupo de patrocinadores y compañeros de apoyo. ¿Qué pintó Blake? El arte de William Blake representaba un mundo experimentado en su imaginación, sueños y visiones; una realidad fantástica muy alejada de la vida de pobreza que sufría a diario como artista luchador.
Retrato en frontispicio de William Blake grabado por Luigi Schiavonetti según Thomas Phillips para The Grave de Robert Blair, 1808 Essick Collection; William Blake, Dominio público, vía Wikimedia Commons
Niñez
Cuando era niño, William Blake a menudo faltaba a la escuela, prefiriendo pasar sus días haciendo bocetos de obras de arte griegas y leyendo poesía. Nació en una familia de clase media y tuvo una infancia relativamente normal creciendo en el Soho. Sin embargo, alrededor de los ocho años de edad, comenzó a experimentar visiones y le dijo a su familia que había ángeles en los árboles fuera de la ventana de su habitación.
Si bien esto preocupaba a sus padres, reconocieron su talento artístico desde el principio y lo inscribieron en la Academia Henry Par cuando tenía 10 años de edad.
Formación temprana
Aunque la academia era una institución muy respetada, las tarifas eran muy altas y la familia de Blake luchaba por hacer los pagos. Blake tuvo que irse después de cuatro años en la academia y a partir de entonces trabajó como aprendiz del renombrado grabador James Basire. El trabajo de Basire tendría un impacto masivo en las ilustraciones de William Blake, especialmente sus bocetos de Edificios góticos que produciría in situ.
Retrato de James Basire, el maestro de William Blake; Dmitrismirnov, CC BY-SA 3.0, vía Wikimedia Commons
Cuando no trabajaba como aprendiz, Blake pasaba su tiempo estudiando obras de arte de la Edad Media y Épocas renacentistas, especialmente las obras de Miguel Ángel, Rafael y Alberto Durero. Su aprendizaje terminó cuando tenía 21 años y posteriormente estudió en la Real Academia.
Sin embargo, no estudiaría allí por mucho tiempo, ya que encontró que los principios artísticos del presidente de la Academia eran sofocantes y poco imaginativos.
Luego trabajó como grabador para varias publicaciones comerciales, sin embargo, sintió un llamado a promover una renovación del interés en el Artes griegas. Para Blake, las artes griegas eran parte de una tradición perdida que conectaba espiritualidad y arte. Las pinturas de William Blake fueron producidas de la misma manera que los antiguos griegos: guiado por visiones y mitología, sin embargo, a pesar de afirmar ser guiado por ángeles, nunca se ajustó a ninguna doctrina oficial y nunca asistió a ningún servicio religioso.
Autorretrato (1802) de William Blake; William Blake, Dominio público, vía Wikimedia Commons
En 1782, William Blake conoció a Catherine Boucher, y los dos se casaron después de un breve noviazgo. Eran una pareja sin hijos, por lo que se les concedió tiempo libre en el que Blake pudo enseñar a su esposa a leer y escribir, así como a dibujar. Ella misma terminaría siendo una artista bastante competente, a menudo ayudando a Blake con su trabajo.
William Blake produjo su primer libro de poesía, «Poetical Sketches», en 1783, pero no fue un éxito financiero.
Página de la impresión original de 1783 de William Blake Bocetos poéticos. Escaneo de una de las 23 copias originales, en la colección de la Biblioteca Morgan; William Blake, Dominio público, vía Wikimedia Commons
Sin embargo, su trabajo como grabador fue constante, y pudo mantenerse a flote asumiendo encargos de grabado. Después de que su padre falleció, Blake abrió un taller con su herencia, junto con su colega James Parker.
En 1788, William Blake produjo su folleto de ilustraciones poéticas llamado There Is No Natural Religion, que fue el primer ejemplo de su técnica de «impresión iluminada». Este método le permitió combinar texto e imágenes dentro de un grabado, lo que le permitió impartir poemas iluminados junto con obras de arte visionarias.
Robert, el hermano de Blake, también fallecería durante este tiempo, y Blake, profundamente impactado por su fallecimiento, comenzó a decirle a la gente que su hermano había comenzado a visitarlo e inspirarlo a través de visiones.
Versión de 1794 de la Lámina 2 de la Serie B de There Is No Natural Religion (1788) de William Blakes; William Blake, Dominio público, vía Wikimedia Commons
Período de madurez
La serie Large Color Prints fue creada por Blake en 1795, en la que representó personajes de las Escrituras, así como las obras de Milton y Shakespeare. Blake a menudo se mezclaba socialmente en varias reuniones culturales alrededor de la ciudad de Londres, pero no era necesariamente un individuo tranquilo, y a menudo se metía en acalorados debates sobre sus filosofías sobre su arte y las tendencias actuales. Las opiniones espirituales y políticas de William Blake se consideraban bastante radicales, y no tenía ningún deseo de ajustarse a las normas de la sociedad.
Blake también conoció a Thomas Butts en 1795, un individuo que encargaría muchas de las pinturas de William Blake, convirtiéndose en su principal mecenas a lo largo de este período.
Dios juzgando a Adán (1795) de William Blake, una de las pinturas de la serie Large Color Prints del artista; William Blake, Dominio público, vía Wikimedia Commons
Butts le dio a Blake un control creativo total sobre el tema de sus obras, prometiendo comprar lo que eligiera crear. Blake estaba emocionado de recibir una guinea por cada pequeña pintura que creaba, ¡y tenía un encargo para 50 de ellas! Se le permitiría expresarse libremente y no tener que ajustarse a otro estilo o tema que no le interesara. Sin embargo, no experimentaría esas mismas libertades cuando William Haley, el poeta, le encargó en 1800 producir algunas obras en su finca. Blake encontró el trabajo extremadamente servil y frustrante y pronto cayó en un estado de depresión.
Blake sintió que estaba comprometiendo su integridad artística y los dos poetas no podían verse cara a cara, a tal grado que su amistad terminó después de una acalorada discusión, después de la cual Haley declaró que Blake era su enemigo jurado.
El trabajo de grabado comenzó a secarse y encontrar trabajo resultó difícil, a pesar de que era bien conocido entre los círculos artísticos de Londres. Las obras de arte de William Blake a menudo eran consideradas como arte forastero por el establecimiento, ya que no había asistido a la Royal Academy como muchos de sus compañeros y, por lo tanto, no obtuvo grandes comisiones públicas. Blake se resintió de que sus obras nunca se encargarían públicamente y declaró que tal vez debería crear frescos móviles para poder exponer sus obras a una audiencia que parecía «sin visión».
Retrato de William Blake (1807) según Thomas Phillips; Thomas Phillips, Dominio público, vía Wikimedia Commons
Las aparentes visiones y visitas de William Blake tampoco fueron bien recibidas por el público, y muchos asumieron que simplemente se estaba volviendo loco después de que comenzó a afirmar que artistas maestros como Miguel Ángel lo habían visitado en visiones y le habían impartido consejos. Era una figura orgullosa y algo egoísta, tal vez demasiado consciente de sus propios talentos, a menudo diciendo a sus clientes que su trabajo era de la misma calidad que los de Rafael y otros.
Se convirtió en una figura cada vez más solitaria debido a su comportamiento errático y creencias extrañas, sin embargo, continuó produciendo consistentemente, impulsado por su creencia en los poderes milagrosos de la imaginación y la fe.
Las ilustraciones de William Blake retrataban la realidad tal como la percibía, y creía que la realidad era una construcción de la imaginación de todos modos, y que diferiría enormemente de un individuo a otro. Regularmente declaró que fue visitado y guiado por Arcángeles y figuras divinas como la Virgen María. Esto llevaría a Blake a ser despedido como loco, y a pesar de sus talentos obvios, nunca alcanzó las mismas alturas que los hombres a su alrededor que no tenían ninguna de sus habilidades artísticas.
Trabajos posteriores
William Blake muy rara vez abandonó la ciudad en la que nació a lo largo de toda su vida, sin embargo, su amor por el arte significaba que había adquirido muchas clases.El arte imprime de todo el mundo y era un hombre muy culto a pesar de su falta de mundanidad. Desafortunadamente, terminaría vendiendo la mayor parte de su colección durante un período financiero particularmente difícil en su vida. Su suerte cambiaría en 1818 cuando se encontró con la persona que se convertiría en otro mecenas sustancial de sus obras de arte, John Linnell.
Muchas de las obras de arte de William Blake de su período posterior fueron encargadas por Linnell, quien también compró muchas de las pinturas de William Blake que ya habían sido producidas.
Linnell también le presentaría a los Antiguos, un grupo de artistas que eran todos admiradores de las pinturas de William Blake y que se habían unido por su apreciación compartida de sus obras. Compartían los mismos puntos de vista filosóficos sobre la vida y el universo, y Blake de repente se encontró pasando de una etapa de relativa oscuridad a ser venerado como una especie de profeta o figura líder. Samuel Palmer, el miembro de los Antiguos que mostró la mayor habilidad artística, sería considerado como el artista que más encarnó el estilo y la estética de Blake.
Retrato de William Blake por John Linnel, 1825; Categoría:William Blake, Dominio público, vía Wikimedia Commons
William Blake luego se mudó al Strand en 1820, quedándose en una pequeña habitación donde pasó sus días haciendo grabados. En 1821 Linnell le encargó la creación de ilustraciones del Libro de Job. Blake tenía en ese momento alrededor de sus 60 años, sin embargo, los que lo rodeaban comentaron que todavía estaba lleno de energía e ideas. Trabajaría directamente hasta el día de su muerte solo cinco años después, dedicado a lo que ahora se considera una de sus obras más importantes, la Divina Comedia de Dante (1824). Unas pocas horas antes de fallecer, todavía estaba dibujando ángeles y usando a su esposa como modelo.
Aunque amado por los antiguos, murió en relativa pobreza y oscuridad, habiendo vendido no más de 20 copias de sus publicaciones en varias décadas.
Página 67 del cuaderno de William Blake, con un dibujo de autorretrato rodeado de texto escrito a mano, 1810; Categoría:William Blake, Dominio público, vía Wikimedia Commons
Legado
Las pinturas y la poesía de William Blake fueron en gran parte olvidadas e ignoradas por toda una generación después de su muerte hasta la década de 1860, cuando Alexander Gilchrist comenzó a investigar la vida de Blake para su biografía, The Life of William Blake (1863). Tras el lanzamiento del libro, el trabajo de Blake resurgió y fue muy admirado por los prerrafaelitas como Algernon Charles Swinburne y Dante Gabriel Rossetti. Sin embargo, sólo en el siglo 20 las ilustraciones y escritos de William Blake se hicieron plenamente apreciados.
William Blake no solo fue un poeta prolífico, sino también un artista magistral que algunos consideran uno de los mejores que surgieron de Gran Bretaña.
Mientras que sus compañeros románticos como Juan Constable y J. M. W. Turner se inspiraron más en los paisajes, las ilustraciones de William Blake representaban su mundo interno de reinos imaginativos llenos de seres mitológicos y entidades espirituales. Las pinturas de William Blake fueron creadas para representar un vistazo a la eternidad, el mundo espiritual divino, tal como lo percibe un visionario. Para sus seguidores, el arte de William Blake retrataba una instantánea de una realidad que se extendía mucho más allá de los confines del lienzo, visible a través de su imaginación.
Retrato de William Blake (1807) de Thomas Phillips; Thomas Phillips, Dominio público, vía Wikimedia Commons
A pesar de sus enormes talentos, fue percibido como un personaje muy extraño y posiblemente loco, y esto inhibió en gran medida su posición en el mundo del arte. Para muchas personas, las obras de arte de William Blake no eran más que las divagaciones visuales de un hombre que se volvía loco, sin embargo, para otros, sus creencias provenían de una profunda conexión con el mundo espiritual, y que no estaba loco, sino más bien un místico incomprendido que impartió sus visiones a través de su arte. Debido a su influencia en el movimiento del Romanticismo, muchos posteriores movimientos artísticos fueron impactados directa o indirectamente por sus obras, como Simbolismo y Modernismo.
No son solo las ilustraciones de William Blake las que han dejado un legado impresionante, sino que su poesía también ha tenido una influencia en figuras literarias notables como Allen Ginsberg, W.B. Yeats, Walt Whitman, así como en muchos otros escritores, poetas y autores de renombre. Sus palabras e imágenes tendrían un impacto en toda una generación en la década de 1960 cuando sus obras fueron redescubiertas. y reinterpretado a través de la lente de la década psicodélica.
Al abrazar la libertad artística y una imaginación espiritualmente inclinada, Blake produjo obras de arte duraderas que todavía muestran una influencia en la cultura pop hasta el día de hoy.
La firma de William Blake; Biblioteca del Congreso, dominio público, vía Wikimedia Commons
Logros
Al igual que los otros románticos como Percy Bysshe Helly y Samuel Taylor Coleridge, Blake rechazó la formalidad y precisión del movimiento neoclásico, así como la cultura industrializada que favorecía la mecanización y el reductivismo científico. Creía que lo único que podía unir la realidad como realmente debería ser y tal como era, era la aplicación de la imaginación. Blake no solo fue un artista, sino también un poeta, y debido a sus innovaciones de impresión, pudo combinar ambos en sus grabados que presentaban texto junto con sus imágenes.
Las exigencias de su imaginación requerían que constantemente empujara el oficio hacia adelante para descubrir nuevas técnicas que le permitieran retratar sus visiones como mejor le pareciera.
Las obras de arte y la poesía de William Blake estaban llenas de deidades mitológicas, muchas de las cuales eran de su propio diseño, cada una de las cuales abarcaba un cierto conjunto de principios o ideales que eran importantes para Blake, como Los, Orco y Urizen. Para Blake, estos personajes eran personajes simbólicos que interactuarían entre sí en sus obras, creando una narrativa metafórica en la que podía impartir ciertas ideas sobre el mundo tal como lo veía. Sin embargo, no eran personajes ficticios para él, sino seres que existían fuera del mundo en el que vive la mayoría de la gente.
En su poesía, a menudo imaginaba escenarios donde los resultados de estos conflictos mitológicos tendrían un impacto significativo en el destino del mundo cotidiano, como el conflicto entre la imaginación y la lógica y la pureza y la lujuria.
Blake mostró un interés en los eventos política y socialmente orientados a lo largo de su vida, y sus puntos de vista de estos eventos a menudo se mostraban simbólicamente en sus obras. Estos puntos de vista incluían su pensamiento sobre la iglesia, que sentía que actuaba como una fuerza restrictiva y opresiva sobre la creatividad y la imaginación. Sin embargo, no era anticristiano, sino que hizo una distinción entre el Dios enojado y celoso del Antiguo Testamento, y el Dios más amoroso del Nuevo Testamento.
William Blake en Youth & Age (c. siglo 19) por George Richmond; Categoría:William Blake, Dominio público, vía Wikimedia Commons
Influencias artísticas y políticas
La mayor influencia artística inicial de Blake fueron los artistas de la era del Renacimiento como Raphel y Miguel Ángel. Muchas de las pinturas de William Blake muestran su amor por su uso de la forma, evidencia de las muchas horas que pasó faltando a la escuela para tratar de reproducir las obras él mismo.
Sin embargo, esta no sería la única influencia en el arte de William Blake: su trabajo fue a menudo una reacción a los problemas políticos y sociales de la época.
Las obras de arte de William Blake retrataron sus sentimientos políticos sobre diversos temas, como su odio a la esclavitud, como es visible en su obra, A Negro Hung Alive by the Ribs to the Gallows (1796), que produjo con la esperanza de sorprender a las audiencias potenciales al exponerlas a las duras verdades del comercio de la esclavitud.
Ilustración de William Blake Un negro colgado vivo de las costillas a una horca (1796); William Blake, Dominio público, vía Wikimedia Commons
Blake también fue un defensor de la autonomía y los derechos de las mujeres, perturbado por la forma en que muchas de ellas fueron obligadas a casarse, como es evidente en Visiones de las Hijas de Albion (1793), donde retrató a las mujeres como esclavizadas por sus votos.
Debido a sus convicciones con respecto a las mujeres, a menudo ha sido abrazado por varios movimientos que aplicaron su uso del simbolismo en sus propias obras.
También fue visto como una figura inspiradora por el movimiento de amor libre del siglo 19 que sentía que el matrimonio era una forma de esclavitud y que las leyes deberían relajarse cuando se trataba de preferencias sexuales y actividades como la homosexualidad y la prostitución. Este movimiento eventualmente culminaría en mayores libertades personales para las mujeres, especialmente su sexualidad y autonomía corporal, como el movimiento de control de la natalidad del siglo 29.
Frontispicio para la serie Visiones de las Hijas de Albion (1793) de William Blake; Guillermo Blake, dominio público, vía Wikimedia Commons
Por supuesto, una de las mayores influencias en las ilustraciones de William Blake fueron sus alucinaciones nocturnas y visitas fantasmales, algo que dijo haber experimentado desde una edad muy temprana. Estas visiones religiosas a menudo contenían entidades que impartían mensajes que querían que él incorporara a sus obras. Había escrito libros de acompañamiento, que presentaban un panteón de sus propias deidades que luego representó en sus obras de arte. Sin embargo, afirmó no solo ver visiones angélicas, y una vez dijo que había visto a Satanás parado en la escalera dentro de su casa.
El también poeta romántico, William Wordsworth, declaró una vez que a pesar de que consideraba a Blake como un loco absoluto, todavía encontraba su locura mucho más intrigante que las obras comparativamente sanas pero aburridas de escritores como Walter Scott y Lord Byron.
Otros escritores, como John William Cousins fueron más elogiosos con respecto a Blake, afirmando que era un alma amorosa y humilde, en gran parte ignorada y olvidada, a excepción de unos pocos seguidores ardientes, que a pesar de su falta de riqueza, vivían una vida llena de imaginación y visiones celestiales.
Una página de título de un escaneo de Gilchrist Vida (1880), que contiene una serie de láminas que reproducen obras de poetas y pintores. Esta página contiene un epigrama e ilustración de William Blake; después de John Linnell, (D G Rossetti?), Dominio público, vía Wikimedia Commons
William Blake consideraba que el arte del clasicismo era pagano en su simbolismo y consideraba la Biblia como la base del verdadero arte y la obra poética más significativa jamás escrita. El principal mecenas de Blake, Thomas Butts, encargó al artista que creara varias ilustraciones de las Escrituras durante un período de 10 años, que se concentraron principalmente en la representación de escenas del Antiguo Testamento.
Sin embargo, sus obras no solo contenían simbolismo religioso, y muchos psicólogos como June Singer han sugerido que también contenían simbolismo que se obtenía de una parte subconsciente de la psique.
También encontraron paralelismos entre las ideas y el pensamiento de Blake y Carl Jung, el renombrado psicoanalista. Sus obras de arte y escritos parecían contener muchos elementos de simbolismo que estaban asociados con el subconsciente, pero el propio Jung sentía que estas obras eran representaciones artísticas de estos símbolos y no representaciones legítimas de procesos inconscientes reales.
Retrato de William Blake por John Linnell, 1820; John Linnell, Dominio público, vía Wikimedia Commons
Obras notables
Aunque fue pasado por alto en gran medida en su vida, Blake ahora es muy apreciado tanto en los círculos artísticos como literarios. Desde entonces, muchos han tratado de emular sus obras y han tratado de alcanzar los mismos niveles de descubrimiento interno y expresión externa que él había alcanzado. Estas son algunas de sus obras más importantes.
| Arte | Fecha | Medio | Ubicación |
| Canciones de inocencia y experiencia | 1789 | Pluma y acuarela | Varias ediciones |
| Los días antiguos | 1794 | Aguafuerte | Colección privada |
| Lástima | 1795 | Grabado en relieve | Museo Metropolitano de Arte, Nueva York |
| Isaac Newton | 1795 | Grabado | Tate Museum, Reino Unido |
| El gran dragón rojo y La mujer vestida de sol | 1805 | Tinta, acuarela sobre papel | El Museo de Brooklyn, Nueva York |
| Los ángeles que se ciernen sobre el cuerpo de Cristo en el sepulcro | 1805 | Pluma, acuarela, sobre papel | Victoria and Albert Museum, Londres |
| Parábola de las vírgenes sabias y necias | c. 1826 | Acuarela, pluma, sobre grafito | El Museo Metropolitano de Arte, Nueva York |
Parábola de las vírgenes sabias y necias (c. 1826) de William Blake; William Blake, Dominio público, vía Wikimedia Commons
Preguntas Frecuentes
¿Qué pintó Blake?
William Blake no quería ajustarse a los estilos tradicionales de la Academia, que le parecían aburridos y sofocantes. En cambio, quería reproducir las imágenes que experimentó en sus visiones, incluso afirmando que ciertos maestros lo habían visitado e impartido conocimiento e información que querían que incorporara a sus obras. Afortunadamente se encontró en la afortunada posición de poder pintar lo que quisiera después de ser empleado para pintar por uno de sus mayores clientes, John Linnell. Linnell compró muchas de sus obras preexistentes, así como encargó nuevas piezas. Este enabllevó a Blake a crear obras de arte divinamente inspiradas que presentaban personajes que parecían sacados directamente de la Biblia o Mitología griega sino que en realidad eran seres de su propio diseño, creados para representar los diversos aspectos de nuestra propia psique.
¿Qué influyó en las pinturas de William Blake?
William Blake se consideraba a sí mismo como una persona espiritual, y sus obras de arte eran la encarnación de sus ideas religiosas. Sus primeras influencias fueron los maestros como Miguel Ángel y Rafael. A menudo incluso iba y copiaba sus obras en lugar de asistir a la escuela. También fue fuertemente influenciado por los problemas políticos y sociales de su tiempo, promoviendo los derechos de las mujeres y la abolición de la esclavitud. Estos temas fueron presentados en sus obras para que sus mensajes pudieran llegar a un público más amplio. A pesar de no ser bien recibidas por la gran mayoría de la gente, estas obras fueron utilizadas más tarde por varios movimientos para retratar sus propias luchas.
¿Qué son los manuscritos iluminados?
Debido a que William Blake era a la vez escritor y artista, idealmente quería incorporar ambos principios en sus obras de arte. Este tipo de manuscritos habían sido creados muchos años antes, pero no utilizando tecnología de impresión de placas de cobre. Blake logró encontrar una manera de agregar texto a sus platos, lo que le permitió lograr el resultado que deseaba. Ahora podía contar una historia completa agregando una narrativa literaria a sus ilustraciones, lo que le permitía incorporar todos los diversos símbolos y mensajes que había querido incluir anteriormente.
¿Qué estilo era el arte de William Blake?
William Blake puede considerarse un artista visionario, pero el movimiento con el que se le asocia más comúnmente es el romanticismo. Al igual que otros románticos, quería alejarse del estilo académico del arte que se basaba en gran medida en reproducciones precisas de estilos clásicos más antiguos y prefería un enfoque más emotivo y dramático del arte. Su obra era única, incluso entre otros artistas del mismo movimiento, y pasarían muchos años antes de que fuera plenamente apreciada. Solo muchos años después de su muerte Blake realmente recibió el reconocimiento que sus seguidores y partidarios sintieron que merecía, y hoy es reconocido como una figura que influyó tanto en el mundo del arte como en el de la literatura con sus obras de arte visionarias. Desde los románticos hasta los modernistas, su estilo e ideas todavía se pueden ver reflejadas en las obras de las mentes creativas que lo siguieron.
