CERROS CHALLHUACO, BLANCO Y ÑIRECO | BARILOCHE
cerca de San Carlos de Bariloche, Río Negro (Argentina)
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Fotos de la ruta
Descripción del itinerario
Travesía por los Cerros Challhuaco, Blanco y Ñireco. Partiendo desde el refugio Neumeyer hasta el complejo a la entrada del camino.
El camino es muy largo. Lleva muchas horas y se requiere de mucha orientación. En gran parte no hay sendero, ni pircas, ni marcas.
No hagan caso a la última parte de la bajada, porque no fue por sendero. Seguimos un track que no ayudó mucho y nos llevó a una zona cerrada de árboles. Pudimos salir encontrando un viejo camino de tierra en el mapa satelital.
Bien temprano llegamos al acceso al camino que lleva hacia el refugio Neumeyer (chequear los horarios antes). Allí dejamos un auto y con otro hacemos todo el camino hasta el refugio. El camino puede ser complicado en época invernal y no se puede acceder con cualquier vehículo.
El refugio se encuentra a unos 1300msnm. El refugio ahora está compuesto por unos domos (el viejo refugio fue quemado).
Partimos por el sendero, comenzando a subir lentamente mientras avanzamos dentro del bosque. El recorrido dentro del bosque son unos 2,5km. Por ser época otoñal, el bosque está lleno de colores. A medida que avanzamos, las lengas van perdiendo altura y en la última zona ya son achaparradas. A 1,5km del refugio está la laguna de los patos, que se pasa por el costado, y a unos 100 metros de allí, veremos el cartel de desvío para ir al mirador de la laguna verde, donde habita la ranita de challhuaco (especie protegida).
Al salir del bosque, la pendiente aumenta un poco, y de forma constante será todo el camino hasta la cumbre del Cerro Challhuaco. La cumbre está a ~4km del refugio. Desde allí vemos toda la estepa, con los bosques de lenga coloridos, al oeste ya divisamos la cumbre del Cerro Blanco y la cumbre sur del Cerro Ñireco.
Después de una pequeña parada, seguimos hacia el norte, bajando un poco para conectar con el filo que nos lleva hasta el Cerro Blanco. Es un col que divide los valles, y donde tendremos que volver a subir para llegar a la cumbre del Blanco, que es el punto más alto de todo el camino.
Al coronar la cumbre del Cerro Blanco, divisamos el Tronador y vemos los cerros Ventana, Meta, Pontoneros, Catedral y más.
Para ir al Ñireco, debemos bajar de la cumbre por donde subimos y poder encarar el otro filo faldeando un poco.
Seguimos bastante rato por la margen derecha, pero parece ser mejor mantener el filo. Aquí hay algunas subidas y bajadas para llegar a la última subida de la cumbre sur del Cerro Ñireco.
En estos filos no hay pircas ni señalización.
Al coronar la cumbre sur, vemos la cumbre norte y sabemos que todavía falta mucho. Seguimos por el filo hasta llegar a la cumbre norte y ahí comenzamos el descenso, que tiene tramos bastante abruptos.
La bajada lleva hasta "el volcancito", que se pasa por la izquierda. A esta altura ya nos ibamos guiando porque sabíamos por donde teníamos que pasar, no por marcas.
Al pasar una pampita al norte del volcancito, empieza la vegetación más frondosa y decidimos bajar por un cañadón, que al final nos llevó hacia zona de vegetación más cerrada y donde nos agarró la noche. Aquí nos orientamos para localizar un viejo camino, que hace tiempo está en desuso y ya tiene pinos crecidos, pero se puede avanzar.
Siguiendo esos caminos, llegamos a la ruta y al auto que dejamos en el complejo a la mañana, para poder volver a buscar el otro auto que quedó en el refugio Neumeyer.
La zona es muy linda, mezcla de zona andina y estepa.
El camino es muy largo. Lleva muchas horas y se requiere de mucha orientación. En gran parte no hay sendero, ni pircas, ni marcas.
No hagan caso a la última parte de la bajada, porque no fue por sendero. Seguimos un track que no ayudó mucho y nos llevó a una zona cerrada de árboles. Pudimos salir encontrando un viejo camino de tierra en el mapa satelital.
Bien temprano llegamos al acceso al camino que lleva hacia el refugio Neumeyer (chequear los horarios antes). Allí dejamos un auto y con otro hacemos todo el camino hasta el refugio. El camino puede ser complicado en época invernal y no se puede acceder con cualquier vehículo.
El refugio se encuentra a unos 1300msnm. El refugio ahora está compuesto por unos domos (el viejo refugio fue quemado).
Partimos por el sendero, comenzando a subir lentamente mientras avanzamos dentro del bosque. El recorrido dentro del bosque son unos 2,5km. Por ser época otoñal, el bosque está lleno de colores. A medida que avanzamos, las lengas van perdiendo altura y en la última zona ya son achaparradas. A 1,5km del refugio está la laguna de los patos, que se pasa por el costado, y a unos 100 metros de allí, veremos el cartel de desvío para ir al mirador de la laguna verde, donde habita la ranita de challhuaco (especie protegida).
Al salir del bosque, la pendiente aumenta un poco, y de forma constante será todo el camino hasta la cumbre del Cerro Challhuaco. La cumbre está a ~4km del refugio. Desde allí vemos toda la estepa, con los bosques de lenga coloridos, al oeste ya divisamos la cumbre del Cerro Blanco y la cumbre sur del Cerro Ñireco.
Después de una pequeña parada, seguimos hacia el norte, bajando un poco para conectar con el filo que nos lleva hasta el Cerro Blanco. Es un col que divide los valles, y donde tendremos que volver a subir para llegar a la cumbre del Blanco, que es el punto más alto de todo el camino.
Al coronar la cumbre del Cerro Blanco, divisamos el Tronador y vemos los cerros Ventana, Meta, Pontoneros, Catedral y más.
Para ir al Ñireco, debemos bajar de la cumbre por donde subimos y poder encarar el otro filo faldeando un poco.
Seguimos bastante rato por la margen derecha, pero parece ser mejor mantener el filo. Aquí hay algunas subidas y bajadas para llegar a la última subida de la cumbre sur del Cerro Ñireco.
En estos filos no hay pircas ni señalización.
Al coronar la cumbre sur, vemos la cumbre norte y sabemos que todavía falta mucho. Seguimos por el filo hasta llegar a la cumbre norte y ahí comenzamos el descenso, que tiene tramos bastante abruptos.
La bajada lleva hasta "el volcancito", que se pasa por la izquierda. A esta altura ya nos ibamos guiando porque sabíamos por donde teníamos que pasar, no por marcas.
Al pasar una pampita al norte del volcancito, empieza la vegetación más frondosa y decidimos bajar por un cañadón, que al final nos llevó hacia zona de vegetación más cerrada y donde nos agarró la noche. Aquí nos orientamos para localizar un viejo camino, que hace tiempo está en desuso y ya tiene pinos crecidos, pero se puede avanzar.
Siguiendo esos caminos, llegamos a la ruta y al auto que dejamos en el complejo a la mañana, para poder volver a buscar el otro auto que quedó en el refugio Neumeyer.
La zona es muy linda, mezcla de zona andina y estepa.
Puntos de interés
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